Castillejo, alcaldesa de Rivas: "La salida de la M-50 es vital, aunque Ayuso no colabore. Sólo tenemos la A-3 y se colapsa"
La regidora explica que han detectado que el pico de movilidad en Rivas se produce por las tardes, por lo que necesitan "tres rutas de autobuses urbanos".
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Aída Castillejo es vecina Rivas-Vaciamadrid 'de toda la vida' y desde junio de 2023 también es la alcaldesa de este municipio de más de 100.000 habitantes del sureste de Madrid. La regidora luce con orgullo, aunque también "con mucha responsabilidad", el título de primera edil de una ciudad que forma parte del cinturón rojo de la Comunidad, pues en esta localidad lleva gobernando Izquierda Unida desde principios de los años 90.
Como antigua vecina de Rivas, conoce bien su ciudad. Por eso, es consciente de que sus vecinos necesitan una salida a la M-50, conoce la urgencia de construir un nuevo centro de salud, un nuevo centro educativo y también de mejorar las infraestructuras de transporte público para su municipio.
Además, la ambiciosa agenda urbana que han aprobado en Rivas incluye la construcción de más de 500 viviendas en régimen de protección, un tema que le preocupa, pero del que es firme defensora de seguir siendo "referente en vivienda pública".
PREGUNTA: ¿Cómo afronta esta legislatura y cuáles han sido los principales retos desde que llegó al Ayuntamiento?
RESPUESTA: Mi etapa como alcaldesa comenzó cuando Pedro del Cura, mi antecesor, decidió respetar el acuerdo que marcaba nuestra organización de no superar ocho años en un cargo político. Él dio un paso a un lado, y mi organización confió en mí para continuar con el proyecto. Contar con una experiencia política previa y con un proyecto colectivo sólido ayuda mucho, sobre todo si es conocido y reconocido por la ciudadanía. Pero este proyecto no se trata de las personas que pasan por un cargo, sino que es algo colectivo y eso da la tranquilidad y la seguridad para dar un paso tan importante como es el ser alcaldesa.
P: Es la primera vez que el Partido Popular en Rivas ha conseguido más votos que la izquierda, pasó de 2 a 9 concejales. ¿Qué reflexiones le genera este resultado?
R: Aunque el PP fue la lista más votada, no logró superar al bloque de la izquierda, que mantiene la mayoría gracias a la unión con el Partido Socialista. Es importante entender que lo sucedido en Rivas refleja una tendencia regional y estatal, con un crecimiento del Partido Popular. Sin embargo, la ciudadanía de Rivas sigue apostando por un modelo liderado desde la izquierda y en concreto, que sea la lista de Izquierda Unida, Más Madrid y Verdes Equo la que les represente. Cuando se dice que el PP fue la lista más votada, siempre se olvidan los cerca de 2.000 votos que obtuvo Podemos en el municipio, aunque no logró representación al no llegar al cinco por ciento.
"Con el PSOE compartimos un 'modelo de Rivas' y tenemos una tradición histórica de trabajo conjunto"
P: ¿Cree que este resultado es un reflejo de la oleada política de Ayuso en Madrid? ¿Temió en algún momento por el puesto de alcaldesa?
R: Es posible. No era miedo a perder el puesto de alcaldesa, sino que teníamos que hablar del "modelo Rivas", que ha demostrado su eficacia y es el que los vecinos y vecinas queremos, un modelo de ciudad por el que hemos seguido apostando.
P: ¿Cómo son las relaciones con el PSOE, su socio de gobierno?
R: Venimos de una tradición histórica de trabajo conjunto con el PSOE en Rivas, y aunque somos partidos diferentes y tenemos diferencias, hay una trayectoria común. Hay buena sintonía y compartimos un compromiso con el modelo de ciudad. También tenemos muchas coincidencias programáticas, lo que facilita la gestión diaria.
P: ¿Izquierda Unida es la única alternativa de izquierdas en Rivas? ¿Pueden crecer más? ¿Tienen techo?
