Uno de los bienes de Sijena.

Uno de los bienes de Sijena.

Huesca

Aragón gana otra batalla a Cataluña en los tribunales por la propiedad de 111 joyas del patrimonio sacro

La Audiencia de Huesca ha confirmado la devolución de los bienes de las parroquias de la Franja a la Diócesis de Barbastro-Monzón.

Más información: Aragón reivindica su historia en Sijena a la espera de las obras que faltan: “La devolución de los bienes es un acto de justicia”

Zaragoza
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Más de un cuarto de siglo de pleitos, reclamaciones y disputas entre Aragón y Cataluña han desembocado en una sentencia firme: la Audiencia de Huesca ha confirmado la devolución de los bienes de las parroquias de la Franja a la Diócesis de Barbastro-Monzón. Con este fallo, el tribunal ratifica la sentencia dictada en 2019 por el Juzgado de lo Civil de Barbastro, dando la razón al obispado aragonés en un conflicto que ha desbordado lo meramente judicial para convertirse en un símbolo de la identidad y el patrimonio cultural.

El tribunal oscense ha desestimado todos los argumentos esgrimidos en los recursos de la Generalitat de Cataluña, el Consorcio del Museo Diocesano y Comarcal de Lérida y la Diócesis de Lleida, con la única excepción de lo relativo a las costas judiciales de las dos últimas instituciones.

Las obras ya están en Barbastro

El abogado de la Diócesis de Barbastro-Monzón, Joaquín Guerrero, en declaraciones a EFE, ha celebrado la sentencia aunque advierte que el Museo de Lleida aún podría intentar recurrirla ante el Tribunal Supremo. No obstante, la realidad es que los bienes en litigio ya no se encuentran en territorio catalán: desde marzo de 2021 forman parte de la colección del Museo Diocesano de Barbastro, después de que la justicia ordenara su entrega.

Guerrero ha subrayado el carácter "auténticamente singular" de este proceso, pues en la vía civil no es habitual ejecutar una sentencia antes de su confirmación definitiva. Sin embargo, dada la excepcionalidad del caso, se llevó a cabo el traslado sin esperar la resolución final de los recursos, lo que marcó un hito en la recuperación del patrimonio aragonés.

Un tesoro artístico de incalculable valor

El litigio no ha sido solo una cuestión de jurisdicción, sino también de la importancia artística e histórica de las piezas en disputa. Entre las 111 obras restituidas a Aragón, destacan auténticas joyas del patrimonio sacro, como el frontal de San Vicente de Tressera, valorado en 1,2 millones de euros, el frontal de Buira (900.000 euros), los retablos de Santaliestra y Villanueva de Sijena (600.000 euros cada uno) y la virgen polícroma de Zaidín (400.000 euros).

Estas piezas, testigos silenciosos de siglos de historia, han cambiado de ubicación muchas veces, pero con esta sentencia se cierra un capítulo que parecía eterno. Aragón ve así reconocida su legítima propiedad y culmina con éxito un proceso que, durante décadas, ha sido motivo de enfrentamiento entre territorios.