La feria gastronómica con aroma vallisoletano que pone en el mapa a los pequeños productores y genera turismo en los pueblos

Valladolid puede presumir de la belleza de sus calles, la cultura que hay en cada rincón o de haber formado parte de grandes acontecimientos de la historia. Pero, sin duda, si hay algo de lo que puede estar muy orgullosa es del sabor de los productos de la provincia.

Lo cierto es que, en muchas ocasiones, tiendes a buscar la excelencia fuera de tu territorio obviando el valor que hay en él. Por ello, la Feria de Alimentos de la Diputación de Valladolid es la excusa perfecta para pasear entre los stands que la conforman e ir degustando algunos de los alimentos más típicos. Una iniciativa que tiene lugar en el espacio La Granja (barrio de Villa del Prado) desde el 15 hasta el 17 de marzo y donde participan 40 empresas.

“Aquí se pueden encontrar los productos que el visitante tiene dificultades para localizar en el punto de venta más cercano a su casa o en los supermercados”, asegura Kiko Fuentes, responsable de la marca de promoción de Alimentos de Valladolid, en declaraciones a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León.

Unos clientes degustando los quesos

Lo cierto es que cada vez son más los que se animan a acudir a la misma, llegando a recibir en cada una de sus ediciones -y esta ya es la cuarta- una suma de 8.000 visitantes. Aunque cabe destacar que hay clientes fijos: “Muchos vienen directamente a los proveedores, a los productos que quiere porque ya los conoce o los ha buscado. Carga y se marcha”. Por su puesto, también los hay nuevos que se “sorprenden”.

Pero ¿de dónde viene esa sorpresa? ¿saben los vallisoletanos los productos que se crean en sus pueblos? Fuentes asegura que en muchas ocasiones “no”. Y pone como ejemplo las “conservas de sardinas” o “fresas y arándanos”, así como las frutas deshidratadas que también se venden en esta feria. Unos alimentos que “consiguen sorprender” porque muchas personas “no se esperan que pueda haberlo en Valladolid”.  

Lo cierto es que va más allá de los alimentos, su sabor y darlos a conocer. Este espacio también permite dinamizar la economía de los pequeños municipios y fomentar el turismo en algunas zonas. “Estas ferias sitúan en el mapa a muchos pequeños productores que por sí solos no tendrían tanta visibilidad. Provoca que mucha gente se acerque después al municipio en su búsqueda. Además, es importante que la gente sepa que, en muchas ocasiones, las empresas tienen visitas programadas por sus instalaciones, lo que genera una experiencia diferente”, subraya.

Los productos de El Pescador de Villagarcía

Fuentes añade que hay empresas que pueden llegar a ir tres veces al año a estos eventos, lo que aporta una “ayuda económica directa” porque “llegar a 8.000 personas en dos días no es nada fácil en otras circunstancias”.

Los tiempos van cambiando y, con ello, las preferencias de los consumidores. Los productos tradicionales como el queso y vino siguen teniendo una grandísima importancia en este tipo de eventos. Pero cada vez más se empiezan a ver las nuevas pinceladas de las demandas de los clientes.

En la actualidad existe una gran demanda de los productos ecológicos y de aquellos que tienen beneficios para la salud: “Es algo que ya vemos y se nota muchísimo. Solo hay que fijarse en que, por ejemplo, las bodegas tienen vinos ecológicos ya. Y han aparecido otro tipo de bebidas como la kombucha”.

Un expositor de la feria lleno de carne y croquetas de colores

Nuevas ferias y expositores

Fuentes asegura que no hacen planificación “a largo plazo” porque el sector es “muy cambiante”. Hace relativamente poco han celebrado el I Salón de la Miel que les ha “sorprendido” por la gran acogida que ha tenido. Y, por ello, han apostado por modificar las fechas de esta feria de alimentos a este primer trimestre del año.

