Los fotógrafos ubicados en España y en el resto del mundo suelen hablar de la necesidad, al menos en el mundo profesional, de tener más de un cuerpo de cámara. La opción preferida por muchos son las cámaras Full Frame, es decir, de sensor completo, ya que ofrecen ventajas como la eliminación del recorte en objetivos, entre otras. Por ello, se recomienda tener una APS-C de rango profesional que, en los sectores más altos, esté a la altura. Es justo lo que promete la Canon EOS R7.
Desde que Canon lancase hace ya unos años su gama de cámaras EOS R, esta ha estado conformada principalmente por modelos Full Frame sin espejo. Es el caso de las EOS R, RP, R6 (recientemente actualizada), R5 y R3. Posteriormente, Canon lanzó las Canon EOS R10 y R7, sendos modelos que por primera vez introducía los sensores recortados o APS-C en esta línea de cámaras. La R7 es el modelo superior y tiene una gran ambición: ser la reina de este segmento de cámaras en el mercado profesional.
Hablamos de una cámara que cuesta 1.579 euros (solo el cuerpo, sin objetivos ni accesorios) y se postula como lo suficientemente capaz como para ofrecer las mejores capacidades de los modelos superiores de Canon, como las R5 o R6 pero a un precio más económico. Canon ha creado una rival a batir tan seria que llega incluso a afectar hasta a modelos de su propio porfolio.
Una Full Frame encubierta
Cuando hablamos de cámaras con sensores APS-C, lo común (especialmente en Canon) es encontrarnos con dispositivos mucho más compactos, dejando atrás la idea de que las mirrorless son mucho más compactas que las Full Frame. En este caso, Canon ha intentado equilibrar la balanza ofreciendo un cuerpo que recuerda poderosamente a los dispositivos como las EOS R6 y R5, pero de forma más comedida.
Físicamente, Canon ha vuelto a hacer los deberes. Estamos ante una cámara que en lo estético y en lo referente a la construcción es sencillamente soberbia. Da la sensación de ser profesional, de ser más cara de lo que realmente es, y en cuanto a agarre recuerda poderosamente al voluminoso cuerpo que gastan sus hermanas mayores.
Tanto es así que, en agarre y en calidades de construcción, se asemeja enormemente a una Canon EOS R6, incluso a una R5 salvando las distancias. Esto no son más que buenas noticias, ya que los usuarios que ya estén acostumbrados a estas cámaras profesionales se encontrarán como en casa con esta EOS R7. Los nuevos se las verán con una cámara perfectamente rematada y que da gusto coger y usar.
La EOS R7 une lo mejor de los dos mundos: la bayoneta de la montura RF (en este caso, en una montura bautizada como RF-S) y controles heredados de los modelos superiores, como un dial superior incluido dentro de un joystick junto al visor. Un indicativo de la superioridad en gama de la R7 sobre la R10 es que, a diferencia de su hermana mayor, esta monta una doble ranura para tarjetas SD en el lateral, alejada de la batería.
En definitiva, usar esta cámara se ha convertido en todo un gusto tanto para aficionados como para profesionales. Lógicamente, si buscas una cámara muy compacta que se conjunte bien con objetivos reducidos, sentimos decirte que esta quizás no sea tu opción. Por otro lado, los que ya conocemos el sistema Canon y nos gusta sentir la cámara en nuestras manos, estaremos como en casa, en el mejor de los sentidos.
La reina de las APS-C
La EOS R7 tiene una ardua tarea por delante. No solo tiene que acercarse en rendimiento y prestaciones a sus compañeras de familia, las R6 y R5, sino que debe coger el testigo de las APS-C profesionales más potentes de Canon, como serían las EOS 7D, 80D o 90D. La respuesta corta es que sí: lo ha logrado, y con creces.
Para ello se apoya en un sensor descomunal en resolución, un CEMOS de 32,5 megapíxeles que usa el sistema de enfoque Dual Pixel CMOS AF de segunda generación, con algoritmos de aprendizaje automático. Por ejemplo, este sistema es capaz de seguir a personas, animales, vehículos e incluso aves en pleno vuelo.
