“El atentado contra Luis Manuel Díaz es como si en un mitin con Rivera asesinan a Arrimadas ”
Lilian Tintori, principal cabeza visible de la oposición venezolana, se encontraba con el asesinado. El portavoz de Tintori en Europa califica el ataque de “terrorismo de estado”.
26 noviembre, 2015 12:04Noticias relacionadas
Este miércoles (madrugada del jueves en España) ha muerto a tiros el líder opositor en el estado de Guárico, Luis Manuel Díaz, en plena campaña electoral ante los comicios venezolanos del próximo 6 de diciembre. El fallecido secretario general de Acción Democrática en la región se encontraba en un mitin junto a Lilian Tintori, principal cabeza visible del partido Voluntad Popular (VP) como esposa del dirigente opositor preso, Leopoldo López. El portavoz de VP en Europa, Alberto Pérez-Levy, evalúa el asesinato en EL ESPAÑOL:
¿Iban a por él o a por Lilian Tintori?
No somos investigadores policiales, pero en el momento en que ocurrió, la forma y los resultados finales, la tesis que manejamos es que se cometió un atentado. Si no es directamente contra Lilian, sí es contra su entorno.
Es como si Albert Rivera fuera a hacer campaña en Cataluña y saliera asesinada Inés Arrimadas.
La avioneta en la que viajaban [camino al mitin] tuvo complicaciones cuando iban llegando y en tierra ella [Tintori] estaba muy preocupada, pero decidieron seguir con el evento.
Ustedes ya han denunciado varios ataques contra la coalición opositora Mesa de Unidad Democrática. ¿Cuántos han contabilizado?
Con el llamado a la violencia desde el gobierno, van 18 ataques con armas de fuego a los diferentes candidatos opositores en diferentes lugares del país. Los más recientes fueron en Guarena al candidato [Miguel] Pizarro y hubo otro ataque a[l secretario ejecutivo de la MUD en Caracas] Stalin González en Caracas, que se encontraba acompañado por Gladys Castillo, la segunda de a bordo de Leopoldo López [líder de Voluntad Popular y marido de Lilian Tintori encarcelado por “instigar” a la violencia en las manifestaciones de la oposición de febrero de 2014 que resultaron con más de 40 fallecidos, según la Justicia venezolana, pero considerado preso político por Amnistía Internacional].
[Henrique] Capriles fue atacado la semana antepasada con disparos a su equipo. Impactaron en algunos vehículos. Y hace dos días hubo otro intento, pero no durante el mitin, sino antes y después.
Ellos no atacan durante el mitin, porque están los medios de comunicación.
¿Cree que los atacantes son enviados del Gobierno?
Con toda responsabilidad te digo que son enviados directamente por el PSUV [el partido del Gobierno de Nicolás Maduro]. Militan, porque además van identificados con las consignas del partido oficialista, con la vestimenta. Portan franelas o gorras y dicen abiertamente “viva Chávez, viva el PSUV”. Se identifican, no guardan ningún reparo. Unos sí van con la cara tapada o gafas. Fomentan el terror.
¿Lo calificaría de terrorismo?
Es terrorismo de estado, inclusive aupado y fomentado desde el más alto gobierno. Maduro dijo que si llegamos a ganar las elecciones, ellos salen a la calle y son candela. Diosdado Cabello [presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela] también lo ha dicho. Ellos llaman a la defensa de la revolución y lo fomentan.
¿Por qué les interesaría Luis Manuel Díaz?
Como opinión personal, iban a por los líderes de la oposición en ese acto, encabezado por Lilian Tintori y él como representante del partido más fuerte en ese estado por la Unidad. Pudo haber sido Lilian perfectamente.
¿Le conocía personalmente?
No, por referencias. Tomó la dirección hace seis meses en el estado circunstancialmente, porque había fallecido su antecesor. Era un dirigente sindical, de base, que trabajaba al lado de los trabajadores. Una persona humilde que deja dos hijos.
¿Con los ataques que denuncia la MUD, cómo se plantea el resto de la campaña electoral?
Ahora se está preparando un dossier internacional para documentar esto. Esto es una escalada que de cara al 6 de diciembre va a ir a más. El Gobierno no ha mostrado ninguna intención de proteger, que es su responsabilidad, sino todo lo contrario. Es un estado donde el estado no garantiza los derechos humanos de nadie en general, pero en este caso los de los candidatos que están en la contienda.