Durante su última visita a España, el rey emérito pudo disfrutar de unos días estupendos de mar, gastronomía y familia. Mientras las cosas se van relajando entre el jefe del Estado actual y su padre, lo cierto es que sus seres queridos más cercanos quisieron acompañarle estos días de finales de septiembre que pasó en Sanxenxo (Pontevedra). Una de estas personas que se quiso acercar a Galicia a verle fue su hermana, la infanta Margarita, que, acompañada por sus dos hijos, Alfonso y María Zurita, y su nieto Carlitos, se embarcaron junto al rey Juan Carlos, para disfrutar de la ría de Pontevedra. Tras regresar del mar, toda la familia compartió un almuerzo en el Club Náutico de la localidad gallega y, por la noche, acudieron a un célebre restaurante de O Grove.
Fue una jornada en familia y todos sabemos lo unido que se ha encontrado siempre Juan Carlos con sus dos hermanas, tanto con la fallecida infanta Pilar como con Margarita. Lo que más sorprendió fue la presencia del sobrino del emérito, Alfonso Zurita, un hombre discreto, al que no le gusta aparecer en público y que acaba de cumplir 50 años a la sombra de la una familia a la que está unida, pero sin destacar sobre nadie. Su hermana, María, sí que está más presente en las redes sociales y en los medios de comunicación, pero él prefiere quedarse siempre en un segundo plano.
El pasado nueve de agosto, Alfonso cumplía medio siglo de vida, y su hermana María no desaprovechó la ocasión para enviarle un cariñoso mensaje de felicitación a través de sus redes sociales: "Mi querido Alfonso, nunca te decido nada porque sé que no te gusta el protagonismo". Y tiene toda la razón, ya que poco se sabe de la vida del hijo mayor de la infanta Margarita y Carlos Zurita.
"Siempre vas de perfil por la vida, sin molestar… pero hoy cumples 50 años, tu medio siglo y no lo puedo dejar pasar. Eres una de las personas más nobles, honradas, educadas y buenas que conozco. Un ser excepcional en todos los sentidos", le decía su hermana María.
Los duques de Soria, ella con 84 años y su marido, con 90 recién cumplidos, pueden presumir de tener la suerte de compartir su vida cada día con sus dos hijos, ya que ambos viven con ellos en la casa familiar del barrio de Salamanca de Madrid, dónde también pueden disfrutar de su único nieto, Carlitos.
Su viaje a Estados Unidos
Alfonso Zurita de Borbón es el primo más misterioso de todos los que tiene Felipe VI. No le gusta la vida pública española, nunca se le ve en las fiestas de la gente bien de Madrid, no se prodiga y tampoco propicia ni un escándalo. Se trata de un hombre independiente de su apellido, alto, rubio y de ojos azules, se parece muchísimo a su hermana pequeña, María, con la que está estrechamente unido. Su familia le llama en la intimidad, Cocó, aunque su tío Juan Carlos, le ha tratado siempre y sigue haciéndolo a pesar de tener ya medio siglo de vida, Alfonsito.
De vida tranquila y discreta, el sobrino de la Reina Sofía estudió ciencias políticas en la Universidad de Sussex (Inglaterra). Como hizo su primo, siguió estudiando con un máster en relaciones internacionales en la Universidad Johns Hopkins de Maryland, en los Estados Unidos. Fue en ese momento cuando comenzó su interés por las finanzas y el funcionamiento de la economía mundial. "Hubo un antes y un después de su etapa de estudios en Estados Unidos. Lo cierto es que volvió siendo otra persona. Aquellos meses cambiaron su forma de pensar y lo que quería hacer. Pasó a trabajar en temas de investigación y análisis económicos y sociales, llegando a ocupar ese puesto en OHL Concesiones, pero lo que le apasiona es escribir, como demuestran los siete libros que ha publicado ya sobre el tema", revela una fuente cercana al sobrino del rey emérito.
Su último libro se llama ‘Neoliberalismo reset’ dirigido, como todos los que escribe, a un público académico, y fue publicado el pasado mes de enero. Ahora se encuentra trabajando en un nuevo volumen, que ya tiene titulo ‘La era neoliberal’.
Cuando publicó su último libro, Alfonso realizó algunas entrevistas para distintos medios de comunicación, que le preguntaron por su identidad y su familia, a lo que él contestó con total naturalidad, como si mantenía relación con su tío Juan Carlos, exiliado en Abu Dabi. "Es una pena verla así, lejos de España, cuando él ha sido el artífice y el impulsor de la España moderna", comentaba. "Es una situación un poco absurda".
Pero los libros no son su trabajo, sino en realidad su pequeño entretenimiento, ya que su vida laboral le ha llevado al Banco Interamericano de Desarrollo, etapa en la que vivió en Washington, en la sede de la UNESCO en París y para la Fundación BBVA de Madrid. Ahora se encuentra centrado en su hobby, ya que dejó su despacho en el grupo Villar Mir, donde estaba desde 2016, cuando comenzó la pandemia.
Alfonso es un hombre soltero, que vive con sus padres a pesar de que mantiene una relación con una mujer de Bilbao desde hace más de 15 años. Nada se sabe de ella, más que se llama Isabel y que es una persona igual de discreta que el primo de Felipe VI, ya que le interesa la popularidad tan poco como a él. "En eso ella es mucho peor que él. No quiere salir en los medios ni que nadie sepa nada sobre su familia. Tienen mucho dinero, una finca enorme en Toro (Zamora), donde pasan en pareja largas temporadas, pero ni boda ni hijos ni nada… Ellos son felices así, como están", nos explica la misma fuente. "Ella tiene sus negocios, aunque ahora está un poco retirada. Importaba muebles desde Asia y le fue increíblemente bien. Pero es todavía más discreta que él", añade la misma fuente.
El lazo de unión entre los duques de Soria y sus hijos es muy fuerte. En alguna ocasión se le ha preguntado al primogénito por Margarita y Carlos Zurita y él ha sido claro y cariñoso. "De mi madre he aprendido la estabilidad emocional, sentimental. Ella ha sido mi apoyo en todos los sentidos y la compresión absoluta. De mi padre aprendí la racionalización del ser, el tener los pies en el suelo, el verlo todo de forma objetiva. De él he aprendido a ser realista". Y cuando se le ha preguntado por su primo, Felipe VI, Alfonso no ha dudado en dar su opinión. "Felipe está haciendo una gran labor como jefe del Estado".
A sus 50 años, Alfonso Zurita es un gran aficionado al deporte. Juega mucho al squash, deporte que hace con su pareja, llegando a disputar torneos y campeonatos nacionales e internacionales. Como a toda su familia le encanta esquiar, aunque últimamente prefiere el snowboard y le encanta el submarinismo, disciplina que le ha llevado a viajar por medio mundo para poder bucear en los mejores puntos de inmersión.
El heredero del ducado de Hernani, sobrino de Rey, primo de jefe de Estado, e hijo de una duquesa, es un hombre sencillo, al que no le gustan las cámaras y que aspira a seguir descansando en la finca de su pareja en Zamora mientras "encuentra otro trabajo o publica su próximo libro. Para Alfonso la vida es así, simple", sentencia la misma fuente.