El procesador elegido es el Digic X, escogido en otras tantas cámaras de la firma, y entre otras cosas otorga una velocidad de obturación de 15 fotos por segundo en mecánico y 30 en electrónico. En cuanto a vídeo, la EOS R7 es capaz de grabar en 4K 30fps y 4K 60 ps, con sobremuestreo a partir de 7K y 4K 60p. Según Canon, puede enfocar hasta -5 EV de exposición, toda una locura que se suma a la estabilización en cuerpo y objetivo de hasta 7 pasos, llegando a 8 en algunos objetivos RF.
Entre otros detalles, la EOS R7 integra una pantalla táctil de ángulo variable de 7,5 centímetros completamente táctil y una conectividad bastante amplia, con un USB-C 3.2 Gen 2 para alimentación y comunicación, entrada para micrófono, conector jack de 3,5 milímetros y una terminal de control remoto. Desgraciadamente, tiene micro HDMI, algo incomprensible teniendo en cuenta el volumen de la propia cámara.
Si has usado otras cámaras de la gama R de Canon, quizás te suene el sistema Dual Pixel AF de segunda generación. Exacto, es el mismo que llevan los modelos superiores, que cuestan varias veces el precio de esta EOS R7. Como ocurre con la EOS R10, la R7 presume de tener un sistema de enfoque absolutamente brutal, que no falla en prácticamente ninguna situación y que pone a esta R7 a la altura de las mejores del mercado.
Si el enfoque de la R10 ya era increíble, el de la R7 es casi demencial. La detección de elemento scomo animales con IA da unos resultados increíbles, que en caso de combinarse con un objetivo veloz, genera una fluidez y una rapidez que casi dan miedo. No falla un disparo; una vez que 'capta' el sujeto a enfocar, no lo suelta incluso aunque este se mueva en muchísimas direcciones. Te dejamos una galería para que le eches un ojo a las fotos.
Hemos llegado a ponerla a prueba en entornos verdaderamente complicados, como aves en pleno vuelo a bastante lejanía (con un teleobjetivo largo, que dificulta la estabilidad) y en condiciones nocturnas. Un ejemplo: llegamos a enfocar a aves en el puerto de Málaga cuando el sol ya estaba cayendo, y en pleno vuelo, forzando la velocidad de obturación. Efectivamente; la Canon EOS R7 consiguió demostrar su valía.
La R7 no ha hincado la rodilla en ningún momento, llegando a enfocar en prácticamente la totalidad de las situaciones. De nuevo, recuerda poderosamente al enfoque de la Canon EOS R3, una cámara pensada para velocidades extremas y que cuesta por lo menos 5 veces el precio de esta R7.
Si a todo esto le sumamos las ventajas del formato APS-C, detalles como la pantalla de ángulo variable y la estupenda construcción, tenemos entre manos una cámara perfecta incluso para ser el cuerpo principal de un profesional, especialmente en entornos de naturaleza. El vídeo, por otro lado, es especialmente bueno para creación de contenido y vlogging gracias, de nuevo, a su brutal sistema de enfoque.
Si bien la cantidad de megapíxeles no suele ser un indicativo directo que determine la calidad de una cámara, la alta resolución es un punto a mencionar. La nitidez de las tomas que conseguimos con la EOS R7 de Canon está fuera de toda duda; hasta forzando el ISO en números ciertamente altos nos situamos en una calidad de imagen que nada tiene que envidiar a las Full Frame más caras de Canon.
Canon ha tenido a bien dotar a esta EOS R7 de una gran autonomía. Y es que esta cámara cuenta con las baterías LP-E6NH, las mismas que vemos en las cámaras Full Frame de la gama EOS R. Teniendo en cuenta que esta R7 es una APS-C (profesional, eso sí), conseguimos una gran autonomía que en nuestro caso ha llegado a superar los 800 disparos.
¿Me la compro?
Esta cámara cuenta con un precio muy competitivo dentro del sector de las APS-C profesionales: 1.579 euros. Un coste que llega a asemejarse al que cámaras Full Frame de Canon ya tienen, como serían el caso de las EOS R y EOS RP. Y hemos de decir que por este precio, hay muy pocas opciones en el mercado que la superen, especialmente si nos salimos del APS-C.
Si tienes un equipo Canon ya establecido y estás sumergido en el mundo de la fotografía de naturaleza o de velocidad, quizás quieras un segundo cuerpo con buenas especificaciones que no renuncie a nada. En tal caso, esta Canon EOS R7 es una de las mejores opciones del mercado, que sabrá satisfacer tus necesidades fotográficas también en trabajos remunerados.