R: En las últimas elecciones, nuestra lista subió dos concejales, por tanto, el techo es crecer hasta la mayoría absoluta que alguna vez tuvimos en Rivas. Siempre intentamos crecer porque eso significa que tu modelo tiene más fuerza y vas a tener que negociar menos. Cuando toca hablar con otras fuerzas, tu modelo tiene que sufrir modificaciones y adaptarse en algunos puntos a la otra fuerza. Por eso, como confiamos en nuestro modelo, queremos que lo que sucede en Rivas u otros municipios se pueda aplicar en el conjunto de las comunidades autónomas y del país.
P: Tienen el título de la resistencia del cinturón rojo de Madrid...
R: Es un título que se lleva con mucho orgullo, pero también con mucha responsabilidad. Nosotras siempre decimos que somos parte de una organización política y los éxitos de Rivas son los éxitos de esas organizaciones políticas en el conjunto del estado.
P: Entrando en política municipal para esta legislatura. ¿Cuáles son los principales retos y objetivos?
R: Cerramos el curso con la aprobación de la Agenda Urbana, que es un contrato social con los vecinos y con las vecinas de Rivas. No sólo marca objetivos y deberes para esta legislatura, sino también para las futuras y en esa agenda está lo que queremos para nuestra ciudad. Rivas es una ciudad que se está terminando de cerrar y en ese espacio de cómo cerrarla era fundamental saber qué querían los vecinos y vecinas.
P: La vivienda es un tema crítico a nivel nacional y una de sus grandes batallas. El Gobierno se niega a aplicar la Ley Nacional. ¿Qué supone eso para Rivas? ¿Qué pueden hacer para mejorar la oferta y la situación en su municipio como Ayuntamiento?
R: La vivienda es un problema estructural como país. A Rivas se la ha atacado por cómo subían los precios pero se ha visto que este no es el problema de un municipio. Creo que la juventud ha sido la responsable de que estemos hablando de vivienda a nivel político. Se puede seguir subiendo el salario mínimo, pero si no tenemos la capacidad de acceder a una vivienda, no tendremos vidas dignas. Por otro lado, el tema de la vivienda y la Comunidad de Madrid no se entiende: si este es un problema que tenemos como país, todas las administraciones debemos poner en marcha las herramientas que tengamos. Pero el boicot político que está haciendo la Comunidad a la Ley de Vivienda supone que Rivas no pueda usar algunas herramientas que servirían, por ejemplo, a personas que tienen una casa y quieren ponerla en alquiler o a otras que las quieren alquilar. Cuando Madrid nos impide ser declarados zona tensionada nos impide poner en marcha esas herramientas que en otras comunidades se ha demostrado que funcionan.
"En Rivas el pico de movilidad es por la tarde, por eso pedimos tres rutas urbanas de autobuses que no llegan"
P: ¿Y qué puede hacer Rivas para mejorar esta situación?
R: Rivas tiene que seguir siendo referente de vivienda pública. Nosotros tenemos una Empresa Municipal de Vivienda con sobrada trayectoria y experiencia en lo que tiene que ver con la construcción de vivienda pública. De hecho, la agenda urbana marca que en los próximos años la Empresa Municipal de Vivienda construirá más de 500. Parece una cifra pequeña, pero si un ayuntamiento pequeñito como Rivas es capaz de generar esas nuevas 500 viviendas en régimen de protección qué no podría hacer la Comunidad Autónoma de Madrid y qué no podría hacer el Estado.
P: Además de la construcción de esas 500 viviendas. ¿Qué otros detalles tiene la agenda urbana para el municipio que nos pueda contar?
R: Tiene cuestiones clave y habla de retos que tenemos todas las ciudades. Por ejemplo, se incluye la movilidad sostenible, tener más espacios verdes o más espacios de encuentro vecinal. También habla de la necesidad de un cuarto centro de salud, de las infraestructuras educativas o de soberanía energética. Abarca muchos de los retos que tenemos las ciudades por delante y que de alguna forma ya hemos trabajado con los vecinos y con las vecinas.
P: Uno de los planes más ambiciosos de la agenda urbana es cubrir las vías del metro. El presupuesto es muy elevado, ¿cómo lo van a hacer?
R: Somos tres administraciones y, por lo tanto, las tres tendremos que arrimar el hombro. De hecho ya hay una parte cubierta. Ahora mismo tenemos una brecha en la ciudad que influye en la calidad de vida de los vecinos. Queremos que donde hoy hay una vía de Metro, mañana haya una pista deportiva o un espacio cultural.
