Los músculos del nuevo Tarzán
Alexander, sex symbol sueco protagonizó un videoclip de Lady Gaga, su padre es un actor famoso, no le importa vestirse de mujer y se sometió a una dieta "miserable" para lograr su envidiable cuerpo.
1 junio, 2016 02:17Alexander Skarsgård (39) tuvo la suerte de hacerse con el codiciado papel de Tarzán después de que el director David Yates tanteara a Tom Hardy, Henry Cavill o incluso al nadador Michael Phelps, que estuvo a punto de hacerse con él en 2012. Al final ganó el de Estocolmo que encarnará al musculado protagonista en La Leyenda de Tarzán cuyo estreno en los Estados Unidos se prepara para el 1 de julio y que 22 días después recalará en nuestro país.
El actor no está solo, y después de multitud de rumores, una imagen ha confirmado su noviazgo con la it-girl Alexa Chung. La socialité tuvo una larga relación con Alex Turner, vocalista de Arctic Monkeys mientras Kate Bosworth se encuentra entre las conquistas del nuevo Tarzán.
A Alexander le sobrevino la fama por su papel de vampiro malvado en la serie True Blood.
Skarsgård tuvo un pequeño papel en la película Zoolander de 2001 en la que interpretaba a Meekus, un modelo superficial, poco brillante y torpe. Apareció en el videoclip de Paparazzi, ya que el director era su amigo, donde se fundía en un largo beso con Lady Gaga y Kirsten Dunst fue su compañera de reparto en Melancolía.
Chris Hemsworth puede que tiemble al conocer que su digno sucesor también proviene de una saga de actores. El padre de Alexander, Stellan Skarsgård, es famoso por aparecer en películas como El indomable Will Hunting, Mamma mia!, Piratas del Caribe, Thor y varias del director Lars von Trier. Gustaf y Bill, dos de sus cuatro hermanos, son promesas del cine que actuaron en Anna Karenina o en la serie Vikingos.
Los 194 centímetros de Alexander sufrieron para lograr la nueva esculpida figura de Tarzán. El actor calificó como "una miseria" la dieta a la que tuvo que someterse: "La alimentación que realicé fue muy miserable. Fue realmente terrible. Me pusieron una dieta muy estricta y un plan de ejercicios durante ocho meses para que me pusiera en forma. Comí un montón de pechugas de pollo, fue muy difícil. Y unos meses después de acabar de rodar me llamaron para grabar unas escenas más y casi me da algo, porque no quería tener que volver a hacer dieta", explicó sobre su estricto plan.
Dado el éxito se espera que se grabe una secuela de la película. El intérprete ya ha bromeado con que el próximo Tarzán debe engordar: "Con un poco de suerte habrá ganado peso porque ha comido un montón de tarta y bebido muchas pintas de cerveza. Estoy dispuesto a escribir el guión yo mismo", bromeó.
El actor siempre ha hecho gala de un humor desinhibido como ejemplifica la creación de su propio alter ego femenino, Lady Libido Lushbody. Ha confesado que le encanta vestirse de drag queen como hizo para la premier de El diario de una adolescente.
Tampoco puso inconveniente en posar en calzoncillos para los premios de la MTV Movie de este año.
Advierte que el momento más sufrido lo vivió rodando una escena de sexo salvaje junto a la atractiva Margot Robbie, que da vida a Jane en la ficción, y que saltó a la fama como la mujer de Leonardo DiCaprio en el El lobo de Wall Street.
"Aunque tuve que pelearme con simios, la única herida que sufrí fue mientras rodaba una escena de sexo con Margot. Me dio un puñetazo. Nuestro director, David Yates, quería que fuese una escena muy bestia, muy animal, así que estaba detrás de la cámara gritando cosas como: '¡Dale más fuerte! Vamos, ¡pégale!'. Básicamente nos animó demasiado, quería que transmitiera una sensación muy primitiva, así que ella me pegó", recordó Alexander.