La tasa de fertilidad en España se sitúa en 1,16 hijos por mujer.

La tasa de fertilidad en España se sitúa en 1,16 hijos por mujer. P.G.S.

Salud FERTILIDAD

Así se ha convertido España en el segundo país de Europa con peor tasa de fertilidad tras Malta

La tasa de fertilidad en nuestro país ha caído un 42% en las últimas cuatro décadas. Sólo Malta presenta un dato más bajo, con 1,08 hijos por mujer.

4 junio, 2024 02:39

España vive una crisis de fertilidad que ya no sorprende a propios ni a extraños. "Llevamos advirtiéndolo muchos años, pero en los últimos 25 ha sido muy importante", afirma Elisa Gil, ginecóloga experta en medicina reproductiva y secretaria de la Sociedad Española de Fertilidad. La situación del país resulta llamativa si se observan los datos de nuestro entorno: a nivel europeo, sólo Malta, con 1,08 hijos por mujer, tiene una tasa de fertilidad más baja que la española, que es de 1,16, según las últimas cifras publicadas por Eurostat.

Estos datos se llevan recogiendo desde hace seis décadas, pero en España sólo se conocen a partir del año 1980. Entonces, el número de hijos por mujer era de 2,22; es decir, ha caído un 42% en los últimos 40 años. "Estamos a la cola, porque Malta es un país tan pequeño que sus datos son poco comparables con los nuestros”, señala Gil a EL ESPAÑOL. Considera que es una cuestión que afecta sobre todo a los países mediterráneos: "Italia y Grecia también salen muy mal paradas", con 1,24 y 1,32, respectivamente.

En el otro extremo, aparece Francia (1,79), con la mayor tasa de fertilidad de la Unión Europea, seguida de Rumanía (1,71) y Bulgaria (1,65). Aunque, como apunta la ginecóloga del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, incluso el país galo "está mal" en cuanto al número de hijos por mujer se refiere. De hecho, cayó cinco décimas desde 2021 a 2022. Para ese mismo periodo, la tendencia fue negativa en hasta 24 países más; sólo Portugal y Bulgaria aumentaron sus cifras. De 2020 a 2021, en cambio, la tasa de fertilidad aumentó en 21 Estados miembros.

Para Gil, la crisis de 2008 supuso "un punto de inflexión notable". Pero el primer año en el que la Covid se convirtió en pandemia fue clave al menos, en nuestro país: "Las prioridades de los jóvenes han cambiado. Hace unos años, España era un país muy familiar. Lo seguimos siendo, pero ahora parece que los hijos molestan, que te impiden hacer muchas cosas. Y esto es difícil de cambiar", opina.

El presidente de la sección de Esterilidad e Infertilidad de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), Luis Rodríguez-Tabernero, coincide en esta valoración: "La maternidad ha perdido atractivo. Ahora, hay muchas mujeres que no se plantean ser madres, aunque puedan tener hijos".

La edad, principal motivo

Una de las consecuencias de este cambio de paradgima es el retraso de la edad de la primera maternidad. En España, la edad media en que las mujeres tienen su primer hijo ha pasado de 25,25 años en 1975 a 33,1 en 2023. "Con estos casi 10 años de diferencia, la población femenina ha envejecido tanto que tener hijos resulta muy difícil", asegura Gil. "En Occidente, la edad materna es el principal motivo de esterilidad", añade.

El retraso de la maternidad también ha provocado que España sea uno de los países con mayor número de madres por encima de los 40 años. En la última década, han aumentado un 19,3%. Y el pasado año, ya representaron el 10,7% del total, según los datos provisionales del Instituto Nacional de Estadística.

Los problemas de fertilidad, no obstante, se acrecentan con el paso de los años. En el caso de las mujeres, se estima que la probabilidad de quedarse embarazada a partir de los 30 años es del 20%; con 40, se reduce hasta el 5%. En estas edades no sólo se produce una disminución del número de óvulos potenciales, sino que también conlleva una peor calidad.

Además, los óvulos contienen un mayor número de alteraciones cromosómicas que dificultan el embarazo y aumentan la probabilidad de un aborto o de enfermedades genéticas en los hijos. Por este motivo, los expertos en medicina reproductiva lamentan que se haya normalizado este aplazamiento: "Una frase que escuchamos mucho entre la población es la de 'ya me haré una fecundación in vitro cuando sea mayor'. La solución no pasa por ahí, sino por promocionar la maternidad joven".

Un invierno demográfico

Como señala Gil, en la actualidad existen técnicas de reproducción asistida que permiten tener hijos a quienes así lo deseen, a diferencia de lo que ocurría antiguamente. Este método cada vez cobra más representación en el número total de nacimientos. Según el último registro de la SEF, con datos de 2021, casi el 11% de los nacidos en España fueron fruto de técnicas de reproducción asistida.

Desde la Sociedad Española de Fertilidad, sin embargo, reclaman un mejor acceso a este tipo de técnicas por la vía pública: "Si el tiempo de espera es de tres años, lo que podía ser un tratamiento útil se convierte en uno fútil". Entienden también que ampliar el límite de edad, como ya ha ocurrido en algunas comunidades, puede suponer "un arma de doble filo". Además, como indica Rodríguez-Tabernero, "no podemos esperar que aumentando el acceso a estas técnicas se recupere la natalidad".

Facilitar el acceso a las técnicas de reproducción asistida es una de las medidas que la SEF, junto con otras siete comunidades científicas, ha planteado en el Documento de Consenso sobre Natalidad y Salud Reproductiva en España. Se trata de una "hoja de ruta para combatir la infertilidad" y concienciar a la población y a la clase política —de hecho, lo presentaron el pasado marzo en el Congreso de los Diputados—.

"En los últimos años nos estamos enfrentando a un invierno demográfico que no nos va a poner fácil la situación a nivel social", advierte Gil, quien ha sido una de las coordinadoras del citado documento. Lo cierto es que en España ya es tendencia que fallezcan más personas de las que nacen. En 2023, por ejemplo, cerró con un saldo negativo de 113.256 personas.

El problema más complejo

Más allá de "concienciar a la esfera política para que mejore la capacidad de conciliación y el acceso a las técnicas de reproducción asistida", la secretaria de la SEF plantea un objetivo que considera "el más complejo": modificar la mentalidad de la gente. "Se trata de favorecer de nuevo el concepto de familia. Vivimos en un país en el que hay hoteles donde se lee "adults only" ["sólo adultos", en español]; es decir, los niños están mal vistos".

Gil entiende que "no podemos ser ilusos" pensando que volveremos a tener las cifras que se registraban hace cuatro décadas: "Pero sí que se recupere un poquito la curva, protegiendo a la familia convencional y a los nuevos modelos que hay actualmente". Rodríguez-Tabernero, por su parte, confía en que sea una situación transitoria, que la sociedad reaccione y "dejemos de tener tantos perros".