La cena con los compañeros del gimnasio, los pinchos con los compañeros de curro, con los del curso al que te has vuelto a apuntar este año, la cena con tu pandilla, con la de tu pareja, quedar para ir de pinchos con todos los amigos que están fuera y vuelven a casa por Navidad, todo eso sin contar las comidas y cenas con la familia en las fechas señaladas… Diciembre es un mes en el que cuesta escapar de los compromisos gastronómicos, por eso he decidido empezar el mes con 31 recetas ricas y ligeras para compensar los excesos que irremediablemente se cometen en tales saraos.

Recetas ricas, ligeras, rápidas y sencillas que sirven tanto para comer como para cenar bien pero sin darse un atracón que nos deje K.O. mientras hacemos la digestión.

31 recetas ricas y ligeras para compensar las comilonas de diciembre

Fácil, ligera y equilibrada. Así es esta receta de tallarines de calabacín con ternera y verduras. Perfecta para un almuerzo rápido o para una cena sin muchas complicaciones.

Un filete de pescado marinado al curry, en este caso bonito, calabacín a la plancha y tomate aliñado. Un menú listo en pocos minutos y perfecto para comer cualquier día en el que el plan para cenar sea mucho menos digestivo.

Y otra idea en la misma línea, pero cambiando el sabor potente del curry por la delicadeza de la albahaca en esta receta de trucha marinada con salsa de albahaca.

Unas lentejas con muchas verduritas que pueden llevar chorizo o no y que se pueden hacer una tarde de domingo para comer durante la semana o para congelar. Mucho más ricas si se hacen de un día para otro siguiendo la receta que os dejamos aquí.

¿Y qué me decís de esta pechuga de pollo con salsa de mandarina y verduritas? Es rápida, fácil, ligera y deliciosa. Ideal para una cena después de una comida en la que nos hemos pasado un poco de la raya.

Otra receta sin muchas complicaciones y que será bastante ligera siempre y cuando no decidamos usar un relleno a base de bacon, chorizo o una tonelada de queso son estas patatas rellenas o jacket potatoes, fáciles y buenísimas.

Y otra de las recetas ricas y fáciles que sabemos que os encanta es el pollo al limón al estilo de los restaurantes chinos, pero que  hecho en casa siempre sienta mucho mejor.

Y siguiendo con los sabores de Oriente que tanto nos gustan por Cocinillas, os propongo también este Salteado Oriental de verduras, muy fácil y rápido de preparar.

Y otra variante más, el pollo con piña, fácil, rápido y delicioso.

O este ramen con pollo y verduras que se puede hacer más o menos caldoso en función de si nos apetece sopa de cuchara o comer con tenedor. Solo es cuestión de añadir más o menos agua.

A cualquier caldo limpio podemos darle consistencia preparando lo que se conoce como velouté, que en realidad es una salsa pero puede tomarse como sopa y está buenísima. En este caso, hecha con caldo de pescado.

Mi madre nos la hacía para cenar cuando éramos pequeñas y, a día de hoy, sigue siendo una de mis sopas favoritas esas noches de invierno en las que el cuerpo me pide algo calentito y rápido de preparar. Y es que esta sopa de huevo rápida está lista en poco más de 2 minutos.

Y otra sopa rapidísima, sanísima y ligerísima a la que me he aficionado mucho en los últimos años es la sopa de miso, ni puede ser más fácil ni resultar más sabrosa.

Y si el tiempo no es un problema, esta sopa de verduras está casi más rica de un día para otro y se puede hacer para un par de días si prevemos que vamos a tener varios eventos gastronómicos seguidos.

O esta versión ligera de un clásico como es la sopa de cebolla, fácil y reconfortante.

Y una receta de lo más versátil, porque esta sopa de pescado en microondas, tanto nos sirve para una comida rápida y ligera en medio de todo el jaleo de diciembre como para servirla como entrante en uno de esos eventos. Es facilísima de hacer, apta para torpes y novatos.

Y otra sopa de verduras rapidísima, en este caso con tofu y huevo, apta para vegetarianos.

Preparar algo ligero no es sinónimo de comer cosas aburridas y como muestra esta coliflor con salsa de azafrán que hasta sirve como entrante en una comida más formal.

Y si la coliflor es bien grande o sois pocos en casa, os dará también para preparar este cuscús de coliflor y ¡ojo! que aunque es muy fácil es una receta del mismísimo Ferrán Adriá.

Otra receta sencilla donde las haya, pero rica a más no poder es esta carne ó caldeiro, tan simple como cocer una buena carne de ternera, unas buenas patatas y darles un toque de aceite y pimentón. No hace falta complicarse más.

Ligeros, riquísimos y casi más buenos si se hacen de un día para otro son estos pimientos rellenos de tofu y verduras, aunque si no sois fans del tofu y preferís cambiarlo por pechuga de pollo cocida o atún también están ricos.

Otra de mis recetas favoritas, ligeras pero con un montón de sabor, es este curry de pollo y zanahorias.

Y otra receta ligerita y muy de temporada que como todas las de legumbres está más rica de un día para otro son estas lentejas con calabaza y leche de coco. Deliciosas.

¿Y por qué no matar el antojo de tortilla con una rápida y sin grasas en la que no hay que freír las patatas o que directamente se puede hacer sin patatas?

Otra tortilla, esta de puerro confitado y espinacas, sencillamente deliciosa. Podéis ver la receta pinchando aquí.

Y si aparte de no tener mucha hambre lo que no tienes son muchas ganas de cocinar, esta tortilla francesa en un minuto será tu salvación.

Y la receta de coliflor que gusta hasta a los que no les gusta la coliflor es sin duda esta de coliflor con queso y pimientos.

Para un entrante de fiesta o para una cena ligerísima, con este tartar de tomate y jamón serrano tenéis el éxito asegurado.

Si os animáis con algo un poco más elaborado pero que también se prepara en un pispás, tomad nota de este pollo con mostaza y vino blanco. Rico no, lo siguiente.

Y si hablamos de comer algo rápido, ligero y sin complicaciones no puede faltar un riquísimo sándwich, ¿verdad? En esta ocasión, la versión casera del Sandwich Fundy O’Clock del Vips.

Y para poner punto final a esta lista, una completísima ensalada nizarda o ensalada Nicosia, que nos sirve tanto para comer como para cenar ya que al llevar atún y huevo contiene una ración de proteínas suficiente para una comida.