Cada vez es más habitual que películas independientes consigan conquistar las taquillas—véase la reciente Fallen Leaves—, incluso colarse en los grandes premios. Si 2022 fue el año de Aftersun de Charlotte Wells, 2023 ha estado marcado por las Vidas pasadas de Celine Song.
El filme cuenta la historia autobiográfica de la cineasta, en la que aborda "lo que significa vivir nuestras vidas, crecer y tener que afrontar el paso del tiempo y el hecho de tener que superar etapas con todo lo que dejamos atrás", aseguró la cineasta en una entrevista a El Cultural.
No solo el peso de los amores de la infancia que permanecen idealizados en la memoria, sino también los dilemas identitarios a los que deben enfrentarse los emigrantes que han crecido en sus “nuevos países”.
Nora y Hae Sung, dos amigos de la infancia con una fuerte conexión, se separan cuando la familia de Nora emigra desde Corea del Sur. Dos décadas más tarde se reencontrarán en Nueva York durante una semana.
Tal y como apuntó Manu Yañez, crítico de cine de El Cultural, "si hablamos de referentes fílmicos, el trabajo de Song remite ante todo a aquel halo impresionista, bañado en melodías pop, que Sofia Coppola incorporó al cine indie durante el cambio de siglo".
Recientemente, la ópera prima de la cineasta surcoreana se consagró en la 39.ª edición de los premios Spirit, los llamados Oscar de cine independiente que solo reconocen a películas cuyo presupuesto no supere los 30 millones de dólares, triunfando en las categorías de Mejor película y Mejor dirección.
El largometraje cosechó también cinco nominaciones a los Globos de Oro, aunque no pudo competir contra su gran rival, Anatomía de una caída de Justine Triet, favorita en toda la carrera de premios desde que ganó la Palma de Oro en Cannes.
Este domingo se disputará de nuevo las estatuillas de Mejor Película y Mejor Guion Original en los Oscar, previsiblemente con la misma suerte que en los otros premios. Sin embargo, el filme parece haber conseguido llamar la atención de los grandes maestros del cine.
Tanto de Martin Scorsese, que se ha convertido en el director de cine vivo más nominado con su película Los asesinos de la luna, como de Christopher Nolan, que ha conseguido su segunda nominación a Mejor Director por Oppenheimer tras Dunkerque, y que es muy probable que arrase en los Oscar, como lo ha hecho ya en los BAFTA, los Globos de Oro y los Premios del Sindicato de Actores.
En una entrevista con TIME, Nolan eligió entre las mejores películas de 2023 dos pequeñas películas independientes, entre ellas Vidas pasadas, a la que el cineasta calificó como "sutil de una manera hermosa". Además, se declaró fan del cine independiente, de hecho comenzó su carrera profesional con Memento, pero reconoció que "probablemente nunca volverá a hacerlas".
"Me atrae trabajar a gran escala porque sé lo frágil que es la oportunidad de reunir esos recursos", declaró Nolan a la publicación acerca de seguir con las grandes producciones. "Sé que hay muchos cineastas en el mundo que darían un ojo de la cara por tener los recursos que yo reúno, y siento que tengo la responsabilidad de utilizarlos de la forma más productiva e interesante".
Por otro lado, durante una entrevista Screen Rant en la alfombra roja de la 76.ª edición de los Premios del Sindicato de Directores de América, Song declaró que a Scorsese también le había encantado la película. "Martin Scorsese ama la película, me dijo. Eso es genial, estaba flipando. Dijo que le encanta la película, así que sí, eso es todo. Puedo contarte más cosas, pero creo que debe ser algo privado y secreto que yo también quiero tener".
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El filme está producida por A24, la productora independiente que ha demostrado que puede competir con los grandes estudios en la escena cinematográfica mundial. Dos de sus películas han obtenido el Oscar a Mejor película: Moonlight (Barry Jenkins, 2016) y el año pasado Todo a la vez en todas partes (Dan Kwan, Daniel Scheinert).
De hecho, es probable que pueda llevarse una nueva estatuilla, ya que es la productora de La zona de interés, de Jonathan Glazer, firme candidata a obtener el Oscar a Mejor película extranjera, arrebatándole el premio a La sociedad de la nieve de Bayona.
La productora estadounidense, que distribuye al año entre 18 y 20 películas —casi el doble de películas que otras productoras—, se caracteriza por apostar por historias frescas, innovadoras, acogiendo a proyectos que a priori podrían ser rechazados por las grandes majors. De ahí que haya conseguido atraer tanto a creadores (como Ari Aster, Greta Gerwig, los hermanos Safdie) como al público, despertando un interés creciente hacia el cine independiente.
Además, su éxito reside en la capacidad para mimetizarse con los gustos de las nuevas generaciones, con ingeniosas campañas de marketing enfocadas a las redes sociales, incluso creando su propio merchandising de las películas. Todo ello ha propiciado a que A24 se haya convertido más en una marca que una productora, con un sello de identidad que auna tanto calidad como creatividad.
Poco a poco se aprecia un cambio de paradigma que está consiguiendo que las diferencias entre películas comerciales e independientes se diluyan, sobre todo en términos de taquilla, aunque todavía existan claras diferencias en términos de financiamiento.
Esto ha llevado a un aumento en la demanda de películas fuera del ámbito de los grandes estudios, motivando a los distribuidores y plataformas de streaming a invertir en la adquisición y producción de películas independientes. En el caso de Vidas Pasadas, Filmin ya ha anunciado que la película pasará a formar parte de su catálogo el próximo 10 de marzo.