P: Siguiendo con el Metro, han denunciado la nueva parada de la L-9 porque dicen que habrá un transbordo, pero Madrid dice que no... ¿Cómo está esa situación?
R: No sé si tenemos un problema con el término. Si no quieren llamarle transbordo, que lo llamen cambio de tren. Las demandas de los vecinos y vecinas de Rivas siempre han sido mayores frecuencias y más vagones. No hay más que abrir Twitter por las mañanas y ver cuáles son las continuas deficiencias de la línea 9, que son las que sufrimos en Rivas. Lo que propone la Comunidad va en sentido contrario a todo lo que hemos ido pidiendo tantos años. Al final, si tienes que hacer un cambio de tren para llegar a un sitio, inviertes más tiempo. Si queremos que la gente use el Metro, tiene que ser un transporte ágil. Por eso, pedimos que esta opción de transporte sea una alternativa viable para los vecinos y para las vecinas de Rivas y que no haya más impedimentos para utilizarlo.
R: Sobre todo lo hemos hablado con el Consorcio, con quienes tenemos una estupenda relación de trabajo, sobre todo técnico. En la Comunidad de Madrid, el Consorcio ha hecho una propuesta de mapa concesional en la que nosotros hemos hecho algunas alegaciones que conocen nuestros vecinos y nuestras vecinas. Terminamos la anterior legislatura con una propuesta de tres rutas urbanas para movernos dentro del municipio. Solemos pensar que lo que tiene que ver con la movilidad y con la mayor concentración de tráfico en las ciudades se produce por las mañanas. En Rivas hemos visto que este repunte se produce por las tardes, cuando hay mucha actividad. Si toda esa actividad pudiera suceder con líneas que funcionan dentro de Rivas creemos que sería muy beneficioso. Por desgracia, para llegar a Madrid, algunos vecinos de Rivas se hace un auténtico 'tour' turístico por la ciudad. Por ejemplo, hace poco tuvimos un accidente en Santa Eugenia que dejó un carril cortado en la A-3 en plena hora punta. Eso supuso que la mitad de la flota que tenía que estar en Rivas estuviera parada, si hubiéramos tenido esas tres rutas en nuestra ciudad, esto no hubiera influido a la gente.
P: Continuando con su relación con la Comunidad, son ellos los que gestionan aspectos como la educación y la sanidad. ¿Cómo están esos servicios en su municipio?
R: Me gustaría decir que es una relación normal, pero la realidad es que no lo es. Ya no es sólo que que la presidenta no reciba a los alcaldes y alcaldesas, sino que algunos consejeros y consejeras no quieren sentarse con los alcaldes y alcaldesas a hablar de los problemas de la ciudad que tienen que ver con las competencias de la Comunidad. Yo estaría encantada de poder construir colegios en mi ciudad o de construir un hospital, que es lo que nos piden los vecinos, pero esas competencias son de la Comunidad. Hace unos años el Colegio de la Luna fue el único que pudo inaugurar la Comunidad de Madrid, precisamente porque llegamos a un convenio. El Ayuntamiento adelantó los fondos y se construyó el colegio. Esa fórmula la hemos intentado repetir y ya no han querido ni escucharla. Eso nos lleva a situaciones tan surrealistas como que en Rivas haya un barrio con cerca de 25.000 vecinos y vecinas sin un centro de salud, que se acordó en 2019. Ahora, la respuesta de la comunidad ahora es que estará para 2027. Cuando llegue ese centro de salud ya necesitaremos el siguiente.
"25.000 vecinos de Rivas necesitan el centro de salud que se acordó en 2019"
P: A pesar de que las relaciones sean delicadas. ¿Se ha podido reunir con los consejeros? ¿Qué les ha pedido?
R: Sí, me he reunido, por ejemplo, con la consejera de Sanidad y mantenemos una relación que intentamos que sea fluida, también con los miembros de la Consejería de Educación, precisamente porque tenemos una falta de infraestructuras educativas. El caso del centro de salud es muy sangrante, porque yo considero que quien debe reunirse con los alcaldes y alcaldesas debería ser la presidenta. No es la presidenta que yo voté, pero es mi presidenta. Ella no me hubiera votado a mí, pero soy la alcaldesa de Rivas. Se trata de respetar esto. En cuanto a las peticiones, la más sangrante es sin duda el centro de salud, que lo necesitamos. En materia educativa pasa lo mismo, en la última reunión que tuvo la concejala de Educación con la Consejería les preguntamos que cuándo se terminarían de construir los colegios y la respuesta fue "está en cola de impresión".
