Este es el acueducto romano más antiguo del mundo: fue el primero de Roma
El Aqua Appia fue una estructura principalmente subterránea construida en el año 312 a.C. por los censores Apio Claudio el Ciego y Cayo Plaucio Deciano.
29 julio, 2024 00:57Los acueductos romanos son una de las maravillas de la ingeniería antigua, reflejando la habilidad y la innovación de esta civilización en el suministro y gestión del agua. Estas estructuras fueron construidas para llevar agua desde fuentes distantes hasta las ciudades, desempeñando un papel crucial en la vida urbana y en la expansión del Imperio romano.
Se estima que en total los romanos construyeron varios cientos de acueductos a lo largo del Imperio romano. De hecho, la Ciudad Eterna llegó a tener doce acueductos.
Sin embargo, de entre todos los acueductos que construyeron los romanos hay uno que se considera el más antiguo de todos: el denominado Aqua Appia.
El acueducto más antiguo del mundo
El Aqua Appia (312 a.C.), principalmente subterráneo, fue el primer acueducto de Roma, construido por los censores Apio Claudio el Ciego, conocido también por la construcción de la Vía Apia durante su censura, y Cayo Plaucio Deciano.
Un tramo de este acueducto fue descubierto en 2017 durante las obras de una nueva línea de metro de Roma. Sin duda, un hallazgo "de excepcional importancia arqueológica", tal y como indicaban los expertos. La estructura salió a la luz a pocos pasos del Coliseo, frente al hospital militar del Celio.
Su descubrimiento trajo consigo grandes datos sobre las construcciones de Roma. "Solamente gracias a las paredes de cemento por los trabajos del metro hemos podido descender a ese nivel, estudiando por primera vez toda entera la estratigrafía de Roma, es decir, partiendo de las casas actuales y llegando a lo más profundo, hasta encontrar una tumba con ajuar funerario, con dos cuencos, que se remonta a la Edad del Hierro", manifestaba Simona Morretta, arqueóloga responsable del área del Celio.
Su construcción respondió a la necesidad de un suministro constante de agua para el creciente número de habitantes y para diversas necesidades urbanas, como el riego, el consumo doméstico y los baños públicos.
En este sentido, el Aqua Appia representó un avance significativo en la ingeniería hidráulica y el urbanismo de Roma. Según se conoce, su éxito estableció un modelo para futuros acueductos, de los cuales Roma eventualmente tuvo once principales durante el apogeo del Imperio.
Este acueducto mejoró la calidad de vida en Roma, facilitando el acceso al agua y contribuyendo al saneamiento y la salud pública. Su construcción sentó las bases para una serie de obras públicas que ayudaron a Roma a convertirse en una de las ciudades más avanzadas y desarrolladas de la antigüedad.
El Aqua Appia marcó el comienzo de una larga tradición de ingeniería hidráulica en la Antigua Roma, destacando la capacidad de los romanos para resolver problemas complejos con soluciones innovadoras y duraderas.
Otros acueductos romanos
No sólo el Aqua Appia es un acueducto de gran importancia en la historia del legado romano, sino que hay otros ejemplos que merecen ser mencionados, como los que presentamos a continuación:
- Aqua Claudia (52 d.C.): conocido por sus impresionantes arcos, transportaba agua desde fuentes situadas a unos 68 kilómetros de Roma.
- Pont du Gard (Francia): un acueducto erigido en el siglo I d.C. y una de las estructuras más impresionantes y mejor conservadas fuera de Italia.
- Acueducto de Segovia (España): construido a finales del siglo I y principios del II d.C., es famoso por su impresionante tramo elevado de arcos de granito.
Cabe destacar que los acueductos fueron muy importantes en el Imperio romano ya que proporcionaban agua potable, que era esencial para el consumo doméstico, los baños públicos, las fuentes y el riego de jardines.
Además, el acceso al agua limpia mejoró significativamente la higiene y la salud pública, un avance muy importante en la época. Igualmente, los acueductos facilitaban el crecimiento urbano y permitían la construcción de grandes edificios públicos y termas (los baños públicos de los romanos).
Igualmente, los acueductos son un ejemplo muy representativo de la capacidad de los romanos para resolver problemas complejos mediante soluciones técnicas avanzadas. Y a su vez, permitieron el desarrollo de ciudades en todo el Imperio romano, contribuyendo a su expansión y sostenibilidad.
La ingeniería de los acueductos romanos influenció posteriores sistemas de suministro de agua y sigue siendo estudiada y admirada por ingenieros y arquitectos. En consecuencia, los acueductos romanos no solo fueron esenciales para la vida diaria en la Antigua Roma, sino que también representan un legado duradero de su ingeniería avanzada.