El 'increíble Desmond', el niño “drag queen” que lucha por los derechos LGBTI
"Mis padres me apoyan", asegura este pequeño de 12 años que ha convertido en una figura emergente y defensora del colectivo LGBTI estadounidense.
11 marzo, 2019 02:20A sus doce años, cuando Desmond termina su día en la escuela, lo habitual es que vuelva a casa, haga sus deberes y juegue con la tablet. Es lo normal en un chico de su edad.
“Si no tiene nada previsto, termina el colegio, hace sus deberes y juega con el iPad. Cosas normales de niños”, dice a El ESPAÑOL Wendy Napoles, la madre de Desmond. Su hijo Desmond, sin embargo, es a todas luces alguien excepcional. Es una estrella del colectivo LGBTI en Nueva York (Estados Unidos).
A través de redes sociales, Desmond tiene decenas de miles de seguidores, en Estados Unidos y en todo el mundo. Desmond lleva ya un par de años haciendo carrera como “defensor” de homosexuales, bisexuales, transexuales e intersexuales y, ante todo, como “niño travesti” y modelo. En lugar de “drag queen”, Desmond es un “drag kid”. La revista de moda estadounidense Vogue se ha referido a él como “niño prodigio”.
Este preadolescente neoyorquino dedica parte de su tarde para hablar con EL ESPAÑOL en el salón de su casa. Junto a él están su madre y su padre, Andrew. Pero el niño es la estrella. Él es el famoso de la familia.
“Ser famoso es muy divertido, pero también tengo días en los que estoy muy ocupado, aunque la mayor parte del tiempo ser famoso es increíble”, dice Desmond a este periódico. Ésta no es, ni de lejos, la primera entrevista que ofrece este chico de pelo rubio y ojos oscuros. “Casi todos los días tengo llamadas de teléfono de medios de comunicación, entrevistas, desfiles o sesiones de fotos”, cuenta el niño, que atiende al nombre artístico de Desmond is Amazing o “Desmond es increíble”.
Su madre, al escucharlo, matiza: “en un día normal, Desmond se levanta, desayuna va a la escuela y luego, tras la escuela, puede que tenga que ir a una entrevista o a una sesión de fotos. Tratamos de no hacer estas cosas durante la semana pero a veces es inevitable”. Hace unos días, Wendy pospuso la entrevista con este periódico porque a Desmond lo requería una conocida marca de ropa deportiva deseosa de utilizar la imagen del chaval en una campaña prevista para junio, en los días previos a las festividades en Estados Unidos del Día Internacional del Orgullo Gay.
Fue precisamente en una fiesta del Orgullo Gay, hace ya cuatro años, cuando Desmond quiso hacer algo especial en el tradicional desfile de ese evento. Sus padres lo habían llevado con anterioridad a esa fiesta. Un hermano de Wendy es homosexual y la cultura gay siempre ha estado presente en la familia de Desmond. Pero en las fiestas del Orgullo Gay de 2015, Desmond “quiso hacer algo más”, según su padre. Las imágenes de Desmond vestido de “drag kid” causaron sensación.
“Salí a la calle vestido así y se hizo viral. Fue entonces cuando me hice de verdad famoso”, cuenta el propio Desmond, aludiendo a su primer disfraz en un evento masivo. Ahora, disfrazarse exageradamente de personaje femenino es para él algo parecido a una profesión. “Yo tengo como trabajo hacer espectáculos de drag, mi padre se ocupa de las calefacciones”, dice Desmond. Wendy, su madre, aclara las cosas: “Yo ayudo a Desmond a llevarle la agenda y hacerle algunos trajes”.
Comprometido con la causa LGTBI
El día a día de Desmond, sin embargo, consiste fundamentalmente en ir a la escuela, donde dice disfrutar especialmente de las ciencias sociales y las actividades artísticas. “Me gusta la antigua Grecia y, cuando estoy sólo, me gusta pintar, especialmente pintar mapas de ciudades y jugar con el ipad”, asegura Desmond. Más que un trabajo, según dice el propio Desmond, “vestirse de drag queen es una forma de arte y una forma de expresión”. “A mí me encanta mirar espectáculos de drags”, añade.
Desmond parece tener muy integrado su papel como un actor comprometido socialmente al más puro estilo drag queen. En el movimiento gay se tiene asumido que las drag queen han jugado un papel en favor de la defensa de los derechos del colectivo homosexual. Los disturbios del 28 de junio de 1969 en Nueva York, de los que surgió el movimiento de defensa de los derechos del colectivo gay, se desencadenaron después de que un grupo de drag queens se resistiera a ser detenidos por la policía en Greenwich Village, en el barrio neoyorquino de Manhattan. Tal vez por eso habla Desmond de sus intenciones como “defensor” del colectivo LGBTI.
“Yo quiero ayudar a la gente que no se siente bien consigo misma, a otros niños, por ejemplo, de la comunidad transgénero, y a gente también de otros países. Por ejemplo, hay gente de otros países, gente de la comunidad gay, que no tiene derechos en Paquistán o en Rusia. En Paquistán puedes acabar en prisión por ser gay. En Russia también tienen problemas”, dice Desmond. “Estoy haciendo que los otros niños conozcan muchas causas”, abunda.
Un fenómeno en redes sociales
A Desmond se le ha visto también en manifestaciones en contra de la violencia generada por las armas de fuego en su país, como aquella organizada por el colectivo de Homosexuales contra las Armas durante la última semana de la moda de Nueva York. “Me encanta hacer desfiles, acudir a las manifestaciones y también participar en actos benéficos”, afirma Desmond sobre su particular activismo.
Su madre, una mujer sonriente que trabajó como responsable en el sector de la construcción antes de dedicarse a organizar la vida de estrella de su hijo, habla orgullosa sobre Desmond. “Él hace mucho trabajo por la comunidad LGBTI aquí. Se le conoce mucho en Nueva York y en el país, también en el extranjero. En general, está inspirando a mucha gente joven”, dice Wendy.
El activismo de Desmond y familia no está exento de críticas. En internet pueden leerse no pocos comentarios críticos dirigidos a los padres del niño. Hay quien dice que los padres están “abusando” del menor. De acusaciones de este tipo se ha hecho eco, por ejemplo, Breitbart News, el portal de noticias de la ultraderecha estadounidense.
Aparentemente ajenos a este tipo de comentarios, Wendy y su hijo hacen memoria para hablar de los países en los que se encuentran los seguidores de Desmond en mayor número. Además de fans en Estados Unidos, hay gente que sigue al drag kid en Alemania, Brasil, Canadá, México y Reino Unido. Sólo en Instagram, a Desmond le siguen 145.000 usuarios. En otras redes sociales, se pueden ver vídeos de él en sus shows haciendo de modelo, de drag kid o dando consejos sobre cómo maquillarse.
No parece ser, en modo alguno, que Desmond esté haciendo sólo temporalmente de niño prodigio de los espectáculos LGBTI. “Me gustaría ser artista y hacer espectáculos de drag queen toda mi vida”, mantiene el niño. Sus padres, por detrás, asienten. “Mis padres me apoyan”, dice Desmond. “Le apoyamos al 100%”, asegura la madre. “Yo le apoyo siempre y cuando me devuelva el ipad”, concluye su padre, bromeando.