Tres mujeres de acción al frente de Iberia Mantenimiento: el motor femenino que traza el cambio hacia la igualdad
Magas celebra el 8 de marzo a pie de hangar, de taller y de almacén con Teresa Martín, Carolina Aragón y Fernanda Kinney: tres referentes femeninos en el mundo de la aeronáutica.
8 marzo, 2024 02:20El mundo de la aviación ha sido tradicionalmente un sector de hombres, aunque poco a poco la presencia de la mujer va tomando posiciones transformando las plantillas y demostrando que ellas también tienen mucho que decir al respecto.
Con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, nos adentramos en la estructura de una gran compañía del sector como es Iberia para conocer a tres mujeres que llevan las riendas del área de Mantenimiento. Son referentes para las nuevas generaciones y el ejemplo de que las cosas están cambiando.
Un informe reciente pone de manifiesto que sólo un tercio de las empresas en España han logrado alcanzar la paridad en puestos directivos (34%), ellas forman parte de este porcentaje que aún tiene que crecer. Sus historias son tan diferenes como inspiradoras y escriben un nuevo capítulo empresarial en clave femenina.
Hay todavía una brecha de género en el sector, eso es innegable, pero en Iberia nuestras protagonistas se sienten ampliamente representadas y abren camino a todas esas niñas y jóvenes, que quizá nunca pensaron que los motores de los aviones no son solo territorio exclusivo de los hombres.
Magas se desplaza hasta La Muñoza, el corazón de la compañía, en Madrid, para hablar con Teresa Martín Laso, senior manager de Producción del Taller de Motores, Carolina Aragón Periñán, manager de servicios de planificación de Mantenimiento Pesado y Fernanda Kiney Rugo, manager de Operaciones de Proveedores.
Con la naturalidad y el aplomo que aporta pisar el terreno con paso firme, estas tres ejecutivas celebran que se están superando barreras, aunque todavía hay pensamientos aprendidos que hay que desterrar. "Cuando digo que trabajo en Iberia, la mayoría de personas me preguntan si soy azafata (ahora este puesto se denomina tripulante de cabina)", dice Carolina.
Vamos a analizar con ellas cuestiones claves: la falta de referentes femeninos para este tipo de profesiones, la adaptación de la mujer en puestos tradicionalmente masculinizados y los retos que enfrentan, siendo la conciliación un tema de relevancia.
La importancia de los referentes
Nuestra primera charla tiene a Teresa Marín Laso como interlocutora. Paseamos a su lado por la impresionante nave donde se reparan los motores: su reto es garantizar los tiempos de entrega y optimizar el espacio para seguir creciendo. Nada de despachos alejados de los trabajadores: su oficina está allí mismo en medio del gran taller para estar en contacto directo con el personal.
¿Cómo llegó a este mundo? Casi por casualidad. "Yo quería ser Teleco, pero no entré por una décima, así que me decanté por ingeniería aeronáutica; por eliminación. Era buena estudiante, tenía un nueve y pico de media, pero en primero suspendí casi todo. Mis padres estaban preocupados y yo los dije: 'No os preocupéis que voy a entrar en Iberia y viajaréis gratis. He cumplido lo primero", dice entre risas.
Recuerda que cuando empezó a estudiar estaba casi sola en clase "con 60 chicos", pero cuando terminó ya había mucha más presencia femenina. Sin embargo, la tendencia al alza se ha relantizado y las carreras de ingeniería vuelven a tener menos alumnas en las aulas. Falta información y también aportar esa seguridad a las chicas para que sepan que pueden optar a este tipo de salidas profesionales.
"La falta de conocimiento quizá haga más difícil la elección. También es un poco el tema cultural desde el punto de vista de la seguridad que necesitamos las mujeres. Cuando una mujer aplica para un puesto y le dicen las diez condiciones, ella se impone cumplir las diez y dos más para poder optar al puesto. Somos muy perfeccionistas", reflexiona.
Por eso es crucial que haya referentes. A este respecto, Teresa Laso dice: "Yo no me he sentido nunca un referente, pero es verdad que sí me lo han dicho algunas mujeres a las que he contratado. Quiero pensar que después de verme a mí se animen a querer ser directoras y a pedirlo. El hecho de que se vean mujeres que llegan a determinados puestos y que son capaces de hacerlo, igual que lo hacen los hombres, es muy importante".
Teresa, como senior manager de Producción del Taller de Motores, pone su granito de arena en cuestiones de paridad. En el equipo que le reporta directamente los géneros están equilibrados.
No así en los mecánicos: hay 400 y de ellos, solo seis son mujeres: "Ahí la proporción es muy baja. Es muy difícil encontrar mecánicas quizá por el trabajo físico". En cuanto al equipo de ingenieros, a la hora de contratar Laso lo que intenta es que haya "diversidad. Cuando me pasaban currículums, había pocas mujeres y yo pedía que las hubiera para que haya un poco de equilibrio. No soy de cupos, pero a veces hay que forzarlos para que haya esa diversidad".
En otro departamento de Iberia Mantenimiento encontramos a Carolina Aragón Periñán, manager de servicios de planificación de Mantenimiento Pesado, otro referente para generaciones venideras.
Ella se encarga de planificar la ITV de los aviones (para explicarlo de un modo sencillo) que se realizan cada dos años y su rol es planificar tanto los huecos en el hangar, como las tareas que han de realizarse en tiempo.
