Masiva reclamación política, económica y social de la segunda pista del aeropuerto Alicante-Elche

La Institución Ferial Alicantina (IFA) ha acogido este miércoles la presentación del 'Estudio del impacto económico de la necesidad de la segunda pista del aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández', donde el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha propuesto la creación de una "autoridad nacional de infraestructuras" para evitar los "chantajes y caprichos".

En el acto también han estado presentes los alcaldes de Alicante, Luis Barcala, y Elche, Pablo Ruz, y numerosos dirigentes empresariales de la provincia y la Comunitat Valenciana. Una de las principales conclusiones a las que llega el estudio de la Cámara de Comercio de Alicante es que sin una segunda pista de vuelo, el aeropuerto Miguel Hernández no podrá asumir futuros aumentos del tráfico.

El informe detalla la cifra de 2 millones de pasajeros al año los que no se podrían asumir, lo que pondría en riesgo un PIB provincial de 800 millones de euros anuales, cuantía que se dejaría de generar principalmente en el sector servicios (el 92 por ciento).

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En cuanto al empleo, la no construcción de una segunda pista afectaría de forma negativa a 14.800 puestos de trabajo que no podrían mantenerse o crearse en el periodo 2024-30, la mayoría también en el sector servicios (13.825), seguido de la construcción (531) e industria (321).

El presidente de la Generalitat ha destacado el rigor con el que está elaborado este estudio y sostiene que es "concluyente" para hacer realidad la segunda pista del aeropuerto, dejando a un lado la política o los partidos.

A la presentación han asistido el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, el presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Baños, y los alcaldes de Elche y Alicante, Pablo Ruz y Luis Barcala.

Mazón ha destacado que cada año que pasa sin una segunda pista significa que el PIB alicantino y de la Comunitat se resiente en 800 millones de euros, es decir, 2,2 millones diarios, y se dejan de crear 50 empleos cada 24 horas, ante lo cual ha rechazado el reciente anuncio del Gobierno central de que la segunda pista se va a incorporar a los estudios previos.

Pone como ejemplo Málaga, que desde 2012 tiene su segunda pista, "mucho antes de llegar a su tope de capacidad y antes del punto en el que Alicante se encuentra y, además, con conexión ferroviaria", de la que este carece.

El presidente también ha señalado que este jueves habrá en València una reunión de trabajo entre los más altos responsables de AENA y con las conselleras Nuria Montes y Salomé Pradas. El 'popular' confía en que de esta cita salgan avances en la remodelación del aeropuerto de Valencia-Manises, así como sobre la segunda pista en Alicante-Elche.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Baño, ha destacado la capacidad de crecimiento del aeropuerto, que podría superar en 2026 los 20 millones de pasajeros. "La realidad del aeropuerto es que desde octubre de 2023 está creciendo a un ritmo mayor de lo previsto, recuperando el tráfico con el Reino Unido y Argelia, lo que justifica en mayor medida la necesidad de acometer cuanto antes esta infraestructura". 

Unidad independiente 

Mazón ha exigido la creación de una "autoridad" independiente de Infraestructuras. "Igual que existe la Airef, una unidad independiente que busca con objetividad en los datos fiscales, que haya una unidad independiente en España que analice y explique con transparencia y objetividad los plazos y prioridades para las inversiones estratégicas". 

La misma velaría por "las ventanas de oportunidad" en materia de infraestructura y se encargaría de estudiar y valorar "el orden de inversiones en el territorio español" para que la decisión de invertir en un lugar u otro sea "objetiva" y se evite convertir en "una herramienta arrojadiza".

"Probablemente nos evitaríamos tanto los chantajes de algunos territorios como los caprichos de algún Gobierno, y tendríamos una tabla objetiva donde diga", por ejemplo, "esta carretera le toca en el 2027 o esta inversión del aeropuerto en el 2030 por estos hechos objetivos", lo que permitiría a las administraciones "irse preparando con un horizonte", concluye el president.