Dice el refranero castellano que "si no puedes con tu enemigo, únete a él", esta parece la táctica que están llevando a cabo las grandes escuderías con el éxito aplastante de Red Bull en Fórmula 1 los últimos años. Primero fue seguir el concepto de diseño iniciado por la escudería austríaca en 2022 y después comenzaron los fichajes de ingenieros, mecánicos y hombres fuertes del equipo. El último ataque, la posible salida de Max Verstappen.
La última, y más sonada, salida del equipo de Milton Keynes ha sido Adrian Newey. El gran gurú de la Fórmula 1 deja el equipo con el que ha logrado dos eras de dominio tecnológico que han convertido a Red Bull en un equipo histórico en la Fórmula 1.
Newey no sólo es un gran golpe a Red Bull, sino la gota que puede colmar el vaso y provocar nuevas salidas de la escudería austríaca. "Sí, es un hecho y también se irá más gente. Eso es un secreto a voces, pero, en realidad, es porque Christian Horner cree que no necesita a toda esta gente a su alrededor, sino que tiene una mejor idea de cómo puede ser la Fórmula 1 o cómo puede ser su equipo, y además cuenta con todo el apoyo de los propietarios de Tailandia", aseguraba hace unos días Ralf Schumacher, el exploto de F1 y un habitual en el paddock cuyos comentarios siempre son polémicos y no dejan indiferentes a nadie.
Red Bull desaparecerá en la mediocridad en un corto espacio de tiempo y Max Verstappen dejará el equipo
"Por eso, como dije la semana pasada, mi opinión es que Red Bull desaparecerá en la mediocridad en un corto espacio de tiempo, y Max Verstappen dejará el equipo, junto con otros buenos ingenieros que tienen garantizado irse a otra parte con Adrian Newey", asegura Ralf.
Con palabras más medidas que Ralf Schumacher, Zak Brown (CEO de McLaren F1) también se sumó a la idea de que la de Newey no será la última salida: "Creo que lo que está pasando allí es un poco desestabilizador. Probablemente sea la primera ficha de dominó que caiga, pero creo que no será la última, a juzgar por los currículos que circulan por ahí".
[Lance Stroll, en riesgo en Aston Martin: Honda propone un compañero para Fernando Alonso]
Rumores de salidas
Ante el aluvión de rumores, Red Bull no ha tardado en salir al paso para intentar bloquear a sus jefes de aerodinámica, Enrico Balbo, y de ingeniería de rendimiento, Ben Waterhouse, confiando en que su continuidad no esté en duda y sigan en el equipo. Con quién no hay tanta certeza de que siga es con Paul Monaghan, el ingeniero jefe, que aún tiene su futuro abierto y está estudiando propuestas, según Autosport.
Otra pieza clave que aún no ha renovado su contrato es Jonathan Wheatley, director deportivo. Desde Red Bull hablan con tranquilidad sobre este caso y confían en que la salida de Newey o de otros miembros del equipo no empuje al británico a salir de Milton Keynes.
El papel de Wheatley dentro de Red Bull es una de los considerados estratégicos. Bajo su supervisión, el equipo opera dentro de las regulaciones deportivas de la FIA, monitorea las comunicaciones y controla al equipo de boxes de Red Bull (uno de los mayores éxitos al tener algunas de las paradas más rápidas en la historia de la F1).
Tras los rumores de las dudas sobre si renovarán o no todas estas piezas claves dentro de Red Bull siempre están los mismos nombres. Mercedes, Aston Martin, Ferrari e incluso McLaren suenan como las grandes alternativas para las grandes figuras de Milton Keynes.
De hecho, salidas como la de Dan Fallows, mano derecha de Newey en el equipo de diseño dentro de Red Bull, hace dos años ya tuvo a uno de estos equipos como protagonista: Aston Martin. La escudería de Silverstone ha crecido en los últimos años a golpe de talonario y no sólo por la gran inversión en su nueva fábrica sino por el fichaje de muchos ingenieros y mecánicos de otros equipos (siendo Red Bull uno en los que más ha 'pescado').
