Vecinos de Cuatro Caminos en A Coruña vigilan un narcopiso y reciben amenazas
Los vecinos de Pérez Ardá número 14 han comenzado recientemente la vigilancia y desde la asociación de vecinos señalan que hace un año también hubo narcopisos en Alcalde Marchesi
19 marzo, 2024 14:21Los vecinos del número 14 de la calle Pérez Ardá del barrio de Cuatro Caminos en A Coruña están viviendo una pesadilla debido a la existencia de un narcopiso en el inmueble. Según relata el presidente de la asociación de vecinos A Barcarola, Juan Iglesias, el problema es aún más grave si cabe porque denuncia que es el mismo propietario del inmueble quien trapichea con droga desde su casa. "Es un problema por desgracia de toda la ciudad", lamenta.
Esto ha provocado un flujo de personas que acuden a comprar diferentes sustancias al edificio, por lo que los vecinos recientemente se han organizado para hacer vigilancias y evitar que estas personas entren en el inmueble. Esto ha desencadenado que los habitantes del edificio reciban amenazas por parte de clientes que van a comprar droga y de momento esta situación tensa no ha ido a más, aunque preocupa en el barrio.
Según el presidente vecinal, los afectados están en contacto continuo con la policía, que acude de vez en cuando, pero expresa que su temor es que le pase algo a los vecinos que vigilan: "tienen que estar desesperados por la situación en el edificio, pero la droga hace que estas personas busquen lo que necesitan porque se lo pide el cuerpo y pueden cometer burradas", advierte.
En este contexto, el presidente de la asociación recuerda que hace un año aproximadamente sufrieron narcopisos en Alcalde Marchesi. "Vimos las actuaciones policiales, ellos tienen toda la información y tienen que resolver este tipo de problemas", cuenta. Sobre las guardias, detalla que muchas se producen más de cara a la noche porque en el inmueble se escuchan gritos y ruidos de madrugada en los últimos días provenientes del narcopiso.
"Le pediría a los jueces, que son los terceros en discordia, que den más armas a la policía", concreta, a la vez que apunta que "no queremos que pasen cosas de las que nos podamos arrepentir todos a posterior si la tensión va a mayores". "Los vecinos no deben hacer lo que están haciendo pero yo entiendo su desesperación porque en ese inmueble viven niños también", argumenta, mientras confía en el apoyo del Concello de A Coruña, Policía Local y Nacional en esta situación.