El ‘sentador de madres’: el invento que evitará que ellas se encarguen de todo en las cenas de Navidad

Si hay una frase que se va a repetir a lo loco durante los próximos días en un porcentaje del 50-50 junto con “feliz Navidad”, esa es “mamá, siéntate por favor”.

Conoces la estampa: te acomodas en una silla alrededor de una mesa algo más grande de lo habitual mientras una mujer designada como la anfitriona por una ley no escrita se dedica a llevar y traer sin parar abundantes platos con las distintas creaciones culinarias que ella misma ha preparado. A lo sumo ayudadas por otras mujeres que se solidarizan con la causa -y, en cierto modo, también obligadas por otra normativa jamás sometida a referéndum familiar y/o estatal-, por lo general, durante las cenas de Navidad las madres del mundo no mantienen sus piernas dobladas en un ángulo de 90 grados durante más de 10 minutos. Al fin y al cabo, alguien (ellas) tiene que cocinar, encender y apagar el horno, emplatar, retirar la vajilla, traer servilletas, procurar que jamás quede una copa vacía e, incluso, pelar las uvas de aquel pariente cercano que tanto asco siente al tragar la piel.

El invento definitivo con el que los hombres descubrirán que no solo tienen manos para pelar gambas gracias a su tecnología de última generación

Y, sin embargo, nunca te ha dado por hacer algo más que solicitar a la matriarca de turno que “pare quieta”.

Se acabó. Locas del Coño Magazine, la revista feminista colaborativa digital, ha desarrollado “el invento definitivo con el que los hombres descubrirán que no solo tienen manos para pelar gambas gracias a su tecnología de última generación”. Se llama el ‘sentador de madres’ y busca abrir los ojos de los varones de las familias para que entiendan que las mujeres no tienen por qué cargar con todas las tareas relacionadas con las cenas navideñas. Y, a poder ser, no solo en estas fechas tan señaladas.

“Empieza la cena y, con ella, el baile de la desigualdad”, plantean en el vídeo en el que podemos ver a una mujer en el papel de ‘madre’ corriendo de un lado a otro para atender las necesidades de la mesa -probablemente copada por inmovilizados comensales- hasta que la voz en off se pregunta: “¿Qué pasa? ¿Es que nadie más sabe apagar el horno? ¿Nadie sabe dónde está la cocina? ¿O será la mala costumbre?”. Es entonces cuando presentan la solución definitiva para acabar con esta pandemia global de la esclavitud materna por Navidad: el ‘sentador de madres’.

Empieza la cena y, con ella, el baile de la desigualdad

La simpática idea plantea que, gracias al ellas mismas decidan cuándo y cómo quieren liberarse del cinturón quedando, mientras tanto, atadas a un solo quehacer: disfrutar de la cena familiar sin tener que levantarse cada dos minutos para atender a los comensales.

El irónico vídeo suma más de 260.000 reproducciones solo en el canal de YouTube de Locas del Coño. “Esta Navidad, la tecnología al servicio de la igualdad”, explican en el ficticio spot cuyo mensaje queda más que claro: que las miles de mujeres que “por costumbre” están atadas a servir a los comensales puedan disfrutar en igualdad de condiciones del encuentro familiar. “Felices madres. Felices Navidades”.