Qué hacer ante la picadura de una carabela portuguesa: la medusa más temida del verano
La picadura de la carabela portuguesa es muy dolorosa e incluso peligrosa. Descubre en esta guía qué medidas tomar en caso de ser víctima de esta criatura marina y cómo evitar encontrarte con ella.
4 agosto, 2023 11:59Recientemente se han avistado en diferentes puntos de la costa norte de España ejemplares de carabela portuguesa, un tipo de medusa que ha aparecido en Asturias, Cantabria y, sobre todo, el País Vasco, dónde incluso La Concha de San Sebastián se vio obligada a izar la bandera roja tras localizar 73 ejemplares.
La carabela portuguesa, también conocida como Physalia physalis, es fácilmente reconocible por contar con una característica vela en la parte superior de su cuerpo. Este tipo de medusa tiene unos tentáculos que pueden llegar a medir varios metros de longitud, y hay que tener especial cuidado porque se trata de una de las especies que puede producir un mayor escozor con su picadura.
Precauciones con la carabela portuguesa
Los expertos recalcan que, aunque en muchas ocasiones se asegura que la carabela portuguesa puede causar la muerte, esto solo sucede en aquellos casos en los que se haya producido la picadura por parte de un ejemplar grande y, además, que quién se vea afectado haya sufrido un gran número de picaduras y tenga problemas de corazón, ya que en caso contrario no tendría porque llegar a ese problema de tanta gravedad.
[Lo que puede ocurrir con las playas y las medusas en España: "La temperatura lo cambia todo"]
Es importante, en cualquier caso, que nunca se toquen estas medusas, ni siquiera aunque pueda parecer que se encuentra muerta en la arena. En el caso de que haya un contracto con ella, se debe pedir ayuda a los socorristas de inmediato, y bajo ningún concepto habrá que frotarse ni rascarse.
Para tratar de evitar los riesgos de dar con las carabelas portuguesas, es aconsejable evitar el baño en las zonas en las que rompen las olas, ya que es dónde existe mayor riesgo de que lleguen estas medusas o fragmentos de ella.
La picadura de estos animales marinos se puede prevenir evitando el baño si previamente se ha alertado de su presencia, así como saliendo rápidamente del agua en el caso de que se detecte una en las proximidades. Es fundamental no tocarlas, independientemente de que se encuentren en el agua, en la arena o sobre las rocas.
Por otro lado, hay que recalcar que el uso de crema solar puede reducir el riesgo de picaduras, ya que tiene cierta capacidad aislante de la superficie corporal, pero no lo evita de forma completa.
Cómo actuar ante la picadura de una carabela portuguesa
Cada año, las playas españolas registran en verano una mayor presencia de medusas, una tendencia que se viene dando en los últimos años, y que hacen que en las playas se encuentren incluso especies invasoras como la cubomedusa o la propia carabela portuguesa.
La picadura de una carabela portuguesa provoca una intensa sensación de quemazón, inflamación local, picor, así como un dolor muy agudo que puede provocar un “shock” anafiláctico e incluso una pérdida de la conciencia si la zona afectada es extensa.
Tras sufrir una picadura, lo más habitual es sentir escozor y picor en la zona en la que ha sido inoculado el veneno, pero si la picadura es más fuerte será cuando nos encontremos con otros síntomas más severos, llevando a poder sufrir vómitos, fiebre o dolores.
Si te encuentras en la playa y te pica una medusa de este tipo, el protocolo establece la siguiente forma de actuar:
- En primer lugar, ante una picadura de carabela portuguesa, se deben quitar los restos de tentáculos y/o los fragmentos de medusas. Al hacerlo es necesario evitar tocar directamente la zona, para que el veneno no pase a las manos. Por ello, puedes utilizar unos guantes, una tarjeta de crédito o un DNI o similar para poder usarlo y así deshacerse de los restos de tentáculos que hayan podido quedar en la piel.
- A continuación, se debe lavar con agua de mar la zona que se encuentra afectada por las picaduras.
- Seguidamente, es el momento de aplicar hot packs o inmersión en caliente a una temperatura de entre 40 y 45 grados centígrados, durante un espacio de tiempo de 15 minutos.
- En el caso de que el dolor persista, se debe consultar al médico o profesionales de la salud, que harán las pruebas pertinentes y aplicarán el tratamiento oportuno para poder hacer frente a las molestias sufridas.
Por otro lado, una vez conocida la forma en la que se debe actuar en caso de sufrir una picadura de carabela portuguesa, se deben tener en cuenta algunas consideraciones:
- No se debe aplicar agua dulce sobre la superficie de la piel afectada, ya que, en este caso, en lugar de ayudar a reducir el dolor de las picaduras, lo que provocará será que este dolor sea mayor.
- No se debe aplicar ni vinagre, ni amoniaco ni orina, que son remedios naturales que se utilizan con frecuencia para tratar diferentes tipos de picaduras, pero que en este caso no serán efectivos para hacer frente a los efectos de la medusa. En su lugar, se recomienda aplicar hielo cada 15 minutos para mitigar el dolor.
- Se debe evitar que la luz del sol incida directamente sobre el área afectada por la picadura, además de que no hay que tocar la zona ni rascarse.
- No tomar medicamentos sin que lo haya recetado un médico. Debe ser un profesional el que, en el caso de que los síntomas del dolor y picor no remitan, el que recete cremas con corticoides o algún tipo de antihistamínico por vía oral que ayude a mitigarlos.