Carlos Alcaraz y el espejo de Federer: un camino casi de cero para superar los riesgos sobre hierba

Nadie en la historia del tenis ha ganado más en hierba que Federer. El suizo, que colgó la raqueta en 2022, finalizó su carrera con 192 victorias (86,9%) y 19 títulos que le colocan como el rey de todos los tiempos en esta superficie. Carlos Alcaraz (El Palmar, 2003), que creció con Roger como uno de sus ídolos, apenas acaba de empezar un camino que será largo de recorrer si quiere alcanzar unos números de tal dimensión.

Alcaraz jugó este martes por primera vez sobre la hierba del torneo londinense de Queen's. Su debut, contra un desconocido para el público general, el francés Arthur Rinderknech, le dio problemas y para vencer tuvo que emplearse 2 horas y 37 minutos en un encuentro que se alargó a tres sets. Así es el día a día en esta superficie, donde pocos mantienen la estabilidad.

Carlitos está en su búsqueda, ya que si su carrera solo acaba de empezar, esto se acentúa en hierba. La de Rinderknech fue su quinto triunfo en este tipo de pista como profesional. Buscará la sexta este jueves ante el checo Jiri Lehecka, contra el que nunca se ha medido antes. De nuevo, Alcaraz no se podrá confiar si no quiere un tropiezo inesperado en su persecución del número 1: si levanta el título en Queen's, llegará a Wimbledon en lo más alto del ranking.

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Alcaraz, que sus otras cuatro victorias anteriores sobre hierba las consiguió en las últimas dos ediciones de Wimbledon, tiene claro por dónde ha de ir para llegar a ser considerado uno de los mejores sobre esta superficie: "La hierba nunca es fácil. Durante el partido pensaba que iba a ir a mejor, que me sentiría mejor. Necesito esto, horas en pista, jugar todo lo que pueda. Para mí es bueno tener un partido así de duro. He jugado dos torneos en hierba en mi carrera, solo he jugado siete partidos. No he jugado mucho aquí. Tengo que jugar más, echar más horas en pista, coger más experiencia. Mis expectativas de ganar este torneo no son muy grandes", decía tras la victoria del martes.

La experiencia, a sus 20 años, es la que es porque, además, tampoco tiene pista de hierba sobre la que entrenar en Murcia y Villena. Lo lógico es cargar todo el trabajo en pista dura y tierra batida, ya que solo hay ocho torneos de hierba en el calendario ATP y todos se concentran entre junio y julio. 

Aprender de Federer

Alcaraz reconoce que, además de aprovechar cada minuto de juego y de entrenamiento, su otro foco de aprendizaje es visualizar a los que han sido los mejores sobre hierba: "Me gusta ponerme vídeos de Federer, de Murray, que son de los jugadores que mejor se mueven en hierba. No voy a hablar de Djokovic porque resbala como si fuera tierra y eso no va a ser mi caso. Ya no es cómo golpean, porque cada uno tiene su estilo, pero ver cómo se mueven, e intentar imitarlos", decía esta semana ante la prensa.

Con Roger siempre hubo una conexión especial. Cuando solo tenía 16 años, Alcaraz experimentó lo que era compartir pista de hierba con Federer. Fue solo un calentamiento en Wimbledon, en una edición en la que el suizo venció a Nadal en semifinales y después cayó contra Djokovic en la lucha por el título.

Federer y Alcaraz, tras un calentamiento juntos en Wimbledon 2019

Federer, antes de su despedida del tenis en la última Laver Cup, contó una anécdota referida a ese 'encuentro' con Alcaraz: "Fue un buen entreno. Recuerdo que Juan Carlos (Ferrero) estaba muy contento de verle entrenar bien, porque era su chico. Muchas veces después de entrenar con alguien vuelves a entrenar con él porque es fácil volver a llamar a esa persona y preguntarle si quieres hacerlo de nuevo. Así que les llamé dos días después Pero me equivoqué y dije que quería entrenar con Juan Carlos, no con Carlos. Llegué tarde, pero la práctica con Ferrero fue genial, no falló una bola", dijo.

El ganador de 20 Grand Slams también lamentó "no poder jugar nunca contra Alcaraz". A Carlos también le habría venido bien enfrentarse a Federer, especialmente en hierba, pero siempre podrá disfrutar de su extensa videoteca. Además, comparando carreras, se puede decir que ha tenido un inicio sobre esta superficie más fructífero que el suyo y que el de Nadal. Con Djokovic y Murray, además, comparte balance.

Alcaraz, mejor que Nadal y Federer en sus inicios en hierba David Vicente

Un mes de concentración

Alcaraz espera estar cerca de un mes afincado en Londres junto a su equipo. Allí la tradición, a la que se suman Carlos y los suyos, es alquilar una casa en el barrio de Wimbledon y el equipo del tenista murciano ha elegido la misma del año pasado. De momento, le acompañan Samuel López, Alberto Lledó y Sergio Hernández. Ellos actúan como entrenador, preparador físico y fisioterapeuta, respectivamente. También en esta primera expedición ha viajado el padre del tenista.

Faltan todavía algunas de las personas más cercanas a Alcaraz, como Juanjo Moreno (fisio) o Juanjo López (médico) y, especialmente, Juan Carlos Ferrero. El entrenador de Carlitos pasa unos días en familia antes de incorporarse al equipo de cara a una edición de Wimbledon en la que el murciano debutará el 4 de julio. Entre Queen's y el major británico, también disputará el torneo de exhibición de Hurlingham para sumar lo máximo posible en la hierba, ese terreno especial a la par que indescifrable.