Asesinan a un hombre de 45 años en Carabanchel: el autor disparó a la víctima por hacer ruido

El distrito de Carabanchel, en Madrid, ha amanecido esta mañana con una trágica noticia. Un hombre de 45 años ha fallecido alrededor de las 03.00 horas de la madrugada tras recibir dos disparos. Según ha informado la Policía Nacional, el individuo fue atacado en unos bajos de la zona de edificios donde vivía, a la altura del número 120 de la calle de Santa María de la Cabeza, donde fue encontrado por varios agentes tendido en el suelo. 

Fueron dos policías nacionales los primeros en atender a la víctima, a la que colocaron un parche torácico y sobre el que realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar, ya que se encontraba en parada cardiorrespiratoria. Posteriormente, un equipo del Samur continuó con dichas maniobras durante más de 40 minutos, aunque no pudieron hacer nada por salvar la vida del hombre, que tenía una herida en hemitorax y otra en la zona lumbar.

El autor de los hechos ya ha sido identificado. Se trata de un vecino de la zona que, según han informado fuentes policiales, habría acabado con la vida del hombre tras una trifulca por los ruidos que hacía. Al lugar donde han ocurrido los hechos se han trasladado varios agentes de la policía, ya que en el suceso estaban implicadas varias personas pertenecientes a un clan familiar.

Por el momento, agentes del grupo V de Homicidios de la Brigada de Policía Judicial y del grupo de Delitos Violentos de Policía Científica se han hecho cargo de la investigación. Tal y como se ha podido conocer a través de fuentes policiales, el trágico suceso se desencadenó tras una fuerte discusión por el ruido que estaba ocasionando el individuo.

Según estas primeras informaciones, fue una joven la que recriminó al vecino el ruido que estaba ocasionando en el vecindario. A la discusión se unió posteriormente el padre de la joven, que abandonó el domicilio y regresó a los minutos con la compañía de varios amigos. Fue tras volver con los acompañantes cuando efectuó los disparos sobre la víctima, de origen español. La encargada de avisar a la Policía sobre lo ocurrido fue la propia joven, que presenció como su padre intentaba huir tras lo ocurrido.