Meloni no dará Interior al "prorruso" Salvini, que amenaza: "El ministerio o solo daré apoyo externo"

Giorgia Meloni (Hermanos de Italia) será primera ministra, pero la formación de su gobierno será tortuosa, como lo son las relaciones con sus socios. Matteo Salvini (Liga Norte) quiere Interior, ministerio fundamental para todo ejecutivo pero más si cabe para uno de ultraderecha, que pone el foco en las fronteras y la seguridad.

El ultimátum de Salvini se resume en "Interior o solo apoyo externo". Dos factores a tener en cuenta: Meloni no está dispuesta a ceder esta cartera clave que cree legítimamente le corresponde como vencedora de las elecciones y Salvini no lo está a renunciar a ésta -ya la ostentó entre 2018 y 2019- por ser el mayor escaparate y trampolín para recuperar aliento tras un batacazo en las urnas.

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Hermanos de Italia multiplicó por cuatro sus votos respecto a 2018 mientras que entre la Liga y Forza Italia -de Silvio Berlusconi- perdieron 5,5 millones de ellos (3,2 y 2,3, respectivamente). Y Salvini, señalado en sus filas, aprovechará hasta el extremo el hecho de que Meloni le necesita para salvar su partido y también su carrera.

Hay un tercer factor que trasciende de las cuitas entre políticos, de calado: Meloni sabe que la comunidad internacional tiene puestos los ojos sobre ella y que hay temor. Por ello su pacto con Mario Draghi para calmar a la Unión Europea o, de vuelta al asunto, su rechazo a Salvini, visto como prorruso. Meloni ya ha expresado su "apoyo leal" a Volodímir Zelenski y al pueblo ucraniano.

"Unidad de intenciones"

Este miércoles, Meloni y Salvini mantuvieron una primera reunión en el Palazzo Montecitorio, donde tiene su sede la Cámara de los Diputados. El entrecomillado que quisieron los protagonistas que trascendiera es "unidad de intenciones", pero el foco no estaba en los fines, sino en la construcción del gobierno.

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"Ambos líderes han expresado su satisfacción por la confianza recibida de los italianos -se lee en una nota conjunta al término del encuentro-. (...) Han repasado la situación de las prioridades y urgencias en la agenda del Gobierno y del Parlamento, también a tenor de la compleja situación que Italia vive".

Italia 'vive una compleja situación' pero antes Meloni tiene que resolver otros frentes no programáticos. A la exigencia de Salvini con Interior se suma la de Berlusconi con el Senado: quiere presidirlo. Un Berlusconi del que a Meloni también le sobran, entre otras cuestiones, sus elogios a Vladímir Putin o su justificación de la guerra.