Una historia de mariachis y arrieros: la otra crónica del Depor-Celta B
Pese a la goleada, el encuentro dio más de sí fuera del campo que en el césped de Barreiro
15 marzo, 2021 19:22Los dos enfrentamientos entre Deportivo de La Coruña y el RC Celta B han traído cola. Más allá de lo sucedido en el césped de Riazor y Barreiro, donde ambos encuentros tuvieron goles y emoción, las redes sociales no han dejado escapar la ocasión de reencontrar a ambas aficiones. Y es que pese a la menor importancia de #onosoderbi al ser con el filial, había ganas de un enfrentamiento que no se celebraba desde mayo de 2018.
Para la ocasión, un grupo de vigueses llegaron a elaborar una bufanda conmemorativa que se podía comprar en los alrededores del campo este domingo. Pese a lanzar una tirada inicial baja, los creadores reconocían que "multiplicó por diez" sus expectativas iniciales. Y es que el "arrieros somos" de Fernando Vázquez en diciembre dio pie a l
Los mariachis: ¿broma o ridículo?
La posibilidad surgía el sábado por la mañana en Twitter. Una cuenta anunciaba la presencia de mariachis en Barreiro el domingo sin dar más detalles, y aunque terminaría borrando el tuit no se hablaría de otra cosa más durante la previa. Finalmente aparecerían dos horas antes del partido, haciendo las delicias de los más madrugadores.
Para una parte del celtismo, la contratación de estos músicos -que interpretaron el legendario "sigo siendo el Rey" a modo de vacile- suponía un ridículo, más si cabe si el Deportivo terminaba ganando el partido. El deportivismo se frotaba las manos y la mayoría de sus burlas después del partido ironizaban sobre la performance.
Sin embargo, la gran mayoría lo interpretó como un elemento más de la centenaria rivalidad de ambos clubes. Un hecho similar ocurrió en 2017 cuando varios aficionados coruñeses acudieron "disfrazados" de chinos ante la posible vente del club por parte de Carlos Mouriño, finalizando el encuentro con un 4-1 histórico. Tan solo seis años antes, 27 buses del Celta fueron apedreados en Riazor dejando dos menores heridos.
Los recibimientos en el punto de mira
Los recibimientos y despedidas de los autobuses también estuvieron en el punto de mira. El sábado por la tarde, miembros de la peña Riazor Blues despedían a su equipo en Abegondo con bengalas y pancartas; como ya hicieron ante el Pontevedra pero demostrando que no era un partido cualquiera.
TAN SÓ POR TI. pic.twitter.com/xghQnBrP3j
— Riazor Blues (@RB1987Oficial) March 13, 2021
Aunque desde Vigo se ironizó sobre estos hechos, alegando que "parece que juegan una final de la Champions", horas después la Avenida Ramón Nieto vivía imágenes similares. En este caso eran los miembros de Tropas de Breogán, menos numerosos, los que increpaban la llegada del autobús blanquiazul al recinto vigués mientras la gran mayoría de los aficionados disfrutaban del espectáculo a distancia.
Ambiente nos exteriores de Barreiro na chegada do @RCDeportivo antes de xogar diante do @RCCelta B
— En Xogo tvG2 (@EnXogo_tvG2) March 14, 2021
⌚️ 11:30 horas
📺📱 G2 / https://t.co/deo6ge3nIB pic.twitter.com/OsFW0u0fyP
Todas estas imágenes estuvieron en el punto de mira de la sociedad, ante la sensación de aglomeración que ya se había vivido el pasado domingo 7 en la previa del Atlético de Madrid-Real Madrid. Sin embargo, esta vez los aficionados sí estuvieron con mascarillas y salvo casos aislados, la gran mayoría trataron de mantener las distancias de seguridad.
¿Nos volveremos a ver?
No era la primera vez que el Deportivo jugaba en Barreiro. El 15 de septiembre de 1974, un Deportivo que pasaba por la peor etapa de su historia -incluso peor que la actual- visitaba al Gran Peña. En aquella época, el filial oficioso del club contaba con jugadores como Alvelo o los hermanos Santomé.
A falta de una jornada de la primera fase, ninguno de los dos clubes garantizada una de las tres primeras posiciones para seguir soñando con el ascenso a Segunda. De esta forma, la categoría más probable para ambos la próxima temporada sería la nueva Primera División RFEF o Segunda B Pro, compuesta por dos grupos de 20 equipos cada uno.
Tras una temporada con presencia intermitente de público, aunque el no-ascenso suponga una decepción deportiva -y económica en el caso herculino- seguro que ambas aficiones se alegrarían de poder disfrutar este partido en las gradas.