
Candela Martínez, nutricionista ginecológica.
Candela Martínez, nutricionista ginecológica: "Estos alimentos son la clave para una menopausia más saludable"
Esta etapa de transición que viven las mujeres, contar con unos hábitos de vida saludables, puede marcar la diferencia entre tener o no un mayor bienestar.
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Los cambios hormonales y físicos que las mujeres experimentan durante la menopausia son tan diferentes según qué persona, que lo único que se puede asegurar al 100% es que la nutrición juega un papel fundamental en esta etapa. Una alimentación sana y equilibrada no solo puede aliviar algunos de los principales síntomas como los sofocos o la fatiga, sino que también para prevenir o manejar problemas de salud relacionados con el aparato reproductivo.
Sin embargo, muchos no tienen en cuenta que una alimentación adecuada también puede mejorar la calidad de vida en general y ayudar a prevenir enfermedades como la osteoporosis, el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis.
Candela Martínez, nutricionista ginecológica, nos ofrece claves esenciales para que las mujeres puedan mantener una dieta equilibrada durante esta etapa de sus vidas. En sus consultas, destaca la importancia de incorporar hábitos alimenticios saludables, y no solo centrarse en alimentos de moda como el brócoli o las superfrutas, ya que, como bien señala: "No sirve de nada comer más brécol si luego haces meriendas poco nutritivas."
La alimentación en la salud ginecológica
En su trabajo, Candela pone de manifiesto que una dieta equilibrada puede tener un impacto directo en la salud hormonal y la función ovárica, dos aspectos que afectan de manera significativa a las mujeres en la menopausia.
La nutrición no solo puede mejorar los niveles de estrógenos, sino también aliviar los síntomas de enfermedades ginecológicas prevalentes en esta etapa, como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis.
Según la nutricionista, ciertos nutrientes son esenciales para mantener el equilibrio hormonal y reducir la inflamación en el cuerpo, lo que a su vez puede aliviar los síntomas dolorosos de la menstruación, como la dismenorrea (dolor menstrual intenso) o los cólicos asociados con la ovulación.
Nutrientes clave en la menopausia
Candela Martínez resalta que, para optimizar la salud hormonal, es fundamental incluir en la dieta alimentos ricos en antioxidantes, ácidos grasos saludables y fibra. Por ejemplo, las verduras crucíferas como el brócoli, la coliflor y el romanesco, conocidos por sus propiedades detoxificantes, pueden ayudar a mejorar la excreción natural de estrógenos, favoreciendo así la regulación hormonal.
Además, el consumo de pescado azul, semillas de lino y aceite de oliva virgen extra, que son fuentes de ácidos grasos omega-3, también es esencial para mantener un equilibrio hormonal saludable y reducir los procesos inflamatorios.
La nutricionista también señala que las mujeres en la menopausia deben priorizar el consumo de cereales integrales y alimentos de bajo índice glucémico, ya que estos alimentos permiten un mejor control de los niveles de azúcar en sangre, ayudando a prevenir enfermedades como la diabetes tipo 2 y la resistencia a la insulina, que son comunes en la menopausia.
La clave: los hábitos alimenticios
Más allá de los alimentos específicos, Candela subraya que lo realmente importante es adoptar hábitos alimenticios saludables y coherentes. No basta con consumir un solo alimento beneficioso para la salud hormonal si el resto de las comidas no siguen un patrón equilibrado.
"Comer bien durante la menopausia no solo consiste en incluir ciertos alimentos, sino en crear una rutina diaria de nutrición que respete las necesidades del cuerpo. La clave está en la consistencia y en la elección consciente de alimentos", explica Martínez.
En este sentido, la nutricionista hace un llamado de atención a las meriendas y otros hábitos que, aunque parecen inofensivos, pueden tener un impacto negativo en el bienestar general. Evitar los tentempiés poco nutritivos, como aquellos ricos en azúcares refinados o grasas saturadas, es esencial para mantener un cuerpo equilibrado durante la menopausia.
La salud mental a través de la alimentación
Candela Martínez también señala que la salud mental de las mujeres en la menopausia juega un papel crucial en el bienestar general. Durante esta etapa, muchas mujeres experimentan cambios emocionales y psicológicos debido a las fluctuaciones hormonales. Aquí, la nutrición puede ser una herramienta útil para gestionar el estrés y la ansiedad, dos de los síntomas más comunes de la menopausia.
De hecho, algunos estudios han demostrado que una dieta rica en nutrientes como el magnesio, presente en alimentos como las nueces y las semillas, puede ayudar a reducir los niveles de estrés y promover un estado emocional más estable.
Además, consumir alimentos ricos en vitaminas B y D, como los huevos, los lácteos y las espinacas, también puede mejorar el estado de ánimo y ayudar a combatir la depresión que a veces acompaña a la menopausia.
Nutrición y ejercicio
Aunque la alimentación es clave, Candela también recuerda la importancia de integrar un estilo de vida activo en el cuidado de la salud en la menopausia. El ejercicio regular no solo mejora la salud física, sino que también puede ser un aliado para equilibrar los niveles hormonales y reducir la fatiga.
La combinación de una buena nutrición y ejercicio físico regular es la fórmula ideal para una menopausia saludable. Además, la nutricionista destaca la importancia de adoptar un enfoque holístico en la atención ginecológica.
La dieta no debe ser vista como una solución aislada, sino como parte de un enfoque global que incluye el ejercicio, la salud mental y el cuidado emocional. "El bienestar durante la menopausia no solo depende de lo que comemos, sino también de cómo nos cuidamos a nivel emocional y físico", concluye Candela.