Vox y Teresa Rodríguez se oponen a la reforma del Parlamento andaluz que castigará a los tránsfugas

"Se entiende en situación de transfuguismo a los diputados que, traicionando al sujeto político que los presentó a las elecciones, hayan abandonado el mismo, hayan sido expulsados o se aparten del criterio fijado por sus órganos competentes".

Este entrecomillado corresponde a la futura disposición adicional quinta que quiere añadir el Parlamento andaluz en su determinación por castigar el transfuguismo. 

La Cámara autonómica se ha embarcado en una reforma de su Reglamento que promete tormenta. La excoordinadora de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, expulsada por tránsfuga del grupo parlamentario, está en contra de esta nueva normativa y ya ha anunciado que la recurrirá al Tribunal Constitucional.

Rodríguez no es la única que no respalda la reforma. Vox también tiene "dudas sobre la legalidad, la corrección jurídica y la constitucionalidad" de la propuesta, que contempla la expulsión de un diputado por separarse del "criterio político" del partido por el que fue elegido. De ahí que prefiera que se tramite en pleno del Parlamento. Así lo ha manifestado su portavoz, Alejandro Hernández.

Reforma exprés

Esta reforma sigue la estela del Pacto Antitransfuguismo nacional que impulsó Ciudadanos y suscribió la mayoría de fuerzas políticas. Vox no lo hizo.

La proposición de ley consensuada ahora en el Parlamento regional por PP, PSOE, Cs y Adelante Andalucía, busca modificar el reglamento de la Cámara y los de las corporaciones locales para adaptarlos al criterio establecido.

Ese pacto nacional sirvió ya el pasado mes de noviembre para justificar la expulsión de Teresa Rodríguez y el resto de diputados. No obstante, la medida se demoró durante semanas debido a las lagunas legales en el Reglamento autonómico. Además, no había precedentes de una situación parecida.

La reforma fue registrada de urgencia el pasado 21 de enero como proposición de ley y el trámite será rápido. El debate final de prevé para el mes de abril.

Aunque la nueva norma contará con los votos suficientes para ser aprobada, los grupos podrán presentar enmiendas. El objetivo es sacarla adelante lo antes posible para poder tener un marco legal claro. La idea es que pueda comenzar a debatirse en el orden del día del primer pleno del mes de febrero. 

Fuentes del Parlamento andaluz reconocen a EL ESPAÑOL que hay otras cuestiones pendientes de modificar en el reglamento. Por ello, la presidenta de la Cámara, Marta Bosquet, está preparando una reforma más profunda. "Desde que se reformó el Estatuto de Autonomía hay artículos que no son congruentes", dicen esas fuentes.

Los principales cambios

Además de la citada disposición adicional quinta, la reforma afecta al artículo 24 del Reglamento, sobre la justificación de la baja de un diputado. Cuando se apruebe, quien cause baja de su grupo parlamentario adquirirá necesariamente la condición de diputado no adscrito.

Será considerado como tal, quien abandone voluntariamente el grupo y lo comunique a la Mesa del Parlamento y también aquel que sea expulsado en aplicación de la normativa interna de cada grupo.

La Cámara establece ahora que la comunicación se hará por escrito de su portavoz a la Mesa, la cual se limitará a comprobar que el acuerdo ha sido adoptado por el órgano o personas competentes, con las mayorías en su caso previstas. 

El escollo con Adelante Andalucía se produjo principalmente por este punto. El grupo carece de normativa interna y se justificó la mayoría tras expulsar a 9 de 17 diputados. El nuevo Reglamento también obliga a todos los grupos a dotarse de esas normas internas.

El texto regula así mismo el procedimiento de intervención de los diputados no adscritos en el pleno. Así, cuando el número de parlamentarios sin grupo altere la proporcionalidad, se podrán establecer fórmulas que repongan la representación política que salió de las elecciones, como el voto ponderado. 

La asignación a los grupos

De igual forma, la reforma también establece que en caso de que se produzca la usurpación parcial o completa de la denominación de un grupo, el perjudicado podrá pedir a la Mesa un cambio de denominación mientras se mantenga la situación.

Otro cambio que beneficiaría a los seis diputados que quedan en Adelante Andalucía y a Vox -que perdió a una parlamentaria hace un año- es la modificación en la asignación presupuestaria a los grupos. La confluencia de izquierdas 1,7 millones de euros al año, pero la expulsión de Rodríguez y sus afines conlleva una pérdida de 5.000 euros al trimestre por cada uno.

El nuevo reglamento establecerá que los medios les serán asignados a los grupos parlamentarios en base a los diputados obtenidos en las elecciones. Todo ello sin que resulte relevante el número de parlamentarios con que cuente en cada momento.

Recurso al TC

Teresa Rodríguez insiste en que no se considera tránsfuga y se compara con la ministra de Trabajo. A su juicio, Yolanda Díaz también debería ser expulsada al cursar su baja como militante de IU. 

Por ello, acudirá al Tribunal Constitucional para interponer un recurso de amparo contra esta reforma del reglamento de la Cámara. Cree que es "una barbaridad y  que "rompe el principio de un diputado, un voto, para ponderar el de las formaciones políticas".

La política gaditana y los otros ocho diputados expulsados ya acudieron al Alto Tribunal para pedir amparo por su expulsión. Mantienen la esperanza de que resuelva medidas cautelares porque así recuperarían el control de la confluencia. Mientras tanto, les toca esperar como no adscritos y tránsfugas. Y por ahora, su único aliado en el Parlamento andaluz es Vox.