La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra.

La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra. EP EP

Política CRISIS EN UCRANIA

Belarra manda a Albares una "agenda de paz para Ucrania" reclamando la retirada de tropas

EL ESPAÑOL accede a la carta del Ministerio de Derechos Sociales que pide también desnuclearizar Europa y ahonda en la división interna del Gobierno.

29 enero, 2022 10:00

Ione Belarra, secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, ha hecho llegar este viernes una carta al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, con 16 puntos para impulsar una "Agenda de Paz" en Ucrania. La misiva, a la que ha tenido acceso este periódico, plantea iniciativas que ya están en marcha, como la de "una autonomía estratégica" de la Unión Europea, o ideas como impulsar "la arquitectura de tratados sobre aspectos militares en Europa para volver al esquema de paz y seguridad cooperativa".

El ala morada del Gobierno insiste en "desnuclearizar" Europa, evitando el despliegue de este tipo de armamento en el continente. Según Belarra, el Gobierno debe apoyar "los esfuerzos internacionales por la abolición de las armas nucleares", incluyendo la firma del Tratado sobre la Prohibición de Armas Nucleares (TPAN), "acordada entre el PSOE y Unidas Podemos en 2018", y el control de los sistemas de armamento letal autónomo.

La ministra abunda en el planteamiento de su formación que supondría imponerle a Ucrania un estatus de "país no alineado". La idea, desarrollada en la intervención del diputado Antón Gómez Reino el pasado martes en el Congreso, implica que los estados europeos fronterizos con Rusia serían forzados a no estar ni con la OTAN ni en la esfera de influencia rusa. Es decir, que Bulgaria, Rumanía o los tres países bálticos serían expulsados de la Alianza Atlántica.

La idea, rechazada de plano por Albares en pasado martes durante su larguísima comparecencia en el Congreso, supondría "limitar la soberanía" de Kiev y de sus ciudadanos, en palabras del ministro. Iría además en contra de la voluntad de los ciudadanos ucranianos -según revela el embajador en Madrid, en una entrevista que publica EL ESPAÑOL este sábado-. Para Moncloa, sería "inaceptable volver a la época de las esferas de influencia", aceptando la imposición de Moscú.

Pero es que la división interna en el Gobierno a cuenta de la crisis de Ucrania comenzó hace ya más de una semana. El mismo jueves 20 de enero en el que la ministra de Defensa, Margarita Robles, anunció el adelanto del envío de la fragata Blas de Lezo al Mar Negro y el ofrecimiento de seis cazas para ampliar el despliegue defensivo de la OTAN en Bulgaria.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, este jueves en Corral de Calatrava (Ciudad Real)

La ministra de Defensa, Margarita Robles, este jueves en Corral de Calatrava (Ciudad Real)

Desde Pablo Iglesias hasta varios ministros y secretarios de Estado salieron en tromba contra "el ardor guerrero" y el "furor militarista" del ala socialista del Gobierno.

"No a la guerra"

Si España fue el país del "no a la guerra" en 2003, los líderes morados sacaron aquellas pegatinas y pancartas, y arremetieron contra Robles o el titular de Exteriores, Albares. Incluso llegaron a comparar a Pedro Sánchez con el José María Aznar de la guerra de Irak, por su empeño en "ponerse el primero de la fila" ofreciéndose para colaborar.

Algunos, como Gerardo Pissarello, se pasaron de frenada y defendieron explícitamente a la Rusia de Vladímir Putin... pero quien más claro dejó que la coalición podría resquebrajarse en caso de conflicto armado fue Gómez Reino, portavoz de Unidas Podemos en la comisión de Exteriores del Congreso. Al ministro Albares le afeó el "seguidismo" de EEUU contra "una Rusia que se ve rodeada por la OTAN en sus fronteras, y que puede sentirse intimidada".

La carta de la ministra Belarra pide asumir, "en el marco de la solución dialogada y europea a la crisis por la que está apostando el Gobierno de coalición", el mandato de la Agenda 2030 para la paz. Y recuerda la resolución que ha firmado España: "Estamos comprometidos a propiciar sociedades pacíficas, justas e inclusivas que estén libres del temor y la violencia. No puede haber desarrollo sostenible sin paz, ni paz sin desarrollo sostenible".

El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha remitido al Ministerio de Asuntos Exteriores esta propuesta, que incluye 16 medidas para impulsar una Agenda de Paz en Ucrania y "garantizar una desescalada del conflicto desde el diálogo y la diplomacia".

Belarra recuerda que "desde el inicio de 2022 asistimos a una escalada de tensión en la zona, con movimientos de tropas rusas a sus fronteras con Ucrania, declaraciones cruzadas y desplazamientos de tropas de la OTAN en Europa del este. El conflicto ha entrado en una nueva fase aún más peligrosa en la que corremos el riesgo de que cualquier incidente pueda desencadenar un conflicto militar entre potencias nucleares".

