Las turbulencias bancarias -provocadas por la quiebra de Silicon Valley Bank, la compra de Credit Suisse por UBS o los problemas de Deutsche Bank- “pueden adicionalmente restringir las condiciones de financiación, en la medida en que todo el mundo es más cauteloso y hay menos disponibilidad al crédito”, según ha señalado Carlos Torres Vila, presidente de BBVA, este lunes.

Sin embargo, durante su intervención en la III edición del Wake Up, Spain!, el 'Davos español', organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I en colaboración con EY, Oesia, Microsoft y EMT de Madrid, el primer ejecutivo de la entidad azul ha confiado en que se retomará la senda de la inversión. “Tenemos por delante programas de inversión muy importantes, en torno a la descarbonización, la sostenibilidad y la digitalización”, ha explicado.

Respecto a los problemas mostrados por algunas entidades en las últimas semanas, Torres ha considerado que “hasta cierto punto es normal que puedan general algún contagio, y que puedan extenderse las dudas al resto del sector, pero hay que tener en cuenta que son situaciones muy particulares que no son extrapolables”.

En este sentido, ha defendido que “la banca europea es muy distinta a la banca americana”, ya que las entidades del Viejo Continente tienen “una posición de fortaleza indudable”. En su opinión, por financiación y por liquidez, pero también por su capital y su modelo de negocio, “la situación de la banca europea es muy fuerte”.

“La rentabilidad de la banca europea es también muy saludable, muy distinta de la situación que teníamos después de la crisis europea”, ha añadido. Las rentabilidades muchas entidades son positivas “y en muchos casos por encima del coste de capital”. "Si miramos todos los ratios la posición es de gran fortaleza", ha incidido.

CoCos

Torres también ha tratado que se ha vivido en el mercado de bonos de deuda contingentemente convertibles en acciones (los llamados CoCos o deuda AT1) de la banca, cuyo precio cayó bruscamente el lunes tras conocerse que las autoridades suizas habían decidido amortizar totalmente la inversión en este tipo de instrumentos emitidos por Credit Suisse antes de su venta a UBS, pero no la inversión en acciones-

“Es una situación muy particular de la jurisdicción suiza”, ha señalado. “En Europa, tanto el Banco Central Europeo (BCE), como la Autoridad Bancaria Europea (EBA) y el Fondo Único de Resolución (FUR) dejaron muy claro cuál es la orden de prelación [para la amortización de los diferentes instrumentos con los que cuentan los bancos] de la banca europea”.

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De esta forma, “son los accionistas los primeros que están en la línea para soportar pérdidas en el caso de que las hubiera, antes que otros instrumentos, como los famosos CoCos”.

A pesar de ello, “sí que hubo unos momentos lógicos en el mercado de AT1, por la particularidad suiza de haber hecho que esos instrumentos perdieran valor cuando todavía queda algo de valor en los accionistas”. Sin embargo, “se ha normalizado bastante el mercado y aunque no estamos obviamente en los niveles de precios anteriores a las crisis de marzo, sí que se ha moderado bastante la situación”.

Tipos

En cualquier caso, Torres espera que esta situación de “extensión del miedo” en el sistema bancario, “que no está fundamentada en los parámetros que uno mira cuando analiza la solidez del sistema”, revierta. Por ello, en la entidad piensan que 2023 “va a ser un año mejor de lo que creíamos hace pocas semanas o meses”.

En BBVA esperan un crecimiento mundial en este ejercicio del 3%, frente al 2,8% anticipado en las anteriores previsiones. En el caso de España, las estimaciones apuntan a un crecimiento del 1,6%, “para retomar un crecimiento mayor el año que viene, del 2,6%”. A pesar de ello, ha advertido de que “la incertidumbre es muy grande”. “La inflación va a ser persistente, por eso vamos a tener tipos altos más de lo que se pensaba y eso tiene un efecto”, ha alertado.

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En la III edición del Wake Up, Spain! Torres ha indicado que las últimas turbulencias del sector financiero “nos vuelve a recordar la importancia de una buena gestión de los riegos estructurales”, como el riesgo de tipo de interés o la liquidez, que fue lo que falló en algunas de las entidades que se han visto inmersas en problemas en las últimas semanas.

Frente a estos problemas, Torres ha puesto en relieve las “fortalezas de un banco como BBVA”, con un modelo de negocio “diversificado”, entre distintas regiones del mundo y distintas fuentes de ingresos, y “rentable”. Según ha destacado, la entidad que preside se encuentra “a la cabeza de la rentabilidad de la banca europea, con rentabilidades por encima del 15% sobre los recursos propios”.

Papel de la banca

"A través de tener una situación saludable, de tener rentabilidad", los bancos tienen "un papel muy positivo de en la sociedad". "Contribuimos al desarrollo económico y social de las sociedades donde llevamos a cabo nuestra actividad”, ha defendido.

Según las cifras que ha ofrecido, BBVA creció en más de 11 millones de clientes en 2022, lo que implica un crecimiento del crédito del 13% o unos 42.000 millones. El año pasado la entidad ayudó a más de 100.000 clientes a comprar su vivienda y financió a casi medio millón de empresas. “Esa financiación es fomentar la inversión, que es lo que permite generar empleo y crecimiento económico”, ha subrayado Torres.

“Somos el motor de las inversiones y las inversiones son el motor de la creación de empleo y del progreso de todos los actores económicos. Somos una parte fundamental para poder cumplir con los retos que tenemos por delante. La descarbonización requiere muchísima inversión y los bancos somos esenciales para que esa inversión se pueda financiar” ha subrayado.

Según ha explicado Torres, para que el mundo funcione sin emisiones se necesitan invertir 275 millones de millones de euros en todo el mundo hasta el año 2050. Se trata de “una cantidad gigantesca” que supone el 8% del PIB mundial cada año. “La mayor parte tiene que hacerse desde el sector privado y los bancos somos esenciales para que se puedan financiar”, ha subrayado el presidente de BBVA.