La raza de perro que nunca tendría un veterinario: te va a traer problemas durante su vida

Muchas veces, cuando pensamos en tener un perro nos preguntamos qué raza es la más adecuada. Solemos fijarnos en la apariencia y el tamaño. Sin embargo, dejamos de lado otros aspectos que son fundamentales a la hora de escoger al animal que nos acompañará buena parte de nuestra vida. Estos aspectos son la salud y el carácter.

Con la irrupción de TikTok, son muchos los que se lanzan a compartir vídeos en la red social. Los usuarios son infinitos, observando un auge de los perfiles profesionales. Enfermeros, profesores, cocineros e, incluso, peluqueros caninos y veterinarios. Estos últimos protagonizan uno de los vídeos más virales del momento.

Cuando se les plantea la pregunta de ¿Qué raza de perro no tendrían?, los veterinarios lo tienen claro. Solo hay dos respuestas posibles: bulldogs y huskies. Bulldogs de todo tipo: franceses, ingleses... ninguna nacionalidad causa ilusión.

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Los bulldogs casi siempre necesitan mas de una cirugia en su vida, no pueden respirar, no pueden parir naturalmente, tienen muchas enfermedades congenitas, como estenosis pilorica, enfermedades en el corazon, sufren mucho de alergias, problemas en columna (dejan de caminar) y muchos problemas en los ojos, aparte donde vivimos nisiquiera pueden salir a pasear por miedo a un golpe de 🥵calor

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¿Por qué no elegirlos?

Ambas razas presentan series dificultades que pueden afectar a la calidad de vida de los animales. En el caso de los bulldogs, los veterinarios explican que, debido a su particular morfología, se enfrentan a una serie de problemas de salud. Su estructura facial, que se caracteriza por ser achatada, la "braquicefalia", provoca dificultades respiratorias significativas. Esto tiene como consecuencia que muchos de estos animales deban de pasar por quirófano a lo largo de sus vidas.

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¿Quién no ha escuchado alguna vez la respiración agitada y casi atragantada del bulldog? Siempre está presente, parece que en cada toma de aire se ahogan. Además, su físico también los hace propensos a tener problemas de columna vertebral, lo que puede provocar que pierdan la capacidad de caminar.

Tanto los bulldogs ingleses como los franceses también sufren de diversas enfermedades congénitas, como la estenosis pilórica, una condición que afecta el paso de los alimentos al intestino delgado. Por si esto fuera poco, también son propensos a desarrollar enfermedades cardíacas, alergias y problemas oculares, lo que puede generar un alto costo económico y emocional para los dueños. En climas cálidos, son particularmente vulnerables a los golpes de calor, lo que obliga a limitar sus salidas y actividades al aire libre, lo que puede afectar negativamente su bienestar.

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En el caso de los huskies, el problema es el nivel de hiperactividad. Se trata de una raza que requiere mucha atención y mucha actividad física. También suelen ser reacios a entablar amistas con otros perros. Además, son propensos a tener problemas de rodilla y de cadera y, al final de su vida, suelen sufrir displacia de cadera. Los huskies son también son conocidos por los destrozos que dejan a su paso, lo que, previsiblemente, enfadaría a los futuros dueños. 

Asimismo, hay que tener muy en cuenta el clima al que exponemos a estos animales. Los huskies provienen de Alaska, una zona caracterizada por tener un clima especialmente frío. Por lo tanto, exponerlos a las altas temperaturas de otros puntos geográficos puede provocar que sufran golpes de calor. ¿Y tú? ¿Qué raza de perro no tendrías?