Lo cierto es que, según ha avanzado, están trabajando en la posibilidad de crear un salón monográfico de productos ecológicos y encajarlo antes de verano. Asimismo, también queda de disfrutar de la feria Dulcería, del 17 al 19 de mayo, y en octubre de la de Vallaqueso; para acabar rematando con el tradicional mercado navideño.

Por otro lado, se han planteado ampliar el espacio exterior. Generalmente hay 40 expositores que es el máximo que pueden acoger. Y, ahora, están trabajando para convertir la parcela exterior en una “extensión de las ferias” dado que cada vez hay “más demanda y más empresas en lista de espera”.

Actualmente, en el conjunto de expositores el que más representado está es el del vino porque en la marca Alimentos de Valladolid tiene una representación del 40%; igual que ocurre con los dulces. Sin embargo, todos tienen un espacio en esta feria llena del sabor de la provincia.

En otras ocasiones, ha habido talleres para los más pequeños o DJs, sin embargo, en esta ocasión han querido hacer un evento “más profesional” centrado en el productor.

La parcela del espacio La Granja con una furgoneta de productos

Horario y catas

Una feria que ya ha abierto sus puertas el viernes a las 17:00 horas hasta las 20:30 horas. Y este sábado estará disponible desde las 11:00 horas hasta las 14:30 y desde las 17:00 hasta las 20:30 horas. Por último, el domingo, que será el día de clausura, se podrá disfrutar de este evento desde las 11:00 hasta las 15:00 horas.

Del mismo modo, para que todos los asistentes se vayan con un buen sabor de boca, han programado varias catas y maridajes. El viernes tuvo lugar a las 18:00 horas una para degustar el aceite Emán Vara Gourmet, y a las 19:00 horas otra de vino y dulce de la Tía Melitona.

Este sábado, 16 de marzo, a las 13:00 horas, se realizará una cata-maridaje a cargo de la bodega Lar de Maia y Cárnicas Gutiérrez mientras que, por la tarde a las 19:00 horas, tendrá lugar una cata de vino y torrijas de la mano de Bodegas Mucy y Todocatering.

Finalmente, el domingo a las 13:00 horas tendrá lugar una cata-maridaje de vino y queso por parte de la bodega Rodríguez y Sanzo y la quesería La Cruz del Pobre. Una feria que, además, tiene entrada gratuita, por tanto, los asistentes podrán acudir a la hora que deseen sin tener que pagar nada.

Una mujer saboreando un vino de la provincia

Expositores

Los expositores que se podrán encontrar en esta IV Feria de Alimentos de Valladolid son muy variados. En cuanto a bodegas, hay: Bodega Liberso, Bodega Muelas, Bodega Palacio de Villachica, Bodega Pago de los Estares, Bodega Lagar del Duque, Bodega Lar de Maía, Bodega Rodríguez y Sanzo, Bodega Convento de las Claras, Bodega Mucy, Bodega Laderas de Valverde, Bodega Honorato Calleja.

Por otro lado, de quesos se puede encontrar: Granja Cantagrullas, Zucca, Montequesos, La Cruz del Pobre y Cañarejal. Además, estará presente también Pistacyl y Piñones de Castilla; así como los almendros Wamba Nuts y pistacho San Antonio. El dulce no faltará en esta especial cita donde no falla la repostería de La Tía Melitona, La Biótica, repostería Xokoreto, Clauval, La Casita y Mantecados Estilita. En cuanto a la miel, estará presente La Miel del Amable y Oro del Duero.

Un expositor con miel

Tampoco faltará Ideal Fruits ni Natursnacks. Por otra parte, se podrán encontrar los productos de Eman Vara Gourmet y El Pescador de Villagarcía. Así como, en cuanto a bebidas, estarán presentes las cervezas de El Secreto del Abad y Kampanera, con sus bebidas ecológicas. 

En relación a la carne estará presente la carnicería Díez Herrero, Cárnicas Gutiérrez y carnicería Cristina. A mayores de todo ello, no faltará la presencia de Todo Catering y del delicioso Museo del Pan.