El año 2016 tiene nombre de mujer: Mireia Belmonte
Comenzó a nadar para corregir una escoliosis. Hoy se ha convertido en la 'reina Midas' de la natación española. EL ESPAÑOL muestra a la Mireia Belmonte más desconocida.
26 diciembre, 2016 00:31Noticias relacionadas
Discreta, tímida y perseverante. Los tres adjetivos bien podrían resumir a la deportista del año. La nadadora Mireia Belmonte (26 años) ha tocado el cielo este 2016 y lo ha logrado sin hacer apenas ruido, de la misma forma en la que el pasado verano conseguía el triunfo en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La medalla de oro en los 200 mariposa era su sueño, pero lo que ella no sabe es que durante este 2016 ella ha hecho soñar a muchos españoles.
La catalana de padres andaluces disfruta ahora de estas fiestas en familia, con la mirada puesta ya en el Mundial de 2017. No le bastan las 41 medallas que suma ya en su palmarés. Ella, como hace unos meses aseguraba Irene Villa (37) a este medio, siempre es "la primera que se levanta por la mañana para entrenar, no sale del agua. Es la persona más disciplinada que he visto. El esfuerzo y la constancia dan siempre sus frutos".
Entrena 8 horas diarias entre semana y tres los fines de semana, aunque en estas fechas la nadadora se ha tomado un pequeño descanso para disfrutar de los suyos.
Sus padres, José y Paqui, son los mayores pilares de la deportista. Gracias a ellos mantiene los pies en el suelo y, gracias a ellos, convirtió lo que comenzó como una terapia para corregir su escoliosis en su proyecto de vida. Alérgica al cloro y asmática, Belmonte es baluarte de la superación personal y la competición sana desde que comenzara a entrenar con sólo 4 años, actividad que compatibilizaba con el tenis. Su hermano, de hecho, también era muy deportista. En su caso se había decantado por la raqueta y por el tiro olímpico.
Para la catalana la cuarta pata de su pilar familiar la constituye London, un perro de raza Westin al que la deportista adora, tal y como muestra en sus redes sociales siempre que tiene ocasión.
La 'reina Midas' española
Todo lo que toca Mireia Belmonte se convierte en oro, el mismo que baña su ansiada medalla. Es imagen de Nike, Renault, San Miguel, plátano de Canarias, Braun, Lidl y algunas marcas más. En total, ingresa anualmente cerca de 250.000 euros sólo en premios y becas concedidas.
De hecho, Belmonte es una de las pocas privilegiadas que cuentan ya con una réplica suya en el Museo de Cera de Madrid. Lo inauguró este mismo otoño, a su vuelta de Río de Janeiro, retrasando la de otras personalidades relevantes como la nueva figura de la reina Letizia (44), según ha podido saber este medio.
Sus cuidados personales
A Mireia le encanta la moda y le gusta cuidarse. Para ella, la imagen es importante y eso lo demuestra con cada pequeño detalle, también cuando compite. La manicura llamativa es una de sus señas de identidad.
Para la nadadora también es vital la alimentación, por eso cuida su dieta (basada en hidratos de carbono y fruta) y en la actualidad se está introduciendo poco a poco en las propiedades de la nutrición molecular: minerales, vitaminas y otros suplementos que contribuyen a compensar los déficits alimenticios.
Una pareja deportista
La relación que mantiene, desde hace un par de años, con el piragüista y modelo asturiano Javier Hernanz (33) va viento en popa, pese a que hace unos meses saltaron los rumores sobre una posible crisis entre ambos, sobre todo a raíz de un reportaje publicitario que protagonizó el deportista junto a Alba Carrillo (30).
Con la televisiva modelo posteriormente intercambió algunos mensajes, aunque finalmente las filtraciones a los medios de comunicación fueron fuente de conflictos y ambos se apresuraron a zanjar las especulaciones.