Declaran improcedente el despido de un edil de O Grove al que pusieron un detective cuando estaba de baja

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia considera improcedente el despido de un trabajador del Casino La Toja, también concejal en O Grove, al que la empresa puso un detective para intentar demostrar que una baja era fraudulenta. La decisión del tribunal ratifica la sentencia de un Juzgado de lo Social de Pontevedra.

Tal y como expone Europa Press, los hechos se remontan al año 2023, cuando el hombre recibió una carta de despido del Casino de La Toja, donde trabajaba como croupier. En la misma, la empresa alegaba que se había abierto un expediente disciplinario a raíz de las indagaciones de un detective que habían contratado para seguir al trabajador en el periodo de baja.

El escrito recopila que el hombre había solicitado a la empresa un permiso para no asistir al trabajo durante la campaña electoral en las municipales de 2023, en las que concurría. La empresa denegó la solicitud y posteriormente, el trabajador presentó una baja que se mantuvo hasta el mes de julio.

La empresa, consta en la carta de despido, consideró que "dicha forma de actuar, es decir, una baja laboral inmediata a la negativa al permiso solicitado" causó "sospechas", por lo que "se decidió proceder a una investigación al objeto de comprobar las actividades que ha venido realizando".

Así, en el texto describen, con días y horas, supuestas participaciones del hombre en mítines y actos electorales, momentos con vecinos, reparto de camisetas, participación en cenas y una intervención en el pleno municipal, lo que consideran que indica que la baja era "fraudulenta". "Si podía repartir panfletos electorales, igualmente podía repartir cartas en el casino", asevera el texto.

Sin embargo, la sentencia ratificada por el TSXG afirma que no hay "ni tan siquiera un atisbo de sospecha" de que la baja fuese falsa, "más allá de las elucubraciones" de la empresa. Además, apunta que solo ha quedado acreditado que durante el periodo de baja el hombre participó en un pleno municipal, repartió propaganda un día y jugó a la petanca con unos vecinos, pero sin tomar parte en la campaña electoral que se estaba desarrollando; hechos por los que "no configura un fraude".