Lencería eróticamente absurda
Siempre se ha dicho que menos es más. No sabemos si en lencería erótica también se aplica este dicho.
12 febrero, 2016 20:47Noticias relacionadas
Siempre se ha dicho que menos es más. No sabemos si en lencería erótica también se aplica este dicho. Menos, literalmente hablando, tiene, pues escasean en tela. Pero… ¿hasta qué punto este tipo de prendas son sexys? Cada cual con sus fantasías y comodidades, nosotros no juzgamos, sólo hemos realizado una lista de cinco prendas de ropa interior erótica de mujer.
Braguitas con apertura
Mostrarse al natural siempre es un plus, pero quizá haya maneras más sutiles de hacerlo. Este tipo de braguitas, con una gran abertura central que deja los genitales y el trasero totalmente al descubierto, pueden ser demasiado arriesgadas... o no. Como este culotte de Petite Fleur, confeccionado en encaje y abertura en la entrepierna.
Precio: 18’99 €
Sujetador sin copa
La gran pregunta es… ¿por qué un sujetador que no sujeta? Este tipo de prendas no suelen tener copas, aunque sí han sido fabricadas con esmero y sinuosos bordados para… una función completamente distinta a la original. Puedes hacerte con uno de ellos aquí por 21’95 €.
Bodys completos
Bueno, tan completos no son, porque llevan el concepto de abertura a su punto más extremo. Es decir, tapa los pechos y las piernas, aunque cuenta con una infinita abertura que deja al descubierto las zonas erógenas como el vientre, el sexo y el trasero. Como este body con el que puedes hacerte en Lenceria en casa.
Precio: 25’87 €
Camisones con copas abiertas
Se trata de un camisón bien sexy, con sus encajes de seda, sus detalles en hilo dorado, su brillo hortero… ¿La diferencia? Esta prenda deja al descubierto los pezones. En Lencería Secret los tienes por 13’99 €.
Tops que sólo cubren la barriga
¿Y no es más fácil bajarse directamente la camiseta? Existe, sin embargo, personas a las que les gusta este tipo de prendas, tops con aros de refuerzo y tirantes elásticos al cuello que muestran los senos. Si no sabes muy de qué te estamos hablando, ojéalo tú misma.