Ayuso amplía su plan contra adicciones tecnológicas: habrá equipos de expertos que roten por los pueblos
Tres equipos formados por abogado, psicólogo y educador social se desplazarán por los Ayuntamientos cuando lo soliciten los padres.
27 diciembre, 2023 02:11Desde 2018, el Servicio de Atención de Adicciones Tecnológicas (SAAT) ha atendido a más de 18.000 jóvenes con algún tipo de tecnoadicción. Con sus terapias (en las que están implicados tanto los adolescentes como los progenitores) obtienen una tasa de éxito superior al 80%.
Todo un modelo a seguir que, este 2024, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quiere ampliar a todos los municipios. Y es que, hasta ahora, el servicio sólo funciona en las dependencias de la capital de España.
Pero, tal y como ha podido adelantar Madrid Total, el plan del Gobierno regional es ampliar este servicio a todos los municipios de Madrid gracias a una "asistencia itinerante". Un servicio de expertos que se desplazarán por las localidades.
Será la presidenta regional la que hará el anuncio de esta propuesta este mismo miércoles, tras finalizar el último Consejo de Gobierno del año.
La idea es que comience a funcionar a principios de año con tres equipos formados por abogado, psicólogo y educador social.
El funcionamiento será muy sencillo. Desde el Gobierno regional plantearán a los diferentes consistorios la firma de acuerdos que permitan a equipos formados por abogado, psicólogo y educador social trasladarse para atender a las familias que lo precisen en locales municipales.
La iniciativa comenzará con los citados tres equipos y se irá extendiendo de manera progresiva.
Las terapias suelen tener una duración de entre 3 y 6 meses, con una tasa de éxito superior al 80%, y en ellas están implicados tanto adolescentes como progenitores.
Hay que recordar que el SAAT es el primer recurso público en atender e intervenir en caso de tecnoadicciones, respondiendo a las demandas sociales que nacen por el abuso de las tecnologías por parte de los más jóvenes.
Protocolo en 'coles'
Una de las grandes preocupaciones del gobierno regional en esta legislatura, puesto que, desde que tomara posesión, la presidenta ya ha anunciado varias medidas a este respecto.
Una de las más novedosas ha sido el protocolo por el que, de manera pionera, la Comunidad va a regular la sobreexposición a dispositivos electrónicos con un protocolo en las escuelas públicas y concertadas.
La región quiere que los centros educativos alerten, como ahora hacen con temas relacionados con drogas, abandono o abusos, de las adicciones a este tipo de dispositivos que cada vez proliferan más entre los menores.
Se va a gestionar desde los colegios de manera obligatoria y, en definitiva, va a analizar las actitudes comportamentales a las pantallas (internet, redes sociales y teléfonos móviles), los juegos, los videojuegos, las apuestas y la pornografía entre los alumnos.
La secuencia con la que se guiarán los centros educativos para hacer frente a estas situaciones estará dividida en cuatro fases que van desde identificar el caso hasta derivarlo, si es necesario, a servicios externos al centro educativo.
Comisión en la Asamblea
Además, desde la Asamblea de Madrid, el PSOE, el PP, Vox y Más Madrid han acordado adherirse a un proyecto de los socialistas que pretende estudiar el impacto del uso de pantallas en menores de edad para su posterior extrapolación a nivel nacional.
El proyecto es de gran relevancia. Tanto que, semanas después de anunciar su puesta en marcha, la ministra de Educación, Pilar Alegría, anunció que se iba a estudiar este tipo de dispositivos dentro del aula. Algo que ya hace Madrid en algunas etapas educativas y en forma de recomendación.
Este organismo escuchará a expertos, profesionales, representantes de la administración, de la sociedad civil, industria tecnológica y de los propios adolescentes a través de sus entidades. Entre ellos, estará Family Watch y Unicef, como adelantó Madrid Total.
El objetivo final será una radiografía del uso de la tecnología en la infancia y la adolescencia en la Comunidad de Madrid, y poder presentar propuestas e ideas para evitar su impacto negativo.