No se habla de otra cosa en la televisión, los medios y las redes sociales. Una nueva amante de Íñigo Onieva ha roto su silencio. Presuntamente, el empresario le confesó a Tamara Falcó que esta infidelidad no sólo era cierta, sino que se iba a filtrar. Tal y como relata la amante, que ha hablado 7 días antes de la gran boda del año, Onieva y ella mantuvieron relaciones sexuales en los baños de la discoteca donde él trabajaba. También en la casa que compartía con la marquesa de Griñón en el exclusivo barrio de Justicia, en Madrid.
Mientras tanto, Falcó hace oídos sordos y desde Nueva York, donde está recogiendo sus vestidos de novia, ha publicado, con rotundidad, el siguiente mensaje: "Ya no nos queda más que una semana y un día para estar unidos para siempre a ojos de Dios mi Íñigo. No ha sido fácil llegar hasta aquí, pero lo hemos logrado y somos muy felices. Como me decías anoche, vamos a seguir bailando toda la vida y estoy deseando que esa vida empiece ya.
Te quiero".