El "influencer" Naim Darrechi, en busca y captura por no presentarse ante el juez

El influencer mallorquín Naim Darrechi se enfrenta a problemas judiciales. La Fiscalía pide para él una condena de 18 meses de prisión y una multa de 1.200 euros por enfrentarse a la Policía Local de Palma en un botellón que se celebró en esta misma ciudad, y en el que no se cumplían las restricciones dictadas durante la pandemia. El hombre, que tiene más de seis millones de seguidores en Instagram, arremetió presuntamente contra los agentes de policía, uno de los cuales sufrió heridas leves, y él fue reducido y detenido. Ahora mismo se encuentra acusado de delitos de atentado y lesiones. La jueza que instruye el caso ha ordenado su busca y captura después de que Darrechi no se presentara al juicio, que estaba previsto para la semana pasada.

Tal y como dice la información del Diario de Mallorca, los hechos ocurrieron en la plaza Drassana de Palma el 22 de mayo de 2021 por la noche. En ese momento, cientos de jóvenes se habían reunido allí para celebrar un botellón, pese a que en aquella época las reuniones sociales se encontraban limitadas por el coronavirus. Varias patrullas de la Policía Local de Palma fueron al lugar para intentar disolver a la multitud, tras constatar que los jóvenes iban sin mascarilla y no respetaban la distancia de seguridad.

Según la acusación, Naim Darrechi se enfrentó a la Policía e incitó a los jóvenes que se encontraban en aquel momento en el botellón a hacer lo mismo. En los vídeos que grabaron algunos asistentes, y que muchos de ellos acabaron haciéndose virales, se ve cómo tres agentes se abalanzan sobre el influencer y le reducen. Darrechi fue detenido y trasladado al cuartel de la Policía Local de Palma, para horas después quedar en libertad.

Naim Darrechi ya tuvo que hacer frente a un procedimiento judicial por unas declaraciones que hizo en la red social TikTok en las que se jactaba de eyacular sin preservativo y sin consentimiento dentro de sus parejas. El Govern denunció estos hechos en 2021, pero la juez encargada del asunto decidió archivarlo, pues no apreció ningún delito en sus palabras, un punto de vista también compartido por la Fiscalía.