Las facturas de los donativos a Revuelta prueban que Vox estuvo tras las Uvas en Ferraz
EL ESPAÑOL publica el documento que se envía desde una cuenta del partido de Santiago Abascal a los donantes y clientes de la organización juvenil que convocó las manifestaciones en la sede del PSOE.
9 enero, 2024 02:43Revuelta es Vox. La formación liderada por Santiago Abascal se encarga de facturar las donaciones que recibe la organización juvenil a través de su web. EL ESPAÑOL ha tenido acceso a los documentos que prueban que, por tanto, el partido político estuvo detrás de la organización de las Uvas en Ferraz.
Hasta ahora, Revuelta y Vox han negado cualquier vinculación orgánica y han insistido en su autonomía. Sin embargo, las facturas por las donaciones realizadas a esta plataforma de jóvenes son enviadas desde la dirección de correo electrónico compras@voxespana.es, un email corporativo del partido político utilizado para trámites administrativos internos.
El partido de Abascal gestiona así las cuotas de inscripción, las donaciones y las ventas de la tienda electrónica de la asociación juvenil que organiza, desde el pasado 3 de noviembre, las protestas contra la sede central del PSOE en la madrileña calle Ferraz. También fue Revuelta la organización que, el pasado 12 de diciembre, llamó a la celebración de una "Nochevieja Nacional" en Ferraz.
El PSOE ha denunciado ante la Fiscalía el apaleamiento de una piñata que emulaba al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y que supuso el colofón de la protesta. Tal y como informó EL ESPAÑOL, Germán Nuñez Insausti, conocido en las redes sociales como 'Germán Lipnicki', fue el encargado de llevar y de colgar el muñeco de un semáforo. Este tiktoker y hostelero fue el primero en golpearlo con una fusta y, después, dirigió a los participantes.
La gestión de las facturas y la cesión de datos, además, se hace sin el consentimiento explícito de los donantes, inscritos y clientes de Revuelta. De hecho, la organización juvenil señala en su tuit fijado de la red social X (antes Twitter) lo siguiente: "Somos un proyecto que se financia de manera autónoma. No dependemos ni de partidos ni de fundaciones".
El formulario de compras y donaciones para Revuelta exige indicar un email para la facturación. No obstante, el documento enviado desde el correo de Vox no facilita la denominación social de quien emite la factura ni el CIF de ninguna persona jurídica.
[El hombre de la fusta: Germán Lipnicki, el tiktoker y hostelero que colgó la piñata en Ferraz]
El email que publica EL ESPAÑOL demuestra que el nombre del emisor de la factura es Revuelta, pero que tiene asignada la cuenta compras@voxespana.es. Además, este mismo correo electrónico aparece como contacto: "Por favor, escríbenos a compras@voxespana.es si tienes alguna pregunta".
Estos documentos se envían desde esta cuenta interna de Vox cada vez que una persona realiza una donación, paga por una membresía -de 3, 7, 10 ó 20 euros- o compra la camiseta o la sudadera que está a la venta en la tienda electrónica.
A pesar de ello, desde Revuelta, el pasado 6 de noviembre, respondieron en redes sociales a un artículo publicado por este periódico con el siguiente mensaje: "Ni cachorros de Vox ni cachorros del PP. No lograréis encasillar a un movimiento juvenil que pertenece a toda la juventud de España, no a los partidos".
Hola @elespanolcom, ni cachorros de VOX ni cachorros del PP.
— Revuelta (@revuelta_es) November 6, 2023
No lograréis encasillar a un movimiento juvenil que pertenece a toda la juventud de España, no a los partidos.
Una juventud de corazón ardiente que mantendrá viva la llama de la justicia, el bien y la verdad para el… pic.twitter.com/gySUvaRFbp
Dinero con destino incierto
El entramado de asociaciones alrededor de Vox y la organización de las Uvas en Ferraz se completa con la aparición de ASOMA España (Asociación Social de Mayores), la entidad responsable en la pasarela de pago para pagar la membresía a Revuelta.
Esta asociación es la titular de las cuentas de las plataformas Stripe y Link que realizan la gestión del cobro. Además, ésta fue la entidad que organizó el crowdfunding a través de la cual Antonio Martínez Vázquez, el afiliado de Vox en Villaverde Alto que solicitó los permisos oficiales a la Administración para celebrar las Uvas en Ferraz, recaudó 20.078 euros como impulsor de dicha campaña.
Los cobros realizados por Revuelta, sin embargo, aparecen en los justificantes bancarios a nombre de una cuarta plataforma denominada Batallacultural. Se desconoce, por tanto, si el dinero termina en una cuenta a nombre de Vox, ASOMA o de otra asociación vinculada al partido de Abascal.
Lo que sí queda patente es que todos los datos de las donaciones a Revuelta, así como la gestión de las mismas, acaban en los archivos de la sede nacional de Vox situada en la calle madrileña de Bambú, cerca de la Estación de Chamartín.
Revuelta no tiene CIF ni aparece constituida oficialmente en el registro del Ministerio del Interior, por lo cual no puede disponer de cuenta bancaria ni realizar ningún trámite oficial en la Administración.
Asociaciones 'fantasmas'
Las siglas de Vox tampoco aparecen ni en el manifiesto fundacional ni en la página web de Revuelta, cuyo dominio está a nombre de Plataforma 711, una asociación universitaria ya extinta. Además, el domicilio social que facilita Revuelta sobre esta última asociación en su página web, como ha podido comprobar EL ESPAÑOL, es falso.
Plataforma 711 no consta entre las alrededor de 650 empresas y asociaciones que, según las fuentes consultadas de Cink Coworking, un centro de negocios con varios espacios en Madrid, están domiciliadas en su edificio del Paseo de la Castellana. Jesús de Blas, quien fuera líder de la asociación universitaria ya disuelta, reconoce en conversación con este periódico que "cedieron" a Revuelta el dominio por "pura afinidad ideológica", de forma verbal y bajo un principio de confianza, si bien asegura desconocer dicho domicilio social y estar totalmente desligado.
[El PSOE señala a una red de satélites de Vox como responsables penales de la piñata de Ferraz]
En el caso de la citada ASOMA, la asociación que figura como cobradora de las cuotas de inscripción de Revuelta, la plataforma juvenil amparada por Vox la utiliza pese a tratarse de una empresa fantasma, registrada en marzo de 2022 y sin actividad conocida desde octubre de ese mismo año. En su cuenta de X, apenas compartió algunos posts después de esa fecha.
"No figura domiciliada desde hace más de un año", aseguran a este periódico fuentes del centro de negocios de la madrileña avenida de Manoteras donde supuestamente está radicada la asociación. Su caso es el mismo que el de Plataforma 711.