[Aston Martin retrasa las mejoras en su coche hasta Imola: Fernando Alonso avala la decisión]
La clave Verstappen
La salida de Lewis Hamilton ha sido un terremoto desde enero en el mercado de fichajes. Mercedes tiene un gran vacío en su alineación y la figura del piloto británico no sólo es difícil de rellenar dentro de la pista sino fuera de cara a la imagen de marca y acuerdos comerciales.
Desde un primer momento Totto Wolff aseguró que Mercedes no tomaría decisiones en caliente y que se tomarían un tiempo para analizar cuál es la mejor opción. Actualmente, la marca de la estrella tiene sobre la mesa tres escenarios: dar la oportunidad al joven piloto como Andrea Kimi Antonelli, fichar a Carlos Sainz y, el gran sueño de Wolff, lograr que Max Verstappen salga de Red Bull y ocupe su asiento vacío.
El primer escenario parece ya puesto en marcha. El joven piloto italiano suena como posible sustituto de Logan Sargeant, incluso desde el próximo Gran Premio de Emilia-Romaña que se disputará la próxima semana en Ímola. Antonelli ha llegado este año a la Fórmula 2 y un paso por otro equipo de F1 se ve como indispensable antes de darle la oportunidad de subirse al Mercedes en un Gran Premio. Su nivel es alto, pero la exigencia de la máxima categoría es una prueba muy fuerte.
[El futuro de Adrian Newey altera las opciones de Carlos Sainz: golpe de efecto en el mercado de F1]
El segundo escenario parece congelado en función del primero y el tercero. Es decir, Carlos parece ser el comodín de Mercedes si no logran traer a Max Verstappen y la duración de su contrato dependería de si ven posible fichar al neerlandés a corto plazo o de si Antonelli sorprende en su estreno en Williams. Las opciones de Sainz en Mercedes no parecen las idóneas puesto que da la sensación de que en el equipo le ven como una opción de garantías para 'calentar el asiento' a otro piloto.
El reto de Mercedes para sacar a Max Verstappen es lograr que el neerlandés rompa el contrato que lo une a Red Bull hasta 2028. Un acuerdo récord que se supone que rondaría los 50 millones de euros al año.
"Entiendo la presión que Toto Wolff y quizá otros equipos están ejerciendo después de años de estar detrás. Pero creo que Toto debería concentrarse en sus desafíos. Ya tiene suficientes... También tiene algo que ver con el respeto. Si sigo hablando del personal de otros equipos, eso no está bien", ha asegurado Oliver Mintzlaff, director ejecutivo de Red Bull.
Max todavía tiene un contrato a largo plazo aquí y no ha dicho una palabra sobre que no quiera cumplirlo. No se me ocurre un motivo por el que quiera marcharse. Max quiere el coche más rápido: lo tenemos", explica Mintzlaff.
[Mercedes hará una oferta récord a Verstappen: es el mayor contrato de la historia de la Fórmula 1]
Esta es precisamente la baza de Red Bull para retener a Max, por lo menos un año más. Pese a la salida de Newey del equipo, para 2025 no se esperan grandes cambios en la tendencia de los equipos, la escudería austríaca seguirá teniendo el mejor coche, o en el peor de los casos estará a la par del que logre dar un gran salto para igualarles. Parece difícil de imaginar que en unos pocos meses alguna escudería logre superarles.
La puerta para Verstappen sería entonces 2026. El gran año del cambio en la Fórmula 1, el año en que Red Bull dejará de trabajar con Honda y en el que los fichajes de ingenieros y mecánicos pueden empezar a dar sus frutos. Será entonces cuando Mercedes tenga más opciones de convencerle pero aún con el acuerdo con el neerlandés firmado, el reto será convencer a la firma austríaca para que deje salir a la que ha sido su gallina de los huevos de oro los últimos años. Toto Wolff prepara una oferta multimillonaria sin precedentes que veremos si da sus frutos.