Arroz frito cantonés, receta fácil paso a paso

Ya sabéis que me pirran todas las receta asiáticas, me parece que con todas se consigue que las verduras le gusten a casi todo el mundo y son una buena alternativa para ir variando sabores si pretendemos incluir más verduras en nuestra dieta. Como es el caso se este arroz frito cantonés como el de los restaurantes chinos, que aunque se llame frito en verdad es salteado porque se hace solo con una pizca de aceite.

Además, este tipo de recetas tienen la ventaja de que tienen tiempos de cocción muy cortos y se preparan en un momento. De hecho, la idea del arroz frito es saltear un arroz blanco que ya está cocido y que perfectamente podemos tener guardado en la nevera desde el día anterior -incluso dicen que haciéndolo así el arroz engorda menos–.

Preparación del arroz frito cantonés

Empezamos cociendo el arroz blanco si no lo hemos preparado con antelación. Yo lo he cocido solo en agua con un poco de sal y lo he hecho en el microondas siguiendo las instrucciones para hacer el arroz pilaf que ya os dimos hace tiempo. 

Cortamos el filete de ternera en tiras finas, lavamos el pimiento, pelamos la zanahoria, y los cortamos junto con la cebolleta en tiras largas de tamaño similar a las de carne.

En una sartén o cazuela de fondo grueso ponemos a calentar el aceite de sésamo a fuego a tope.

Salteamos las tiras de carne con una pizca de sal durante un par de minutos sin dejar de remover hasta que cojan color y las reservamos.

En la misma cazuela echamos la cebolleta, la zanahoria y el pimiento y los salteamos a fuego vivo durante unos 3 minutos sin parar de remover, añadimos el vinagre, esperamos a que se evapore, añadimos los guisantes y la salsa de soja y lo dejamos con el fuego al mínimo durante  unos 5 minutos, pues las verduras tienen que quedar al dente.

Añadimos las tiras de carne que tenemos reservadas, subimos el fuego, añadimos el arroz y salteamos el conjunto durante unos dos minutos, removiendo de vez en cuando o meneando la cazuela para que no se agarre.

Apartamos del fuego y servimos inmediatamente. Se puede poner una salsera con más salsa de soja para que quien lo prefiera más salado se sirva a su gusto.

Resultado

Este arroz frito cantonés es una receta que, como habéis podido comprobar, lleva bastantes verduras y carne de ternera magra cocinada con apenas una cucharada de aceite para dos raciones, por lo que es perfecta para los que os gusta cuidaros pero no queréis renunciar a las cosas ricas.

Si no sois demasiado fans de la ternera, se puede añadir la ración de proteínas con filete de pollo, tofu o simplemente una tortilla francesa.