Turrell acerca Vejer de la Frontera al Cosmos
El artista inaugura la arquitectura Second Wind en el centro de la Fundación Montenmedio
29 mayo, 2009 02:00James Turrel en Vejer de la Frontera (Cádiz).
Paula AchiagaDespués de tres años de trabajo, James Turrell inaugura este sábado el proyecto realizado para la Fundación NMAC, en Vejer de la Frontera (Cádiz). Second Wind 2005 es el título de esta obra site-specific que ha costado a Montenmedio un millón de euros. Es la primera obra del artista norteamericano en la colección permanente de un centro español.
La obra es una arquitectura semienterrada en la tierra. Una pirámide a la que el espectador accede a través de un túnel. Una vez dentro, una cúpula redonda de piedra remite a las stupas budistas las cuales, por su forma y posición producen el efecto de acercar el cosmos al espectador. Por un pasadizo se accede al centro de la stupa y es allí donde, gracias a la abertura circular del techo, el visitante puede contemplar los cambios de la iluminación natural. Turrel se convierte así en escultor de la luz, un fenómeno clave en su trabajo y por el que el artista siente una fuerte atracción. Así lo confesaba en una entrevista concedida a El Cultural en una de sus visitas al proyecto, hace poco menos de un año.
James Turrel (Los ángeles, California, 1943) es uno de los artistas más respetados internacionalmente. Inmerso en la mayor obra de su carrera, el Roden Crater del desierto de Arizona, trabaja a la vez en varios proyectos arquitectónicos. Su obra ha pasado por museos tan importantes como el Whitney de Nueva York, el MoCA de Los ángeles, el MoMA de San Francisco y la Colección Panza di Biumo de Varese, Italia. El Guggenheim de Nueva York prepara una gran retrospectiva del artista para 2011, que coincidirá, previsiblemente, con la inauguración del Roden Crater.
El proyecto de Turrel en Montenmedio se une al resto de los trabajos acogidos por la Fundación, todos ellos realizados específicamente para la institución y siempre vinculados al paisaje, en los cuales la relación arte y naturaleza es el elemento principal. Así ocurre en la pared de Olafur Eliasson (Quasi Brick Wall, 2002), la construcción de hormigón de Sol LeWitt (Cinderblock, 2001) o los nidos humanos de Marina Abramovic (Human Nests, 2001). Una colección coherente de intervenciones in situ que ha tomado forma de la mano de su directora, Jimena Blázquez Abascal, y en la que también hay nombres españoles: Santiago Sierra, Fernando Sánchez Castillo, Susana Solano y Mp y MP Rosado, entre otros.