Una pelea familiar lleva a la Policía a intervenir un depósito de armas

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a cuatro hombres y dos mujeres de edades entre los 36 y 61 años por su presunta responsabilidad, según la implicación en los hechos, en delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y amenazas graves.

Una disputa familiar entre algunos de los investigados ha sido el detonante para dichos arrestos y para intervenir un depósito de armas.

La investigación se inició el pasado día 15 de octubre cuando los agentes tuvieron conocimiento de un enfrentamiento entre un hombre y dos mujeres, con vínculos familiares entre ellos, según han informado desde la Comisaría provincial, en un comunicado.

Según las pesquisas, estas personas, que no son pareja sentimental, habrían tenido una fuerte discusión en una parcela cuya propiedad comparten. Todos ellos fueron detenidos inicialmente por un presunto delito de amenazas graves, pues supuestamente hubo exhibición de armas blancas entre ellos.

La continuación de las investigaciones condujo a los agentes a la identificación y localización de terceras personas y, además, a la práctica de media docena de registros y la intervención de un depósito de armas.

Según la investigación, el hombre detenido en un inicio por amenazas graves guardaba en el domicilio de un vecino próximo, de 61 años, un arsenal formado por tres escopetas, dos pistolas y un subfusil ametralladora con culatín desplegable, además de diversos útiles y sustancias para el corte de estupefacientes.

Las diligencias practicadas confirmaron, según la Policía Nacional, cómo supuestamente estas dos personas eran las encargadas de custodiar el referido armamento a cambio de dinero, aunque realmente sus propietarios serían otros dos individuos.

Las gestiones de los investigadores han posibilitado en los últimos días la detención en Málaga capital de los presuntos propietarios del arsenal, dos hombres de 39 y 46 años, quienes al parecer habrían pagado mes a mes a un conocido para que guardara el armamento.

Este último a su vez había convencido a un vecino, también a cambio de dinero, para que ocultara en su domicilio el grueso de las armas.

En los domicilios de los principales investigados y propietarios al parecer de las armas, los agentes intervinieron gran cantidad de munición, 46 cartuchos de escopeta, 111 balas del calibre nueve milímetros parabellum y 42 del 38 especial, además de dinero y sustancias estupefacientes.