A Rufián le sale el tiro por la culata: las balas de Melilla que echó en cara a Sánchez son de fogueo
Fuentes policiales explican que los cartuchos exhibidos por el portavoz de ERC no tienen capacidad letal, en contra de lo que él señaló.
13 julio, 2022 13:41Las supuestas balas empleadas en Melilla que el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, echó en cara al presidente del Gobierno este martes en la tribuna del Congreso de los Diputados no son otra cosa que cartuchos de fogueo sin capacidad letal alguna.
El representante de la formación independentista las colocó sobre el atril durante su intervención en la primera de las sesiones del Debate sobre el estado de la Nación. "¿Sabe qué son, señor presidente?", pronunció Rufián con tono desafiante, dirigiéndose a Pedro Sánchez. "Son balas que ha recogido mi compañera en la frontera de Ceuta y Melilla, con las que mataron a 37 personas (Marruecos solo reconoce 23)".
Rufián los definió como proyectiles antes de lanzarle a Sánchez toda una serie de reproches. Sin embargo, diversas fuentes policiales refutan la tesis del separatista, explicando que se tratan de cartuchos de proyección.
Estos elementos, empleados mayormente por la Guardia Civil, sirven tan solo para propulsar, por ejemplo, botes de gas, de humo. o pelotas de goma en acciones de unidades antidisturbios. No son balas como tal, ni por sí mismos tienen capacidad ofensiva o de producir daño alguno.
"Se usa también para entrenamiento básicamente o para lanzar salvas en actos", insisten las mismas fuentes. Carece de bala o de proyectil. Se trata de cartuchos de 7,62 milímetros, una medida estándar en los países de la OTAN. "Es como un contenedor con pólvora. Si se lanza solo, únicamente sirve para hacer ruido. Un cartucho de proyección".
["¿Por qué 130.000 ucranianos son una causa y 130 africanos mafia?"]
Otros agentes del Instituto Armado destinados en Melilla van más allá y explican que ni siquiera son esos los cartuchos que emplean en su día a día. "Los que usamos, son los que tienen una marca. En Melilla, es imposible que los recoja", insiste un agente afincado hace años en la ciudad autónoma.
"En Marruecos -prosigue-, puede que los cogiera, pero si le pillan le caen varios años de prisión. Es imposible que los recoja en Melilla porque no los usamos desde lo ocurrido en el Tarajal, ya que el ministerio nos prohibió usar las pelotas".
"No me llames racista"
Ajeno al error que acababa de perpetrar, Rufián prosiguió con su tesis: "¿Por qué 130 africanos asaltando una valla son una mafia y 130.000 ucranianos desplazados son una causa?", se preguntaba Rufián mientras colocaba los proyectiles sobre el atril, calificándolos de balas, intentando poner de relieve el distinto trato del Gobierno con los distintos tipos de inmigrantes. Él mismo se respondía: "Porque los segundos son rubios y tienen ojos azules".
Mientras escuchaba a Rufián, Pedro Sánchez negaba con la cabeza desde la bancada azul del Ejecutivo: "No me llames racista", articuló el presidente del Gobierno, moviendo los labios.
Esta intervención de Rufián hirió a Sánchez más que cualquiera de las frases lapidarias lanzadas por Cuca Gamarra, pues el presidente ha interpretado que el portavoz de ERC le estaba tachando de "racista". Concluida la sesión, Rufián se ha acercado al banco azul y ha mantenido una breve conversación con el presidente del Gobierno para intentar explicarle sus palabras.
A la vez, los agentes que se encontraban en el lado español de la frontera de Melilla así como fuentes oficiales de la Guardia Civil aseguran no darle más importancia a las acusaciones de ERC. "Estamos a lo que la Fiscalía nos pida", recuerdan, para insistir que por el momento ningún representante del Ministerio Público les ha afeado conducta alguna sobre su actuación en aquella jornada.
"Error imperdonable"
Unos minutos después, Sánchez subía a la tribuna para calificar de "error imperdonable" la actuación del portavoz de ERC, al que ha equiparado con los golpistas del 23-F: "Esto no es una Corte de Justicia", le advirtió Sánchez, "es el templo de la palabra. Aquí entraron balas y las trajeron los golpistas", añadió señalando al cielo, donde han permanecido incrustados durante años los proyectiles disparados por los agentes que acompañaron a Tejero en el asalto al Congreso.
Hasta ese momento, los socialistas se mostraban razonablemente contentos por el transcurso de la primera jornada del Debate sobre el estado de la Nación. Consideran que Pedro Sánchez ha logrado desarmar el discurso de la portavoz popular, Cuca Gamarra, al recordar que Alfredo Pérez Rubalcaba acusó al PP de "utilizar el dolor de las víctimas del terrorismo".