Mario García Romo gana el bronce en el 1.500m: nueva medalla del atletismo español en el Europeo

España sigue con su Europeo de atletismo idílico. Mario García Romo da una nueva alegría al país con una medalla de bronce en el 1.500 metros de Múnich 2022 (3:34.88). El fondo nacional encuentra el relevo para seguir siendo una fuente de éxitos. El joven salmantino intentó seguir toda la carrera al incontestable Jacob Ingebritsen (3:32.76 récord de los campeonatos de Europa), que consigue un nuevo oro tras el 5.000 metros en el que superó a Mohamed Katir. El británico Jake Hayward se colgó la medalla de plata.

Con solo 23 años consigue su primera medalla como profesional después del meritorio cuarto puesto en el Mundial de Eugene 2022. El natural de Villar de Gallimazo, un diamante pulido en Ole Miss, le da la séptima presea al país después de los oros de Asier Martínez en el 110 metros vallas y Miguel Ángel López en los 35 kilómetros marcha, las platas del equipo femenino de maratón, Katir en el 5.000 metros y Raquel González también en los 35 kilómetros marcha y el bronce del equipo masculino de maratón.

El rey del fondo en Europa es Ingebritsen. El noruego cogió el ritmo de la prueba pasado el primer 400 y no abandonó la posición de privilegio en ningún momento. Tras ese primer ataque, García Romo cogió su estela demostrando que el objetivo era la medalla. Quizá el esfuerzo de seguir a Jacob cuando subió la intensidad le hizo perder fuerza en una recta final en la que se vio superado por Hayward. No está contento, porque su ambición es desmedida. Será candidato al oro en el futuro.

España sigue siendo una potencia en el 1.500 y consigue la décima medalla en un Europeo. El camino que iniciaron Cacho e Isaac Viciosa con un oro y una plata en Helsinki 1994 lo siguieron Estevez y el propio Fermin en Budapest 1998 con un oro y un bronce respectivamente. En Múnich 2002 Reyes repitió podio con una plata, en Gotemburgo 2006 llegó Juan Carlos Higuero con el bronce. En Barcelona 2010 volvió a haber un doblete con Arturo Casado y Manuel Olmedo, oro y bronce. En Ámsterdam 2016 fue David Bustos el que puso la bandera de España en el podio con su plata. Ahora llega García Romo con un nuevo bronce y prometiendo más para el futuro.

Lo mejor es que el país también puso otros dos atletas en esta final. Gonzalo García fue sexto después de ir de menos a más en la prueba con un buen tiempo (3:37-40), mientras que Ignacio Fontes fue undécimo después de sufrir a mitad de carrera el gran ritmo que marcó Ingebritsen (3:42.30). Los fondistas españoles están en forma y llegarán a París 2024 en un momento de madurez que invitan a pensar que pueden aspirar a una medalla olímpica.

De EEUU a Múnich

Mario García Romo está ante su primer año como profesional y se está colmando de títulos. Pasó de ser el pasado mes de marzo campeón universitario en los Estados Unidos con la universidad de Alabama a representar a España en competiciones internacionales. Cruzó el charco en el 2018 y a base de esfuerzo hizo grande su apodo del 'Cohete'. Pero el petardo aún no ha estallado, sigue subiendo en busca de alcanzar el sueño de los Juegos Olímpicos.

Pero el salmantino tiene más objetivos. Con sus estudios de bioquímica siendo una prioridad y su gran nivel en el atletismo, tiene un porvenir asegurado. España tiene un prodigio en el plano médico y sobre el tartán. Es un ejemplo para las generaciones futuras, pero todavía tiene muchos éxitos que dar al país con las excelentes piernas que demostró este jueves en Múnich. Este bronce es solo el inicio de una carrera en la que cada paso que da es firme.