¿Cómo llegó hasta aquí? Ella misma nos lo explica: "Mi motivación era el mundo de la competición de Fórmula 1, pero luego descubrí la parte técnica del motor y acabé estudiando ingeniera aeronáutica. Nunca pensé trabajar en una aerolínea, pero llegó la llamada de Iberia hace cinco años. Empecé en mantenimiento en línea, que son las revisiones del avión antes de cada vuelo y ahí, descubrí que esto era Fórmula 1 total y me enganchó".
Pese a ser un sector muy masculizado, Carolina asegura: "Nunca he sentido esa diferencia entre hombres y mujeres". No duda en afirmar que sí se siente un referente y lo dice sin atisbo de ego: "Sí me siento referente y eso empieza en casa, porque tengo una hermana 12 años menor, y soy un referente para ella en ese sentido. También en el aspecto de que no me he venido abajo por tener niños ni lo he considerado un problema, sino que lo he acoplado a mi vida, lo he llevado adelante y lo sigo llevando adelante, aunque suponga un esfuerzo brutal".
También se considera un referente Fernanda Kinney Rufo, manager de Operaciones con Proveedores. Esta brasileña de rostro y voz dulce, la más joven de las tres entrevistadas por Magas, lleva su puesto con orgullo, le apasiona su trabajo y quiere seguir creciendo y aprendiendo. Actualmente forma parte de la plantilla de Iberia en la parte de inspección de materiales, que lidera con determinación. Es una de las secciones menos visibles de todo el proceso de mantenimiento pero, como el resto, clave para que garantizar un vuelo eficaz y seguro.
Fernanda tiene muy clara una de sus misiones personales y profesionales: "Mi objetivo es conseguir un puesto de liderazgo de una forma visible para poder ser un ejemplo y un referente para otras mujeres que quieran estar en este mundo de la logística, que es un mundo bastante masculino y oculto. Creo que en Iberia se está haciendo un esfuerzo importante en el tema de la de la paridad. Yo llevo un equipo de 20 personas y puedo decir que entre el 60% y 65% son mujeres. Es una parte un poco más administrativa y no tan física como estar ahí con el avión, pero para mí ellas también son referentes".
Los retos que enfrentan las mujeres
Como manager de Operaciones con Proveedores, los almacenes son parte de su territorio y aquí el personal es eminentemente masculino. Kinney no tiene reparos en verbalizar los micromachismos que a veces escucha ya no por ser mujer, sino por su edad.
Recuerda que antes ni siquiera había baños femeninos en el edificio... "Es una sección muy masculina en general. En ocasiones enfrento dificultades que quizá no están muy habladas pero que existen. Me ven joven, chica, con cara de niña, y a veces hay comentarios un poco fuera de lugar. Lo que suelo utilizar para neutralizarlos es la cercanía con estos hombres para que no sientan amenazados o sientan que esto es una competencia. Otras veces opto por ser dura y exigir el respeto y la autoridad necesarias. Son cosas sutiles, como escondidas, problemas estructurales que ya estaban antes de que yo llegara", nos cuenta.
En ese sentido, Carolina Aragón Periñán hace hincapié en los estereotipos que hay que superar resaltando la cantidad de gente que da por hecho que es tripulante de cabina cuando dice que trabaja en Iberia: "Eso me pasa a diario en cualquier ámbito o sector". Sin embargo, en lo que es el desempeño de su labor en sí encuentra apoyo y respeto por parte de toda la plantilla.
Aún así, hay todavía un tema en el que las directivas aún se sienten poco representadas: la conciliación con la maternidad.
"En ese terreno sí que hay pocos referentes. Me di cuenta de eso cuando decidí tener hijos, porque no tenía casi ejemplos anteriores para saber cómo hacer las cosas. Es un tema que te crea mucha incretidumbre porque no sabes cómo te va a afectar laboralmente. En Iberia ha sido un sueño porque no solo me han promocionado durante mi baja maternal, también me han permitido planificarme como he querido, con mucha flexibilidad. Me siento afortunada de no haber tenido problemas con la conciliación. En cuanto a integración en el ámbito laboral, ningún problema", afirma.
Teresa Martín Laso abre un melón necesario: "A veces no nos ofrecen puestos relevantes por el tema de la conciliación y también parte de la culpa es nuestra porque no nos atrevemos por ese mismo tema. Hemos avanzado, no solo por las bajas paternales en sí, también en el sentido de que se ha conseguido diferenciar la vida profesional y familiar de las mujeres".
En ese mismo sentido se pronuncia Fernanda Kinney que tiene claro que, pese a no ser madre todavía, reivindica que su carrera profesional es una prioridad para ella.
"Una preocupación que me asalta muchas veces, porque yo quiero tener hijos, es que esta circunstancia no frene mi carrera y que sigan dándome oportunidades. Una de las cosas principales por las que tenemos que luchar es que nadie nos pregunte sobre la maternidad ni la conciliación, que no nos pregunten si queremos tener hijos o no o por la dedicación al trabajo que podemos ofrecer", confiesa.
Después de charlar con ellas, ver cómo trabajan y conocer a parte de su equipo, encontramos varios adjetivos para describir a estas tres mujeres de altos vuelos de Iberia que se convierten en ejemplos a seguir en este 8 de marzo: determinación, profesionalidad y superación. Disfruten del vuelo en clave femenina.