El sencillo truco para lavar sábanas y edredones en la lavadora sin que se arruguen
Lavar sábanas y edredones en la lavadora sin que se arruguen es posible siguiendo algunos consejos prácticos que garantizan que estas piezas salgan casi listas para usar, eliminando el planchado posterior.
20 febrero, 2024 11:28Uno de los grandes quebraderos relacionados con el textil del hogar tiene que ver con la forma de lavar sábanas y edredones, sobre todo cuando se quiere realizar esta labor sin que se arruguen. Esta ropa para el hogar es delicada y hay que tener en cuenta que en muchas de las ocasiones en las que se lavan y salen con su relleno arrugado.
Afortunadamente, existe una forma de lavar las sábanas y edredones evitando que se arruguen. Para ello es importante saber que es necesario usar un programa adecuado en la lavadora, ya que cada tipo de ropa tiene sus propias características.
Para empezar, se deben clasificar los edredones y nórdicos según sus colores y tejidos, para evitar así que pueda llegar a darse una transferencia de color y daños, pero además conviene leer la etiqueta de cada textil y seguir las instrucciones de lavado indicadas por el fabricante.
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Partiendo de esa base, en el caso de que se vayan a lavar edredones, nórdicos, mantitas o sábanas, la lavadora puede tener un programa perfecto para ello. Por lo general, se debe hacer uso de aquellas que estén pensados para prendas delicadas o fibras sintéticas. Lo más recomendable es fijar una temperatura de 40 °C si se va a lavar un nórdico o un edredón sintético o de 30 °C en el caso de los de plumón. Además, el centrifugado debe situarse en 800 revoluciones.
En el caso de los edredones, es necesario vigilar que no estén descosidos a la hora de lavarlos, y en caso de que lo estén, cóselos para evitar que el relleno se pueda llegar a salir durante el lavado. Asimismo, es importante utilizar un detergente neutro para que no se dañe el relleno del pulmón y usar la cantidad recomendada de detergente, evitando así los residuos que puedan ocasionar que se formen arrugas.
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Un pequeño truco consiste en agregar un poco de vinagre al detergente para facilitar el lavado, y también es importante evitar el suavizante porque podría llegar a provocar daños en el tejido. Otra recomendación muy interesante es la de, en edredones de plumas, introducir un par de pelotas de tenis en calcetines dentro del tambor, de forma que evite que se apelmace el relleno. Además, este truco hará que el aire fluya más fácilmente entre la ropa y esta saldrá menos mojada de la lavadora.
Por su parte, a la hora de secar los edredones y los nórdicos, la mejor opción es hacerlo al aire libre, tratando de evitar el calor excesivo y, siempre que sea posible, situarlos en una posición horizontal. Dado el caso en el que se use una secadora, habrá que optar por elegir un ajuste de calor medio o bajo. Asimismo, antes de proceder a doblar o colgar los edredones y nórdicos, dale pequeñas sacudidas, de forma que se eliminen las arrugas, además de estirar las esquinas y haz que el relleno regrese a su posición correcta.
A la hora de guardarlos en el armario por cambio de estación, debes almacenarlos en un lugar seco y fresco, y para evitar arrugas, no los dobles de forma apretada. También preocúpate porque tenga una ventilación adecuada y esté libre de humedad.
Cómo lavar las sábanas sin arrugas
Si dejamos de lado los edredones y nos centramos en las sábanas, lo primero que hay que tener en cuenta es que hay que prestar atención al material en el que están confeccionadas, puesto que de ello dependerá la elección del programa adecuado en la lavadora. De esta forma, por poner un ejemplo, las sábanas de algodón deben lavarse a mayor temperatura que las sintéticas.
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Para evitar las arrugas es fundamental secarlas de la forma correcta, siendo lo ideal que las sábanas estén bien extendidas y expuestas a la luz de los rayos del sol, si bien esto último no siempre es posible por razones meteorológicas o porque no tengas espacio para ello.
Si vas a utilizar una secadora, se recomienda hacer tres bolas de papel de aluminio del tamaño de una mano e introducirlas en el tambor en el momento en el que haya finalizado el programa de lavado, antes de dar comienzo al secado. Esto evitará la electrificación que puede ser muy perjudicial para las fibras. También puedes usar un perfumador textil con función antiarrugas tras lavarlas para darles el toque final.
Cómo doblar bien las sábanas
Doblar bien las sábanas es importante para que no abulte más de lo debido al estar guardadas y para evitar las arrugas una vez que están colocadas. Para conseguir que queden bien y no tengas que plancharlas, hay varios puntos a tener en cuenta.
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En el caso de las sábanas bajeras con goma tendrás que colocar de pie, para coger la sábana de forma que coloques cada mano por debajo de las esquinas. Luego tendrás que juntar las dos manos para llevar uno de los extremos por encima del otro, para luego estirarlas de nuevo y la cogerás de la misma forma, de dos extremos y repitiendo el mismo tipo de doblez hasta en dos ocasiones. A partir de ahí, extiende sobre una superficie y dóblala varias veces por la mitad.
Por su parte, las sábanas planas, el proceso varía un poco, debiendo empezar por sujetarlas por sus esquinas superiores y luego doblar a la mitad siguiendo el largo. Se debe procurar que quede lo más tensa posible para evitar arrugas. Luego tendrás que ir doblando a la mitad consiguiendo así reducir el tamaño hasta que quede un cuadrado que puedas guardar fácilmente.