Tortitas para los que nunca han hecho una receta de tortitas
Las tortitas son uno de los mejores desayunos que existen. Si nunca las has preparado aquí te enseñamos cómo preparar tortitas de la forma más fácil.
30 marzo, 2020 10:44- Total: 10 min
- Comensales: 4
Preparar tortitas caseras es tan fácil como mezclar los ingredientes y pasarlos por la plancha. Sin embargo, al ser repostería, muchos no se atreven con ella. Sigue esta receta de tortitas paso a paso y te quedarán las tortitas más ricas del mundo.
Ingredientes
- Harina, 180 g
- Azúcar, 50 g
- Huevos, 2
- Mantequilla, 50 g
- Leche, 275 ml
- Sal, 1/2 cucharadita
- Levadura química, 3 cucharaditas
Paso 1
Batimos los huevos y el azúcar.
Paso 2
Añadimos el resto de ingredientes y mezclamos hasta obtener una masa homogénea.
Paso 3
Echamos un cucharón de masa sobre una sartén a fuego medio y cocinamos hasta que salgan agujeros.
Paso 4
Damos la vuelta y cocinamos un minuto más. Repetimos con toda la masa.
Paso 5
Servimos acompañadas de ingredientes dulces o salados, al gusto.
Paso 1
Derrite la mantequilla en el microondas durante 20 segundos. Resérvala mientras se templa y sigues con el siguiente paso.
Paso 2
Bate los huevos con el azúcar en un bol grande hasta que esté todo bien mezclado y empiece a salir espuma.
Paso 3
Añade la mantequilla derretida ya templada (caliente cuajará el huevo) y el resto de ingredientes. La harina es recomendable añadirla tamizada. Mezcla todo bien hasta obtener una masa homogénea.
Paso 4
En una sartén antiadherente a fuego 6/10 pintamos con una gota de aceite de oliva y añadimos en el centro un cucharón de la masa. Cuando se formen los típicos agujeros en la masa es que podemos darle la vuelta con una espátula. Más o menos en un minuto estará lista por el otro lado, la sacamos, guardamos y repetimos el proceso hasta acabar con toda la masa.
Paso 5
Servimos las tortitas, las podemos acompañar con lo que más nos apetezca, pega tanto dulce como salado.
Cómo hacer tortitas perfectas en casa
Aunque esta receta sea facilísima, tiene algunos trucos importantes que nos puede ayudar a conseguir unas tortitas perfectas hechas en casa.
Cuando batimos el huevo y el azúcar podemos hacerlo durante 5-10 minutos hasta que este doble su volumen. Con este pequeño truco vamos a conseguir que nuestras tortitas sean todavía más esponjosas, una buena forma de hacerlas más ricas todavía.
Es muy importante añadir la harina tamizada a la mezcla para hacer tortitas de forma correcta. Si no tamizamos la harina, lo que ocurrirá es que quedarán pequeños grumos de harina en la masa, y estos no se van a cocinar bien, así que encontraremos trozos de harina cruda en la tortita.
Para evitar esto, como decía, tenemos que tamizar la harina, que no es más que pasarla por el colador más fino que tengamos en casa. Yo lo que hago es pesar primero la harina que necesito para no pasarme luego. Después la voy echando sobre el colador y le doy golpes en el lateral para que vaya cayendo al bol donde hago toda la mezcla. Este sencillo truco de tamizar la harina va a evitar una de las cosas más desagradables en una tortita, los grumos de harina sin cocinar correctamente.
Una duda típica es qué tipo de levadura tenemos que usar para hacer tortitas. La levadura correcta es la química, también llamado impulsor químico. Para hacer tortitas no podemos usar levadura fresca o de panadería, que tienen otra finalidad, la que queremos es la química que con el calor genera gas y crea esa masa esponjosa típica de las tortitas.
Con respecto a los añadidos, podemos servir las tortitas con lo que más nos apetezca. A mi me encanta con una crema de avellana y chocolate casera acompañada de plátano cortado en rodajas, pero aquí la imaginación es la que pone los límites
Otra combinación maravillosa es poner arándanos por encima de la tortita con sirope de arce. No es lo más común en España, pero se puede cambiar por sirope de agave (mucho más fácil de encontrar) o miel, que esa sí que la hay en casi cualquier lugar.
Y para los menos amantes del dulce, las tortitas también combinan perfectamente con ingredientes salados, como por ejemplo el clásico jamón york y queso, que queda perfectamente bien.