Isack Hadjar, desolado en el GP de Australia

Isack Hadjar, desolado en el GP de Australia Reuters

F1

Accidente de un monoplaza de F1 en las calles de Tokio antes del GP de Japón: otro mal día para los pilotos de Red Bull

Un fallo durante una exhibición urbana vuelve a exponer la presión sobre el joven Isack Hadjar antes de Suzuka.

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La familia Red Bull de F1 volvió a quedar en evidencia en un momento inoportuno. Esta vez, en pleno corazón de Tokio, durante una exhibición organizada en las calles de la capital japonesa, el joven piloto francés Isack Hadjar protagonizó un nuevo episodio desafortunado que encendió las alarmas en la escudería.

El evento, pensado como un acercamiento de la Fórmula 1 al público japonés antes del Gran Premio en Suzuka, se convirtió en un bochorno inesperado. Hadjar, de apenas 20 años, perdió el control de su monoplaza al encarar una horquilla complicada del recorrido urbano.

Su monoplaza giró de forma prematura al tomar la curva y golpeó el bordillo, dañando visiblemente el alerón delantero, aunque el impacto fue a baja velocidad.

El accidente, aunque menor en términos técnicos, fue simbólicamente doloroso para un piloto que ya viene arrastrando una carga de presión considerable desde su debut en Australia, donde protagonizó lo que muchos califican como "el peor estreno de la historia" en la Fórmula 1. En aquella ocasión, Hadjar se estrelló en la vuelta de formación, antes incluso de comenzar la carrera.

Las cámaras captaron al joven saliendo del coche entre lágrimas, una imagen que provocó una dura reacción por parte de Helmut Marko, el siempre exigente asesor de Red Bull. Marko calificó la escena como "un espectáculo bochornoso y lleno de lágrimas", expresión que circuló ampliamente en los medios especializados.

Pese a ese comienzo difícil, Hadjar logró una redención parcial en el Gran Premio de China. Clasificó séptimo, superando a su compañero de equipo Yuki Tsunoda por medio segundo, y mostró un ritmo competitivo durante la carrera. Sin embargo, una mala estrategia de Racing Bulls lo dejó sin sumar puntos.

Isack Hadjar saliendo del coche tras su accidente en el GP de Australia

Isack Hadjar saliendo del coche tras su accidente en el GP de Australia Reuters

Marko, tras ese fin de semana en Shanghái, elogió la resiliencia del francés: "Isack manejó bien su error en Melbourne y ha sido una de las sorpresas de la temporada. No conocía el circuito chino, y aun así rodó al nivel de Yuki", dijo el austríaco.

Pero justo cuando el panorama parecía enderezarse, el incidente en Tokio vuelve a poner a Hadjar en el foco de las críticas, especialmente en un momento de cambios internos en la estructura de Red Bull. Liam Lawson, que había disputado dos carreras con el equipo principal, regresa a Racing Bulls tras ser abruptamente desplazado, en una decisión que, según fuentes cercanas al paddock, molestó a Max Verstappen.

Con Suzuka a la vuelta de la esquina, Hadjar afronta un nuevo desafío: limpiar su imagen en un trazado que no perdona errores y demostrar que su talento puede imponerse a la presión. Red Bull, mientras tanto, observa con atención cada movimiento de sus jóvenes promesas, en busca de equilibrio tras semanas convulsas.