La lucha de los jóvenes ‘si-si’ para sobrevivir en Castilla y León: sobrecualificados pero en precariedad
“El tejido empresarial no está preparado para absorber el talento joven de Castilla y León”, asegura la presidenta del Consejo de Juventud, Sandra Ámez
18 noviembre, 2023 07:00Noticias relacionadas
Los jóvenes ya no son ‘ni-ni’, ni trabajo ni estudio, son ‘si-si’, es decir, trabajo y estudio. La situación económica del país ha provocado que las nuevas generaciones hayan cambiado su perfil. Ya no esperan a terminar los estudios para trabajar, ahora lo compaginan, un concepto que décadas atrás era anecdótico, con trabajos de camarero o de verano, pero que en los últimos años se ha confirmado en Castilla y León al alza.
Así, ahora hay que hablar de ‘si-sis’, jóvenes que trabajan y que estudian al mismo tiempo. Pues bien, en la Comunidad son un 35,7%, es decir, uno de cada tres de los jóvenes (de 16 a 29 años) que se registran en Castilla y León. Un dato que va en aumento, ya que en los últimos meses ha crecido un 1,6%, según los datos ofrecidos por el Consejo de Juventud de CyL extraídos de los datos del Observatorio de Emancipación.
Pero esta generación de ‘sisi’ llega con más atribuciones, por ejemplo, la de subocupada y sobrecualificada. Y es que actualmente el tener más estudios no sirve de nada. Al no encontrar trabajo, los jóvenes de Castilla y León siguen estudiando, lo que provoca que haya un exceso de cualificación que luego no se ve reflejada a la hora de encontrar un puesto de empleo acorde a las características. Así, el 48,6% de los jóvenes de Castilla y León ocupan un puesto de trabajo que requería menos formación de la que habían alcanzado. Además, este efecto también se observa en la subocupación. Ha aumentado un 7,4%, y así, el 17,2% de las personas jóvenes trabajadoras de la Comunidad realizaban menos horas que otras personas en puestos similares a pesar de estar dispuestos a ampliar su jornada de trabajo de manera inmediata.
Pese a ello, la principal conclusión que se extrae de este informe para la presidenta del Consejo de la Juventud en Castilla y León, Sandra Ámez, es que todavía prevalece la “precariedad y la pobreza”. La razón es la subida de la inflación, el aumento del precio de la vivienda o la subida de los costes de la cesta de la compra y suministros.
Esto demuestra el alto grado de preparación de los jóvenes de la Comunidad, ya que dos de cada tres jóvenes de la Comunidad habían alcanzado estudios posobligatorios secundarios o superiores. Solo 4,2% sólo tenía estudios primarios y un 27,9% sólo tenía los estudios secundarios obligatorios. Para Ámez, “el tejido empresarial no está preparado para absorber el talento joven de Castilla y León” y por este motivo produce un incremento de la población joven "sobrecualificada y un aumento de la subocupación”.
Para la presidenta del Consejo, gracias a la aplicación de la reforma laboral que lleva casi un año en marcha, se había incrementado en un 33% la contratación indefinida de personas jóvenes en Castilla y León, lo que supuso que el 58,5% de la juventud trabajadora estuviera en 2022 con esta modalidad de contrato. Como dato, para poder alquilar una vivienda en solitario una persona joven debería destinar al alquiler el 55,5% de su salario neto, según el Observatorio
Los que se fueron
Con todo esto, y para rematar, 1.711 jóvenes abandonaron Castilla y León durante el 2022 para irse a otra autonomía, el lado positivo es que ha sido un 64 % menos que en 2021. Se marchan cuando terminan los estudios universitarios. Aunque se registró una bajada del paro juvenil del 13,3 por ciento motivada, en gran parte, por una bajada de similar intensidad entre aquellas personas jóvenes en paro que ya contaban con experiencia laboral, el colectivo de jóvenes en paro con experiencia laboral suponía el 70 por ciento de la población joven en paro, mientras que un 30% de las personas jóvenes en paro en Castilla y León se encuentran buscando su primer empleo.