2-0 | El Málaga CF hace los deberes y poco más

El Málaga CF cumplió los deberes contra el Racing de Ferrol ganando 2-0 en La Rosaleda con goles de Lobete y Larrubia en la primera mitad para aprovechar la derrota del Eldense y situarse a siete puntos de las posiciones de descenso. Son los hechos, las interpretaciones, que fue una tarde gris del conjunto blanquiazul en la que dejó una versión inferior frente a un rival que ya está fuera de la competición, y que tiene que subir muchos enteros para lo que se le viene ahora si quiere amarrar la permanencia cuanto antes. Pero había que ganar, y se ganó. 

Lobete y Larrubia pusieron el sello de la victoria en las dos ocasiones en la que los de Pellicer decidieron amasar la pelota, moverla de un lado a otro hasta encontrar el hueco en la zaga gallega. Los dos tantos llegaron por la izquierda, con Kevin y el propio Lobete como asistentes. El Málaga pasa el umbral de los 40 puntos, suma 42, y el Racing de Ferrol sólo descuenta los días para el descenso a Primera RFEF, ese del que quiere escapar el equipo blanquiazul.

Pellicer cambió más de medio equipo. Metió mano en los laterales (Gabilondo y Víctor García), en el centro de zaga (Einar), en medio (Juanpe), en los extremos (Kevin y Larrubia), en la mediapunta (Lobete), y en la posición de '9' (Dioni). Sólo Nelson y Luismi repitieron en el equipo después de Albacete, además de Alfonso Herrero. 

Lobete da ventaja a los nueve minutos

Las cosas se le pusieron pronto de cara a un Málaga que le metió intensidad a la presión pero al que le costó en los primeros compases quedarse con la pelota. Pero a los nueve minutos logró armar una jugada por la izquierda en la que Kevin le ganó la partida a Buñuel, ganó la línea de fondo y la puso atrás. Dioni amagó pero la dejó pasar y Lobete controló en el punto de penalti para mandarla a la red. 

Lobete celebra su gol contra el Racing de Ferrol LaLiga

Pero el gol, lejos de espolear al Málaga, durmió el partido frente a un rival que ya no está en la competición y que pudo sorprender en alguna carrera a la contra a los blanquiazules, que no guardaban la pelota. Hubo amago de pitos. Einar mandó arriba un cabezazo en un córner puesto al segundo palo por Víctor García y Larrubia ganó otra disputa por la derecha para irse metiendo en el área y acomodar la zurda para disparar centradoa las manos de Yoel. 

Fue la antesala del segundo gol, que llegó en el 39. Por primera vez en lo que iba de partido el Málaga amasó y amasó la pelota hasta que Juanpe encontró una rendija para filtrarle la bola a Lobete, que se coló en el área por escorado a la izquierda. La puso llovida al segundo palo donde llegó Larrubia para mandarla para dentro de cabeza. El tanto, por el ambiente que se respiraba en las gradas, apagó el run que se barruntaba. Buena jugada del Málaga que tuvo el tercero en la siguiente jugada en las botas de Larrubia. 

Larrubia celebra su gol contra el Racing de Ferrol LaLiga

Descanso y ley Pellicer. El que tiene amarilla se queda en la caseta. Eso le pasó a Juanpe y Gabilondo, por los que se está demostrando poca confianza. Puga y Manu Molina, casi un mes después, al césped. Los primeros minutos fueron para los visitantes, que salieron decididos a apretar el resultado y pisaron el área del Alfonso Herrero en varias ocasiones. Hasta que Manu Molina entró en contacto con la pelota y fue desactivando a los visitantes. Fueron unos minutos de domino del balón del Málaga, pero sin veneno, sin superar líneas, sin inquietar a Yoel, hasta que el partido se convirtió en algo parecido a un correcalles, sin mucha chispa. El Málaga no contralaba el esférico y el Racing de Ferrol intentaba estirarse. De los cambios, otra oportunidad al limbo para Yanis, al que no se le espera para este final de temporada. Tuvo una clara en el último tramo que remató cayéndose y mandó alta tras una asistencia de Sangalli. Fue lo más peligroso de un equipo sin mordiente ninguna, sin electricidad, sin responder del todo a una grada que animaba y que quizás merecía una mejor versión de los suyos tras el esperpento de Albacete. Pero se cumplió con los exigible, los tres puntos y a siete del descenso. Ya llegarán días mejores. Pero hay faena.