Feijóo logra llevar la cita de Sánchez al Congreso el día de la Lotería pero sin expectativas de acuerdo

Pero Feijóo aprovechó ayer el "donde quiera, como quiera y cuando quiera", que le dejó Sánchez botando en la tribuna, para elegir el Congreso como el escenario de la entrevista, que tendrá lugar este viernes a las 10:30.

En la dirección del PP se jactan de que han conseguido evitar el principal temor que albergaban: "Una foto sin contenido para blanquear a Sánchez". Más bien, dicen, han sido ellos quienes han fijado un "orden del día" y una "escenografía en un lugar neutral".

Se trata, además, de "dar valor al Congreso", con "luz y taquígrafos", en contraposición a "las reuniones de Sánchez con los independentistas, con mediador y en el extranjero".

En la dirección del PP reconocen, como adelantó EL ESPAÑOL, que "no reunirse con Sánchez nunca fue una posibilidad", que la decisión de aceptar el envite del presidente estaba tomada desde el principio y que si el Gobierno no remitía un orden del día, como le exigían, serían ellos quienes acabarían moviendo ficha. 

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En definitiva, en el entorno de Feijóo defienden que han conseguido "liderar el debate", para neutralizar así las críticas que puedan surgir en el ámbito de la derecha. Y es que en el PP reconocen que la reunión, después de que el PSOE haya decidido entregar a Bildu el Ayuntamiento de Pamplona, no es plato de buen gusto.

El hecho de que la cita se produzca en un día prácticamente festivo en España representa para el PP un alivio. Será en pleno sorteo del Gordo de Navidad, opacado por la sinfonía de los niños de San Ildefonso.

Diez puntos

Después de muchas idas y venidas, este miércoles por la mañana Feijóo remitió una carta a Sánchez: "Sigue pendiente la fijación de un orden del día para la reunión que me has solicitado. Hemos esperado un tiempo prudencial a la espera de que atendieras este requerimiento (...). Sin embargo, habiendo transcurrido más que una semana sin novedades, considero imprescindible avanzar en este requisito, absolutamente ordinario y sencillo de satisfacer". 

En su misiva, Feijóo directamente incluyó los diez puntos que quiera abordar en el encuentro. Entre otros, la ley de amnistía a Puigdemont, medidas para garantizar la independencia judicial, información sobre las negociaciones mantenidas en Ginebra entre el Gobierno, Junts y ERC; o la parálisis de la moción de censura en Pamplona con Bildu. 

Eso sí, el diálogo se prevé "breve" y las expectativas en ambas partes de llegar a acuerdos son prácticamente nulas. La mayoría de dirigentes consultados por este periódico admiten que es imposible pactar algo, más allá de la reforma de la Constitución para eliminar el término "disminuido". 

Lo que no aceptará Feijóo será la renovación del Consejo General del Poder Judicial en los términos que le reclama el Gobierno. La única posibilidad que el PP contempla para desbloquear la cúpula de los jueces es que Sánchez se comprometa a reformar el sistema de elección de los vocales, aceptando llevar una ley al Congreso en esa dirección al tiempo que pactan la renovación con el sistema actual. De lo contrario, será imposible cualquier avance. 

El líder del PP ha tratado de marcar la iniciativa para que no parezca que hay sumisión con Sánchez. Especialmente después de aquellas palabras de Nadia Calviño, "si el presidente llama, se va". En Génova son conscientes de que, pese a todo, Vox cargará contra ellos. Ayer, sin ir más lejos, Santiago Abascal le dijo a Feijóo en el Congreso que le parecía "un error" que se viese con Sánchez.