El fin de las navidades impulsa la gripe hacia su pico estacional: los casos se multiplican por 4 en tan solo un mes
Varias comunidades han recomendado ya el uso de mascarillas y otras están reprogramando ingresos e intervenciones no urgentes.
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El fin de las navidades acelera la incidencia de la gripe en España, que multiplica por cuatro los datos de hace tan solo un mes, a la espera de alcanzar su pico probablemente en unas dos semanas.
El Instituto de Salud Carlos III ha publicado el informe de vigilancia de infección respiratoria aguda correspondiente a la semana que fue del 30 de diciembre al 5 de enero y la conclusión es clara: mientras las bronquiolitis comienzan a disminuir y la Covid mantiene su perfil bajo, la gripe está adueñándose de las gargantas y los pulmones de los españoles.
Las urgencias hospitalarias ya están empezando a notar ese incremento de casos, se ven los primeros colapsos, los ingresos se incrementan y se posponen las intervenciones no urgentes para atender la avalancha de gripe.
La última semana de las navidades registró en los centros de salud 62,6 casos de gripe por cada 100.000 personas, un incremento del 48,3% respecto a la semana anterior (cuando el virus superó por primera vez en la temporada el umbral epidémico) y multiplicando por cuatro los 15,5 casos de hace un mes.
Donde más claramente se ve el repunte es en el porcentaje de positivos a gripe entre las personas que acuden a la consulta con síntomas de infección respiratoria: 31,4%, es decir, casi una de cada tres personas. Aumenta casi 10 puntos porcentuales desde el 23,8% de la última semana de 2024.
Neumonías e ingresos en UCI
En cambio, el porcentaje de muestras positivas a virus respiratorio sincitial —responsable máximo de las bronquiolitis, las infecciones respiratorias en niños menores de dos años— comienza a disminuir ligeramente, pasando del 13,7% al 13,4%. La Covid continúa apenas perceptible en estos meses y registra una positividad del 1,1%.
Los ingresos por enfermedad respiratoria grave han aumentado de 19,7 casos por cada 100.000 personas a 23. Aquí la gripe también es protagonista: una de cada cinco personas ingresada da positivo al virus y la incidencia estimada ha pasado de 2,5 casos por 100.000 habitantes a 4,7, es decir, casi el doble desde la semana previa.
El 22,4% de los ingresos por gripe presentaba neumonías y el 6,9% ha tenido que ser ingresado en UCI. La letalidad del virus se sitúa en el 1,7%.
Ante esta situación surgen las primeras tensiones. En el País Vasco se han suspendido los ingresos hospitalarios (salvo pacientes oncológicos) y las cirugías ordinarias para hacer frente a la avalancha de casos de gripe. El sindicato ELA ya ha denunciado la situación, señalando que en los primeros días del año "ha aumentado un 10% la actividad de las urgencias" sin que haya un refuerzo de la plantilla.
En Galicia, los ingresos por el virus han aumentado un 55% en la semana que acabó el 5 de enero. En la atención primaria, las consultas por gripe han aumentado un 29%, incremento que se observa en todos los grupos de edad salvo el de 5 a 19 años.
En Madrid, el sindicato de enfermería Satse ya denunció el colapso en tres hospitales (La Paz, Príncipe de Asturias y Fuenlabrada), a los que ha añadido otros tres más: Ramón y Cajal, Móstoles e Infanta Leonor.
Otro sindicato, el Movimiento Asambleario de Trabajadores de la Sanidad Pública Madrileña (MATS), le suma el 12 de Octubre, denunciando que hay pacientes en urgencias que han esperado entre 12 y 24 horas hasta ser atendidos.
En Andalucía, pese a que la incidencia de enfermedades respiratorias está por debajo de la media española, hay provincias que ya están tensionadas. El servicio de urgencias del sevillano Virgen del Rocío reconoce picos "inusuales" los días 2, 3 y 7 de enero y apuntan que la demanda ha crecido en más de un 10%.
Ya hay dos comunidades, Aragón y La Rioja, que ya han recomendado el uso de mascarilla a los profesionales sanitarios y a los pacientes, estos últimos cuando se encuentran en situación de aglomeraciones, como puede ser el transporte público.
Los expertos prevén que el pico de la gripe esta temporada se alcance en la semana del 6 de enero. Será algo posterior a lo ocurrido en las dos temporadas anteriores (las primeras con cierta normalidad tras la pandemia), cuando este llegó en pleno diciembre o los primeros días de enero.