Albares durante su comparecencia en el Congreso.

Albares durante su comparecencia en el Congreso. Efe

Para evitar esas consecuencias, el Ministerio de Derechos Sociales propone al de Asuntos Exteriores estas medidas "concebidas desde una óptica realista, europea y con valores", e inspiradas en el espíritu del acuerdo de coalición.

Sigue la textualidad de la carta:

Desescalada

1. Promover una retirada mutuamente acordada de las tropas movilizadas durante los últimos días en el marco de la escalada.

2. Llamar a desescalar también el lenguaje utilizado por los medios de comunicación, gobiernos y partes implicadas en el conflicto.

Diplomacia y diálogo

3. Reforzar todos los mecanismos multilaterales (como el Cuarteto de Normandía, la OSCE o la ONU) y vías diplomáticas necesarias para resolver el conflicto en la mesa de diálogo y no mediante el envío de tropas y la amenaza de sanciones. El reconocimiento de la soberanía nacional de Ucrania no será óbice para que España y los socios de la UE cesen de promover la ampliación de la OTAN hacia el Este.

4. Fomentar el respeto e íntegro cumplimiento de los Acuerdos de Minsk. Esto significa, entre otros, velar por el cumplimiento del alto el fuego y la retirada de tropas de la zona; proseguir con el intercambio de prisioneros; garantizar la ayuda humanitaria a víctimas, personas desplazadas y personas vulnerables; y garantizar el acceso seguro de la Misión Especial de la OSCE para cumplir su mandato de fomento de la paz, la estabilidad y la seguridad en la zona.

5. Apoyar los esfuerzos diplomáticos de Francia y Alemania en las negociaciones del Cuarteto de Normandía como el mejor medio de seguir construyendo una postura coordinada y común entre las diferentes sensibilidades de todos los socios europeos.

6. Promocionar el papel de los centros de resolución de conflictos, cultura de paz e integrantes de la sociedad civil en la diplomacia pública española y tomar en consideración sus aportaciones.

Autonomía estratégica de la UE

7. Implementar las discusiones comunitarias sobre autonomía estratégica. Esto es, adoptar una estrategia de acción exterior independiente para definir y defender nuestros propios intereses; repensar estratégicamente nuestras alianzas; y construir una nueva arquitectura colectiva de seguridad más horizontal, cooperativa y multilateral con otros actores.

8. Impulsar la arquitectura de tratados sobre aspectos militares en Europa para volver al esquema de paz y seguridad cooperativa, apoyando las negociaciones para el retorno de Rusia y EEUU a este esquema y a los tratados que abandonaron, singularmente el Tratado de Fuerzas Convencionales en Europa y el Tratado de Cielos Abiertos.

Soberanía energética europea

9. Impulsar la transición energética de la UE para dejar de depender de combustibles fósiles y producir energías renovables de manera autónoma, eficiente y sostenible.

Un nuevo modelo de relaciones internacionales por la paz

10. Promover con y para Ucrania un estatuto no alineado que permita la plena soberanía del pueblo ucraniano sobre su futuro y sus alianzas.

11. Promover la revisión de los conceptos estratégicos en relación a Rusia, evitando la construcción de una imagen de mutua enemistad, y alentando la aplicación de la Declaración conmemorativa de Astaná hacia una comunidad de seguridad (2010) de la OSCE por parte de todos los actores en conflicto.

12. Impulsar una Conferencia europea de distensión en la vecindad oriental con la participación de todos los actores de la región. La Unión Europea siempre va a ser vecina de Rusia, por lo que es necesario construir un proyecto común de convivencia, derechos y coexistencia pacífica.

13. Garantizar la prohibición de venta de armas y material bélico en casos de conflicto y violaciones de derechos humanos, incluyendo la realización de una auditoría a la aplicación de la ley española de comercio de armas y del Tratado Internacional sobre Comercio de Armas.

14. Impulsar la desnuclearización apoyando las negociaciones entre las potencias nucleares para evitar su despliegue en Europa y los esfuerzos internacionales por la abolición de las armas nucleares, incluyendo la firma del Tratado sobre la Prohibición de Armas Nucleares (TPAN), acordada entre el PSOE y Unidas Podemos en 2018, y el control de los sistemas de armamento letal autónomo.

15. Ejecutar las resoluciones de Naciones Unidas sobre Mujeres, Paz y Seguridad en situaciones de conflicto relativas a la inclusión de la perspectiva de género y la participación de las mujeres en la resolución de conflictos y procesos de paz; la protección contra la violencia sexual y la promoción de sus derechos.

16. Reforzar y agilizar los procesos de acogida de solicitantes de asilo en España y la UE estableciendo vías legales y seguras para las personas procedentes de Ucrania que lo necesiten.