5 ideas erróneas sobre el envejecimiento de la piel

El envejecimiento es una realidad ineluctable que se percibe especialmente en la piel. Al igual que numerosos procesos naturales, conlleva mitos y verdades persistentes.

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Gema Cabañero, directora de I+D+I de 180 the concept nutricosmética, aclara: “El proceso del envejecimiento no puede pararse, pero sí podemos combatir sus efectos, retrasarlos y tener una vida más larga y con buena salud. Entre dos personas de 50 años puede haber una diferencia de hasta 20 años con respecto al envejecimiento de sus tejidos, estos resultados dependerán de los cuidados que prodiguemos a nuestro organismo”.

Los expertos de FOREO desmontan otros de los mitos más comunes:

1. Sonreír demasiado provoca líneas de expresión: una de las ideas erróneas más comunes sobre el envejecimiento de la piel es que sonreír demasiado provoca líneas de expresión y arrugas. Aunque es cierto que las expresiones faciales repetitivas pueden contribuir a la formación de arrugas, sonreír es realmente bueno para la piel.

   Sonreír refuerza el sistema inmunitario, ayuda a combatir los radicales libres y aumenta el flujo sanguíneo en el rostro, todo lo cual puede ayudar a mantener el mejor aspecto de la piel. Es preferible estar sonriendo y feliz que andar por ahí con cara de no tener ninguna alegría en la vida. Así que sigue sonriendo y no olvides que la sonrisa es la única curva que puede arreglar muchas cosas.

2. Puedes preservar la juventud: ser siempre joven es un concepto muy popular, pero no está basado en la realidad. No hay forma de detener por completo el proceso de envejecimiento, pero hay cosas que se pueden hacer para ayudar a ralentizarlo. 

   Por ejemplo, usar protección solar y evitar el tabaquismo te ayudará a proteger tu piel de los daños que pueden acelerar el proceso de envejecimiento. No se puede volver atrás en el tiempo, por mucho que se quiera. Pero sí puedes hacer algo para que tu piel luzca, no más joven, sino sana. Encuentra una rutina de cuidado de la piel que se adapte a ti y asegúrate de usar protección solar todos los días, incluso si está nublado. 

   Además, no te olvides de la alimentación sana y el ejercicio regular, porque hacen maravillas no sólo para tu piel, sino también para tu salud en general.

3. El acné desaparece con la edad: el acné es una afección cutánea común que puede aparecer a cualquier edad. Si bien es cierto que el acné suele empezar en la pubertad y mejorar con la edad, algunas personas siguen sufriendo brotes hasta bien entrada la edad adulta. Si estás luchando contra el acné, no desesperes: existen muchos tratamientos eficaces que pueden ayudarte a limpiar tu piel. Hablando de tratamientos para el acné, debes saber que no funcionan igual para todos. Tendrás que experimentar un poco para encontrar lo que mejor te funcione. Algunos de los mejores tratamientos para el acné son el ácido salicílico o el aceite de árbol de té. Después de todo, puedes comprobar cuáles son los mejores ingredientes naturales y activos para combatir el acné.

4. Más retinol es mejor: el retinol es una forma de vitamina A que puede encontrarse en muchos productos antienvejecimiento para el cuidado de la piel. Aunque el retinol es beneficioso para la piel, utilizarlo en exceso puede ser más perjudicial que beneficioso.

   En concreto, a algunas personas les encanta utilizar el retinol. Ayuda a que la piel se desprenda de las capas superficiales opacas, dejando un brillo más suave por debajo. Esto no significa que el retinol tenga buenos efectos. 

   Desde luego, no es de uso diario. Cuando se utiliza en exceso, el retinol puede causar irritación, enrojecimiento y descamación. Es importante empezar poco a poco con el retinol y aumentar su uso gradualmente a medida que la piel se adapte.

5. La dieta y el envejecimiento no están relacionados: aunque la dieta no influye en el envejecimiento, podemos elegir nuestros alimentos. El azúcar que causa inflamación afecta a los órganos internos que influyen en el envejecimiento.

   ¿Te interesa ayudar a reducir el envejecimiento de tu hijo? Cambiar de dieta y evitar sustancias nocivas es bueno para la salud. Otra buena opción son las almendras y el marisco. A medida que envejecemos, nuestra piel experimenta cambios.

   Algunos de estos cambios se deben al proceso natural de envejecimiento, mientras que otros son el resultado de la exposición a factores de estrés ambiental. Entender la diferencia entre estos dos tipos de envejecimiento puede ayudarte a cuidar mejor tu piel.

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