La profecía
Cine de terror en DVD
8 noviembre, 2007 01:00El Cultural entrega el próximo 15 de noviembre, por sólo 7,50 euros, el DVD La profecía (1975), uno de los filmes más populares de terror de todos los tiempos
Es curioso cómo no hace falta ser creyente para que las películas de terror que involucran elementos religiosos sean, probablemente, las más terroríficas de todos. Si a eso le añadimos el componente perverso y malsano que siempre supone ver a un niño como encarnación del mal quizá podamos comenzar a entender el inmenso efecto que tuvo La profecía en su momento, convirtiéndose en una de las películas más famosas de los años 70 además de iniciadora de una franquicia casi interminable cuyo último capítulo tuvo lugar el pasado año, cuando se estrenó La profecía 666, remake de este filme original. La acción nos traslada a Roma, donde el embajador estadounidense (Gregory Peck) y su esposa (Lee Remick) esperan impacientemente su primer hijo. Sin embargo, éste muere al nacer y el diplomático decide in extremis aceptar la adopción de un niño que ha perdido a su madre en el parto, ocultando a su propia mujer el cambiazo.Como suele suceder, al principio todo parece funcionar de maravilla. Pero no pasa mucho tiempo antes de que las muertes extrañas comiencen a suceder en el entorno del niño, que a medida que crece se va volviendo un ser más inquietante. Tanto, que sus propios padres finalmente no tienen más remedio que admitir que son los progenitores, nada menos, que del propio diablo. A partir de aquí, su principal problema será deshacerse de él, una tarea nada sencillo ya que el ritual para terminar con el diablo tiene un alto grado de complejidad. La famosa partitura de Jerry Goldsmith, la ajustada dirección de Richard Donner (quien opta por una puesta en escena sutil, más centrada en el drama de los personajes que en la truculencia) aderezan uno de los filmes punteros del terror.
· Charlton Heston, Roy Schneider y William Holden declinaron el papel que finalmente haría Gregory Peck. Holden acabó apareciendo en la desangelada secuela.
· Una de las consecuencias del éxito de la película fue la popularización de los perros Rotweiller.