P: ¿Y cómo es la relación Isabel Díaz Ayuso?
R: Inexistente. Creo que su idea de verse sólo con los alcaldes 'de su cuerda' es un error. Siempre se aprende más cuando te ves con gente que no piensa como tú que cuando te ves con quienes solo te van a decir lo bien que lo estás haciendo, aunque esto es mi opinión personal. Prefiero hablar con los vecinos que son críticos, porque creo que se construye más desde la crítica, que desde el que está encantado de vivir en Rivas. Ayuso está más preocupada de lo que pasa en Moncloa que de lo que pasa en su comunidad autónoma.
P: Hace poco llegaron a un pacto con Almeida para la frontera de la M-50 en la zona de la Cañada Real. ¿Cree que es posible una mayor colaboración ya que comparten fronteras?
R: Creo que el Pacto Regional de la Cañada Real es un hito fundamental. No solo porque el plan de realojos por fin tiene una hoja de ruta clara, sino que pone encima de la mesa que cuando las organizaciones políticas y las instituciones quieren, se puede llegar a acuerdos. Ha habido muy buena comunicación con el alcalde de Madrid.
R: Ahora mismo solo salimos por la A-3. Por eso, si hay un accidente en Santa Eugenia colapsa toda la ciudad. Ahora vamos tener otra salida por la M-50, tras más de 20 años de demanda. Este tipo de cosas son difíciles de explicar cuando un vecino te pregunta por qué Rivas no tenía acceso. Una obra así no la podíamos asumir como Ayuntamiento.
P: Pasando a su relación con el Gobierno de España. ¿Qué pasa con la comisaria de Policía Nacional en su ciudad?
R: Seguimos demandándola. Estamos pendientes de saber si habrá o no Presupuestos Generales del Estado. Si los hay, seguiremos demandando que la partida que ya existe esté comprometida para desarrollarla cuanto antes. A cada administración le solicitamos en función de sus competencia y esto es algo que seguimos demandando al Gobierno de España, es una deuda pendiente con Rivas.
P: ¿Se ha reunido con Francisco Martín, el delegado del Gobierno para tratar el tema?
R: Tenemos buena relación con el delegado de Gobierno al que yo agradezco su disposición y su compromiso con Rivas. Tenemos trato casi diario, no solo por temas fundamentales como la Cañada, sino también por la criminalidad. En el último balance Rivas volvió a descender en datos y el delegado me ha llamado para comunicármelo. Siempre le planteo el refuerzo necesario de Guardia Civil en Rivas, porque si las ciudades crecen, también deben crecer los servicios de seguridad, por eso necesitamos la comisaria.
P: Otro problema en Rivas es Valdemingómez: el alcalde ha anunciado que la planta seguirá hasta el año 2035. ¿Ha hablado con Almeida sobre esto?
R: Rivas siempre ha estado en contra de esa planta. No porque fuera un proyecto de Esperanza Aguirre, sino porque todo lo que sale de ahí lo respiramos los vecinos y vecinas de Rivas. Parece que el hecho de que haya una planta como Valdemingómez en el sur de Madrid no importa tanto como si estuvera en el norte. Rivas lleva muchos años pidiendo el cierre de esa planta, pero se ha presentado un plan de cierre.
R: Se han declarado insumisos ayuntamientos de muchos signos políticos. Siempre he dicho que el Estado debe hablar con los municipios, que somos los que tenemos que desarrollar el BOE. Hay una normativa europea que baja al Estado, que baja a las comunidades y que baja al Ayuntamiento. Por eso los vecinos me piden a mí explicaciones. En Rivas ya tenemos una tasa desde el año 2004, pero creo que, en este tema, falta un criterio común en el conjunto del Estado y también en lo que tiene que ver con los residuos en la comunidad.
El cuestionario de la alcaldesa
Aída Castillejo conoce bien cada rincón de Rivas y destaca la laguna como uno de los enclaves más bonitos. También cuenta que la cabalgata del municipio, que la hacen posible las AMPAS, es un evento que nadie se debe perder.