El Gobierno, a contrarreloj para salvar Muface: diseña una oferta que contente a las aseguradoras y a 1,5M de funcionarios
- El Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, del que depende la mutualidad, iniciará los trabajos para sacar una nueva licitación.
- Más información: SegurCaixa Adeslas, Asisa y DKV se retiran de Muface: 1,5 millones de funcionarios deberán ir a la Sanidad pública
Tras el portazo de las aseguradoras a la propuesta del Gobierno para el próximo concierto de Muface, el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública ya trabaja en una nueva oferta. Lo hace a contrarreloj, dado que el próximo 31 de diciembre decae el actual convenio de la mutualidad.
Aunque no hay plazos para conocer la nueva licitación, fuentes del ministerio que comanda Óscar López han señalado a EL ESPAÑOL-Invertia que la elaborarán "con agilidad". El objetivo del Gobierno es que no decaiga este modelo, que atiende a 1,5 millones de funcionarios.
Pero, para ello, deberá presentar una oferta que se ajuste a las reclamaciones de las aseguradoras. La última propuesta de financiación ha sido calificada por las compañías como "insuficiente". Por ello, han rechazado presentarse al concierto que debía entrar en vigor en enero de 2025 y que iba a tener una duración de dos años.
En concreto, el Ejecutivo aprobó el pasado mes de octubre un nuevo concierto que preveía un incremento del 17,12% de las primas. La cuantía total de la contratación ascendía a 1.337.059.970 euros en 2025 y 1.344.553.098 euros en 2026. Esto suponía 303,9 millones euros más respecto al último año de vigencia del convenio anterior.
El incremento de la financiación ofrecido (y rechazado por las compañías) se distribuye en un 16,5% en 2025 y un 0,62% en 2026. Con esta subida, la prima media por mutualista al año pasaba de 1.032,12 euros a 1.208,81 en 2026.
Una cifra que se quedaba muy lejos de las reclamaciones del sector asegurador. Las compañías que prestan atención sanitaria bajo el paraguas de Muface (SegurCaixa Adeslas, Asisa y DKV) habían pedido un aumento del 40%. Por su parte, la mutualidad propuso un 24%.
Con el concierto vigente, las tres aseguradoras acumulan pérdidas por valor de 470 millones de euros, según los cálculos de DKV. Unos números rojos que se darían también en el próximo concierto con la actual propuesta de financiación, tal y como ha avisado la compañía de la que Fernando Campos es CEO.
Mientras llega la nueva licitación, Muface ha asegurado que todos los mutualistas, tanto los titulares como los beneficiarios, "van a continuar recibiendo la misma asistencia sanitaria que disfrutan con las condiciones actuales".
Desde el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública han explicado a este periódico que la ley de contratación permite prorrogar el servicio cuando está pendiente que se apruebe otra licitación. Por ello, la continuidad de la cobertura está garantizada hasta la renovación del concierto.
¿Qué pasa si desaparece Muface?
La decisión de SegurCaixa Adeslas, Asisa y DKV de retirarse de Muface deja este modelo de asistencia sanitaria en el aire. Aunque todavía hay una segunda oportunidad de salvar la mutualidad, ¿qué pasaría si desapareciera?
La sanidad pública tendría que asumir la atención sanitaria de 1,5 millones de funcionarios, lo que implicaría un impacto económico de más de 1.000 millones de euros y el inevitable incremento de las listas de espera.
El informe El mutualismo administrativo: Modelo predictivo sobre la elección de los mutualistas y escenarios futuros, realizado en el marco de la Cátedra de Salud Sostenible y Responsable de la Universidad Complutense de Madrid, cifra en un aumento del 266% de las listas de consultas externas y del 115% para una intervención quirúrgica. A nivel de infraestructuras, el sistema público necesitaría de casi 4.000 camas adicionales.
También el Ministerio de Sanidad está haciendo un análisis del impacto que el paso de esos funcionarios tendría en la sanidad pública si Muface finalmente decae. "Si el proceso de negociación no diera sus frutos, la sanidad pública trabajará para dar la mejor continuidad a la asistencia sanitaria", han señalado desde el departamento que dirige Mónica García.
El impacto en la sanidad privada
El fin de Muface no sólo afectaría a la sanidad pública. También supondría pérdidas para las aseguradoras. De acuerdo con los cálculos que recoge el informe mencionado, las compañías de seguros perderían un 14% de su facturación, lo que se traduce en 1.700 millones de euros.
Mientras, los prestadores de servicios hospitalarios verían reducidos sus ingresos un 8%, es decir, alrededor de 1.000 millones de euros. Esto pondría en riesgo la continuidad de centros, principalmente en regiones como Castilla-La Mancha, Extremadura y Castilla y León.