Exteriores dará de nuevo la gestión de los visados a la firma a la que la Justicia anuló su actual contrato

Pese a todo, Exteriores volverá a confiar a BLS International Services Limited, con sede en India, el mismo servicio de recogida y tramitación de solicitudes de visados durante los próximos tres años, con una posible prórroga de dos años adicionales.

El Ministerio de Asuntos Exteriores inició en 2021 el expediente de licitación. Aunque el concurso no ha concluido, ya se conoce que BLS es la más valorada por los técnicos, por lo tanto, a quien se le solicitó hace dos semanas, el 28 de noviembre, la documentación para formalizar el contrato, cifrado en 113 millones de euros.

Y ello pese a que la Audiencia Nacional dictó hace sólo cinco meses la sentencia que declara la nulidad de la adjudicación del contrato anterior de Exteriores a favor de BLS. El fallo ordena "la retroacción de las actuaciones de la licitación al momento de la valoración de las ofertas, a fin de proceder a nueva adjudicación del contrato".  

Consultados en Exteriores, aducen que esta sentencia "no es firme" y cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo, y que aún "está pendiente la formalización de la adjudicación del contrato a la empresa que ha obtenido la máxima puntuación".

Sin embargo, al haber sido elegida BLS por los expertos y pasar por la mesa de contratación, lo normal es que este contrato sea adjudicado en breve y se haga público.

La resolución judicial sobre el contrato con BLS de 2016, publicada el pasado 13 de julio, establece que la adjudicación no se ajustó a la normativa española ni a lo exigido en los pliegos de la propia licitación.

Oficinas inexistentes

En concreto, señala que la compañía no acreditó "el importe mínimo de solvencia económica requerido para poder participar y ser adjudicatario de la licitación" que, en este caso, consistía en justificar un volumen medio de negocio en el ámbito de la gestión y tramitación de visados de cinco millones de euros en los tres ejercicios inmediatamente anteriores. 

BLS tampoco contaba con oficinas para recibir a los solicitantes de visado en los países en los que iba a operar, pese a que tenía la obligación de disponer de ellas donde España tenía consulados. En realidad, las direcciones que facilitaron al Ministerio de Asuntos Exteriores para acreditar estas oficinas eran pisos en alquiler para otros usos o ni siquiera existían.

Por este motivo, el Ministerio recibió informes negativos de esta empresa de varios cónsules, según ha podido saber EL ESPAÑOL. 

Varios diplomáticos detectaron también un problema con las citas para pedir visados. "Hay un hackeo general de la página de citas. Es imposible conseguir una cita si no pagas a los hackeadores. Se podría haber blindado como lo hacen los bancos, pero hay que gastarse el dinero. O pagas la mordida o no tienes cita", explica un diplomático.

La sentencia contra la adjudicación a BLS también recoge el "derecho a la indemnización" de la firma competidora en el concurso y que ha llevado el caso a los tribunales, y cifra esa compensación en "el 10% del beneficio estimado por el período de tiempo que no se haya podido ejecutar el contrato o, subsidiariamente, en la cantidad que se estime en sentencia". Esto, según las fuentes consultadas, supone alrededor de cuatro millones de euros.